miércoles, 30 de septiembre de 2020

 

Feminismo y educación sexual

Oscar Yescas Domínguez

30 de septiembre de 2,020


Los grupos feministas que luchan por el derecho al aborto, en contra del feminicidio y de la violencia hacia la mujer, no deben verse a sí mismas como grupos aislados en su lucha, en realidad el feminismo no es una lucha sólo de las mujeres, es una lucha de todos que involucra a hombres y mujeres. Porque el origen de la desigualdad de género se encuentra en la construcción social de las imágenes que tenemos acerca de lo que significa ser mujer y lo que significa ser hombre. ¿Se puede ser feminista siendo hombre? Mi opinión personal es que sí, porque el feminismo es una ideología que involucra cambios en los comportamientos de hombres y mujeres.

La lucha feminista será feminista o no será, es verdad, pero no confundamos esta última frase que significa que la liberación social debe incluir necesariamente la liberación de la mujer de las condiciones de opresión que padece en el marco de una sociedad patriarcal y machista. En ese sentido, la lucha por la liberación de las mujeres, es también la lucha por la liberación del hombre de los comportamientos aprendidos en base a roles sexuales estereotipados. Una democracia sin respeto a los derechos de la mujeres, no es democracia. La construcción de un mundo mejor es labor conjunta de hombres y mujeres participando juntos en la construcción de nuevas imágenes de lo que significa ser hombre y lo que significa ser mujer.

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/02/noes-necesario-ser-mujer-para.html

Los grupos feministas deben luchar al lado de los grupos ecologistas que luchan por detener la contaminación y destrucción de nuestro medio ambiente por un consumo exagerado que genera una enorme cantidad de basura. El sistema nos ha convertido en homo consumens tanto a hombres como mujeres. La violencia hacia las mujeres proviene de un sistema social que utiliza la imagen sexualizada de la mujer para promover el consumo, reduce a la mujer a la condición de objeto sexual que puede ser comprado, utilizado y desechado. Los grupos ecologistas luchan por la defensa de espacios públicos en donde puedan encontrar opciones de diversión familiar, oportunidades para ejercer deporte, espacios seguros donde las mujeres y hombres puedan circular con total libertad y seguridad sin sentir el temor de que serán secuestradas, violadas desparecidas, hostigadas, etc.

Los grupos feministas deben unirse a los trabajadores organizados en sindicatos que sufren mutilaciones en sus contratos colectivos del cual se eliminan derechos laborales conquistados a través de luchas sociales que contaron con la participación unida de hombres y mujeres, los trabajadores sin distinción de género ven desaparecer el derecho a la estabilidad en el empleo, el derecho a la jubilación, el derecho a la salud, etc. Las mujeres también son trabajadoras y sufren en los ambientes laborales casos de acoso sexual, de discriminación sexual y limitación de sus derechos laborales, es decir las mujeres sufren de discriminación sexual. Los contratos colectivos deben incluir cláusulas que contemplen igualdad de oportunidades para hombres y mujeres, igualdad de salarios para ambos géneros y medidas para evitar al acoso sexual y discriminación sexual.

Los grupos feministas deben recordar que la lucha feminista coincide con la lucha por la democracia, expresada en una real equidad de género, en un respeto a las mujeres en una democracia al interior de los hogares, en una educación que permita construir nuevas imágenes de lo que significa ser hombre y lo que significa ser mujer. Imágenes que terminen con los privilegios masculinos de los que disfrutamos los hombres por el simple hecho de ser hombres (ausencia de responsabilidad en las tareas del hogar, mayor libertad para salir y llegar tarde, menor supervisión de los padres, etc.).

La lucha por el derecho al aborto, en contra de la violencia hacia la mujer y por un alto al feminicidio forma parte de la lucha por una democracia participativa, por una justicia para todos y por una verdadera igualdad social.

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/09/elaborto-como-derecho-humano-de-toda.html

Los hombres y las mujeres no somos enemigos mutuos, somos las víctimas de un sistema social que debe evolucionar culturalmente y cambiar radicalmente la forma como concebimos la imagen de la mujer y la imagen del hombre. Recordemos que la lucha feminista de los setentas nos reveló que lo personal es político, olvidemos el uso de la violencia física para defender nuestros derechos y conquistar nuevos derechos y aboguemos por la conscientización colectiva a través de una educación política que involucre a hombres y mujeres en la construcción de un mundo en el que la igualdad social se exprese en una verdadera equidad de género.

De manera inevitable cuando se habla de mujeres y violencia asociamos miles de imágenes en las cuales las mujeres son objeto de violencia: violencia en el hogar, maltrato a las mujeres, violencia sexual hacia las mujeres (violaciones), mujeres siendo asesinadas por hombres, explotación sexual de mujeres a través de la prostitución. A lo largo de la historia encontramos una abundante narrativa en la cual los hombres ejercen la violencia sobre las mujeres en el contexto de una sociedad patriarcal, machista, en la que impera una falocracia, es decir, una dominación cultural y simbólica que ejercen los hombres sobre las mujeres que se guían por una ideología misógina y sexista para perpetuar una desigualdad de género que es el origen de varios problemas sociales que tienen como común denominador la ausencia de equidad de género y de educación sexual.

En este contexto, ¿cómo podría explicarse la violencia de mujeres contra mujeres que se observó este pasado día internacional por la despenalización del aborto en latinoamérica y el Caribe en la ciudad de México? Cientos de mujeres policías entrenadas para proteger al público fueron objeto de agresiones por parte de mujeres encapuchadas que participaban con grupos feministas exigiendo la aprobación del derecho al aborto por parte de las mujeres. ¿Cómo podría justificarse la violencia de una manifestante femenina que utiliza un martillo como arma para golpear a mujeres policías que no respondieron a los intentos de provocación y sólo se limitaron a protegerse a sí mismas de las agresiones de manifestantes feministas?

La violencia física en la historia de las luchas sociales en México ha provenido por parte de fuerzas policiacas utilizadas como cuerpos represivos para someter a protestantes y criminalizar las protestas sociales. Pero, recordemos que México ya no está gobernado por el Prianprd, desde que tomó el poder Andrés Manuel López Obrador se comprometió a no usar la policía y ejército en contra del pueblo y hasta el momento ha cumplido su palabra. Al contrario, hemos visto escenas de violencia de ciertos grupos e individuos en contra de elementos de la Guardia Nacional sin que éstos respondan usando sus armas, algunas escenas han sido realmente humillantes no sólo para ellos, sino para todo el pueblo mexicano que ve con estupor como nuestras fuerzas armadas se doblegan ante los insultos y amenazas emitidos por caciques o personas que perdieron los privilegios que gozaban en los sexenios anteriores.

En los últimos años los grupos feministas en México se han caracterizado por el uso de prácticas de vandalismo y el uso de la violencia sin sentido (destrucción de monumentos, edificios, rotura de cristales, etc.) en las marchas que han realizado. Lo digo abiertamente las demandas son justas, los métodos son cuestionables. Sé que me arriesgo a enfrentar la intolerancia por parte de algunos grupos feministas, al igual que he enfrentado la intolerancia de integrantes de Morena cuando critico el discurso de la Cuarta Transformación en un país donde sigue vigente la corrupción y aumentando la desigualdad social, sobre todo cuando cuestiono la incongruencia entre el discurso y la acción.

Mi opinión como simple ciudadano que disfruta de la libertad de expresión en este país es que considero muy lamentable el uso de actos de violencia utilizados en las marchas de grupos feministas, sobre todo en ésta última marcha en la que demandan la despenalización del aborto en México. El mismo pesar que sentí al ver la humillación de que fueron objeto los elementos de la Guardia Nacional por diversos ciudadanos, lo sentí al ver al escuadrón de mujeres policías ser agredidas por elementos de los grupos feministas que se manifestaban por “una causa justa, usando una forma equivocada” para demandar el derecho del aborto para las mujeres.

En las luchas sociales hay diferentes formas de expresar la rebeldía, la frustración y el coraje, todas deben enfocarse en la demanda de lograr un cambio social o en la conquista de un derecho humano. Siempre debemos partir de la premisa de que nuestra libertad termina donde empiezan los derechos de los demás.

En el caso de las mujeres policías agredidas sus derechos humanos fueron violados por quienes dicen que luchan por otro derecho humano. Algo no cuadra, algo no está bien cuando se agrede a otras personas a nombre de luchar por un derecho colectivo y sobre todo cuando unas mujeres agreden a otras mujeres a nombre de conquistar derechos para todas las mujeres. La lógica, el sentido común me dice que algo se está pervirtiendo, deformando, utilizando y manipulando.

¿A quién beneficia que surja el caos en estos momentos en México?, ¿A quién beneficia la desestabilización social, la vía pacífica a través de la cual se está transformando a México? Insisto, mi opinión personal es que aparentemente en México la derecha se está montando en el movimiento feminista infiltrando elementos que llevan la agenda oculta de provocar caos, desorden y temor utilizando como patrón de comportamiento la violencia, el vandalismo, la destrucción y el daño corporal. Mujeres golpeando mujeres, manifestantes feministas agrediendo a fuerzas policiacas integradas por elementos femeninos intentando provocar con estos actos de violencia física una posible respuesta de violencia institucional de un gobierno electo democráticamente que ha comprometido más de una vez su palabra de no usar las fuerzas policiacas o militares para reprimir al pueblo que lo eligió.
Este mismo gobierno que en la Cámara de Diputados los representantes de Morena encabezados por Wendy Briceño Zuloaga han estado trabajando discutiendo y promoviendo la aprobación de una ley con fundamento científico que atienda el problema social generado por la penalización actual que prohíbe la práctica del aborto en México pero que no impide su práctica clandestina que provoca miles de muertes de mujeres al año.

Flaco favor hacen los grupos feministas en México cuando marchan exigiendo el derecho al aborto y utilizan la violencia sin sentido porque lo único que están logrando es crear la imagen de intolerancia y de violencia asociados a una causa justa del movimiento feminista. Usar la violencia en contra de autoridades del nuevo gobierno representado por Amlo y Morena, en nombre de una causa justa que ya se está atendiendo, sólo induce a pensar que existe una agenda oculta que persigue objetivos no relacionados con la aprobación social (aceptación de la población) de la legalización de la práctica del aborto.

Estoy de acuerdo que en el tema del aborto la opinión de las mujeres es lo principal, es un tema que sólo las mujeres deberían decidir, pero que sin embargo, continúa generando polémica y oposición de parte de grupos conservadores que defienden la desigualdad de género y confunden un problema de salud pública con una demanda de libertinaje sexual.

Aún suponiendo que se logre aprobar el aborto voluntario en todo el país, el problema no se resuelve con un simple decreto, quienes quisieran abortar seguirían enfrentando las restricciones familiares y el rechazo por parte de ciertos sectores de nuestra sociedad. Aparte de la aprobación de una ley que permita la libertad para abortar a las mujeres que así lo deseen (con la cual se terminaría con la práctica del aborto realizado en forma clandestina y que es la causa de la muerte de miles de mujeres al año en México y de el confinamiento en prisión de cientos de ellas), se necesita impulsar e institucionalizar programas de educación sexual en todos los niveles del sistema de educación formal en nuestro país.

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/06/la-educacion-en-sexualidad-humana-como.html

Una educación sexual integral y científica que nos ayude a diferenciar la sexualidad del sexo, a construir un modelo integral de sexualidad humana que permita construir nuevas imágenes de hombres y mujeres basados en relaciones de igualdad, respeto y justicia. Esta educación sexual ayudaría a terminar con los grandes problemas sociales originados por ausencia de educación sexual: Abortos clandestinos, abusos sexuales de mujeres, hostigamiento sexual callejero en contra de mujeres, violencia en el hogar, violaciones, desapariciones y asesinatos de mujeres, etc.

Debemos reflexionar sobre la presencia de una desigualdad sexual en nuestra sociedad que nosotros estamos perpetuando, necesitamos ver que la liberación sexual y social de las mujeres representa también una liberación de los hombres, al dejar atrás el seguimiento de roles sexuales estereotipados que no corresponden a los tiempos actuales que presentan una tendencia a la democratización de nuestras vidas sociales y personales. La manera de lograrlo es a través de la implementación de programas de educación sexual que promuevan equidad de género, respeto a los derechos humanos y sexuales de hombres y mujeres.

La mejor arma para cambiar esta realidad que afecta tanto a hombres como mujeres es la educación sexual y política que nos permita comprender la necesidad de participar en política, partiendo de la premisa heredada de los movimientos feministas de los setentas de que “lo personal es político”. La construcción de la democracia social no puede lograrse sin una revolución feminista que cambie las relaciones entre hombres y mujeres en base a una equidad de género. Participemos de manera activa, consciente y comprometida en la construcción social de nuevas figuras de la mujer y del hombre en cuyo significado podamos incluir la igualdad de género por la que tanto han luchado hombres y mujeres en el pasado y que todavía se sigue considerando una utopía porque no se refleja en la realidad.

Una educación sexual permite avanzar en el proceso de autoconocimiento y autoaceptación, además permite un adecuado conocimiento y aceptación de los demás dentro de un marco social establecido. Una educación sexual integral se define como un proceso de cambio personal y cambio social. La verdadera educación sexual integral permite cambios de actitudes y valores humanísticos. Genera seguridad, propicia la autonomía, el juicio crítico, la convivencia enriquecedora.

Una educación sexual integral permite educar a las personas acerca de su condición de ser humano con derechos sexuales tales como: libertad sexual, autonomía sexual, privacidad sexual, igualdad sexual, placer sexual, expresión sexual, asociación sexual, derecho a información sexual y sobre todo el derecho a hacer elecciones reproductivas y responsables (Declaración sobre los derechos sexuales. Congreso de la ASOCIACIÓN mundial de Sexología realizado en Valencia, España en 1997 y ratificada en Hong Kong en 1999).

Este es el fundamento teórico y legal que impulsa los movimientos actuales que luchan por la despenalización del aborto a nivel internacional, ya que están en sintonía con el derecho de toda persona a la autonomía sexual, a la libertad de tomar elecciones reproductivas libres y responsables, el derecho a decidir qué hacer con su cuerpo sin dejarse influir sobre los demás. Detrás de estos movimientos que demandan educación sexual está una masa de conocimientos científicos derivados de múltiples investigaciones que han logrado desmitificar el tema de la sexualidad humana y han concluido en a redacción de una declaración de derechos sexuales. La educación sexual integral es hoy una respuesta al derecho sexual de toda persona de recibir información sexual basada en investigaciones científicas. La educación sexual es hoy una demanda social que debe enarbolarse por todo luchador social que aspire a construir un mundo en donde realmente impere la democracia, la justicia y la igualdad social. Apoyemos el cambio social educándonos en sexualidad humana para construir una sociedad basada en un verdadero respeto hacia todas las personas sin discriminación alguna.


El gato político news: Me pegaron con un martillo, no les importa darte en la cabeza. Se lamenta policía herida en marcha

https://elgatopolitico.news/2020/09/30/me-pegaron-con-un-martillo-no-les-importa-darte-en-la-cabeza-se-lamenta-policia-herida-en-marcha/?fbclid=IwAR2r39SXVZ3AJB4M5iE91FsiEZ9iuM4LXTXLUC74YYiHY4ZOr_WDY81MgWo


Yescas, Oscar La educación en sexualidad humana como contribución al cambio social

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/06/la-educacion-en-sexualidad-humana-como.html

Yescas, Oscar: La construcción de la equidad de género

https://oscaryescasd.blogspot.com/2018/10/la-construccion-social-dela-equidad-de.html

Yescas, Oscar: Notas sobre la condición femenina

https://oscaryescasd.blogspot.com/2018/10/notas-sobre-la-condicionfemenina-desde.html

Yescas, Oscar: democracia y educación sexual

https://oscaryescasd.blogspot.com/2018/10/democracia-yeducacion-sexual-oscar.html

Yescas, Oscar: La revolución del siglo XXI tiene rostro de mujer. https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/08/larevolucion-del-siglo-xxi-tiene-rostro.html

Yescas, Oscar: El aborto como derecho humano de las mujeres https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/09/elaborto-como-derecho-humano-de-toda.html

Yescas, Oscar: No es necesario ser mujer para declararse feminista

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/02/noes-necesario-ser-mujer-para.html

Yescas, Oscar: En defensa de las mujeres

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/08/endefensa-de-las-mujeres-oscaryescas.html

Yescas, Oscar: La revolución feminista en México

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/08/larevuelta-feminista-en-mexico.html


viernes, 25 de septiembre de 2020

 

La desigualdad social y la tozudez al desnudo

Oscar Yescas Domínguez

25 de septiembre de 2,020



Algo que aprendí durante los 33 años que trabajé como profesor-investigador de tiempo completo en la Universidad de Sonora es que para ser científico no es suficiente la imagen estereotipada del “intelectual” que usa lentes (como muestra del desgaste visual por tantas horas dedicadas a la lectura), rostro con barba y uso de bata blanca.

Ser científico es realmente una actitud hacia la vida que requiere estar en una constante “alerta epistemológica” como lo plantea Gastón Bachelard en su libro La formación del espíritu científico. Esta alerta epistemológica se da en diferentes niveles, el primero de ellos es el mantener una actitud vigilante y reconocer en los hechos de nuestra vida cotidiana los problemas sociales que afectan a nuestra comunidad. Hechos que para la mayoría podrían pasar desapercibidos o considerados como “normales” pero que representan los síntomas de un verdadero problema social.

El segundo nivel de la alerta epistemológica es elegir adecuadamente las fuentes de información que nos ayudan a reconocer el entorno social en el que nos encontramos. Este nivel adquiere una gran importancia debido al tsunami de información que recibimos todos los días a través de redes sociales, twitter, televisión, prensa, radio, etc.

Un tercer nivel de la alerta epistemológica sería elegir adecuadamente los métodos de investigación para abordar el problema social y realizar una intervención que contribuya a generar consciencia del problema detectado y contribuir su solución.

La epistemología estudia los fundamentos y métodos del conocimiento científico y nos ayuda a reconocer los conocimientos no científicos de los conocimientos científicos, considerando los aspectos histórico, social y psicológico. Partiendo de las premisas anteriores y considerando que la observación es una de las técnicas que forman parte de los métodos de investigación, quiero compartir lo siguiente:

Hoy salí de mi casa a recoger unas medicinas del Hospital Isssteson, en la entrada de la farmacia del nosocomio se encuentra un joven con una carreta en la que vende miel de abeja y productos derivados de la misma. Cada vez que voy lo encuentro en ese lugar y siempre en la misma posición, sentado, encorvado, sin usar cubrebocas, mirando su celular completamente abstraído del lugar donde se encuentra. Sólo si alguien se acerca a pedirle un producto es cuando sale de su abstracción, aparentemente el mundo no existe a su alrededor.

Todos los días de la semana está en su puesto de venta, firme como un soldado, sin quejarse, abstraído en su teléfono celular, sin importar las altas temperaturas como las de hoy que llegaron a los 43 grados centígrados, sólo protegido de los rayos del sol por las sombras del árbol junto al cual colocó su puesto de ventas. Anteriormente estaba otro joven en ese mismo puesto, con aquél me hice su cliente y regularmente le compraba miel de abeja que me encanta, aún cuando soy diabético. Ahora está este chico que luce aún más joven e inexperto, hoy que fui por medicinas al Hospital Chavez, al verlo el día de hoy recordé a la cantante argentina Mercedes Sosa cantando a mi oído “En este momento, hay un niño en la calle".



Por las recientes lluvias en Hermosillo se elevaron las temperaturas y llegaron a hoy a los 43 grado centígrados por lo que hacía un calor insoportable. Quizá para la mayoría no sea algo notable o digno de comentario alguno ver a este joven, porque hay miles como él o mas bien, millones como él trabajando porque no les queda de otra. ¿qué tiene de extraordinario si por las calles de nuestras ciudades hay cientos o miles como él?

Desde una perspectiva psicosocial representa una imagen de la desigualdad social que aún sigue siendo invisible para millones de personas en pleno siglo XXI, algo que en lo personal considero inaceptable y me niego a que sea parte de la “normalidad” de nuestras vidas, porque representa una violación a los derechos humanos de nuestra juventud.

De manera inevitable la imagen me hizo recordar cuando trabajaba como profesor universitario y les decía a los alumnos que tomaron mis seminarios, que ellos eran unos jóvenes privilegiados que disfrutaban de la oportunidad de asistir a la Universidad a estudiar, una oportunidad negada a millones de jóvenes en nuestro país y en el mundo entero y que sin embargo, veía a algunos de ellos que perdían su tiempo y desaprovechaban esa oportunidad al no tomar en serio su condición de estudiantes universitarios, al ver que algunos se presentaban a clases sin haber leído los materiales o al no entregar las tareas asignadas.

Ver a este joven pasar la mayor parte del día en ese lugar a la intemperie y en esa posición me parece un claro ejemplo de los crímenes de la paz social que nos denunciaba el psiquiatra italiano Franco Basaglia cuando afirmaba que la paz social que disfrutábamos se basaba en el ejercicio de una serie de crímenes sociales que se cometían en su nombre. Enriquecimiento de unos cuantos a costa de la pobreza de millones de miembros de nuestra sociedad, si alguien protesta por el desempleo, bajos salarios, corrupción, antes de llegar al poder Andrés Manuel López Obrador al poder, se criminalizaba la protesta y trataba a protestantes como delincuentes que “alteraban la paz social”.

Pensemos de manera objetiva: ¿Acaso no es un crimen privar a nuestra juventud del derecho a la educación, del derecho a la alimentación, del derecho al deporte, del derecho al esparcimiento, del derecho a un trabajo digno? ¿Para alguien tiene sentido la declaración universal de los derechos humanos?, le pregunto a quienes leen estas líneas ¿conocen sus derechos humanos?

Cuando en mis cursos de educación en sexualidad humana les preguntaba a mis alumnos si conocían sus derechos sexuales, me miraban perplejos como diciendo ¿tenemos derechos sexuales?, luego les preguntaba si conocían sus derechos humanos y sólo unos cuantos atinaban a mencionar agún derecho, pero era evidente que ignoraban la declaración universal de los derechos humanos, algo inconcebible en pleno siglo XXI. https://www.un.org/es/universal-declaration-human-rights/

Si esta ignorancia se observaba en estudiantes universitarios, ¿qué podemos esperar de una inmensa mayoría de los mexicanos que como, el joven de esta imagen, no tuvieron la oportunidad de asistir a una universidad para educarse y se vieron obligados a salir de sus casas para trabajar conseguir dinero y poder subsistir?

La mayoría de las personas utiliza sus teléfonos celulares para navegar y distraerse pero no para educarse o informarse. El resultado es que la ignorancia está presente en un momento histórico en el que a la sociedad en la que vivimos se le llama “sociedad de la información”, triste realidad, pero así es, tenemos toda la información a nuestro alcance pero no somos capaces cambiar nuestra actitud pasiva y desarrollar al investigador que todos tenemos dentro para acceder a ese mundo de información, autoeducarnos, empoderarnos y cambiar la asimetría del poder que nos mantiene en condiciones de opresión social.

Quienes no tuvieron la oportunidad de ir a la universidad, hoy en día pueden estudiar por su cuenta y autoeducarse para desarrollar una visión más amplia, objetiva y crítica de la realidad circundante, de tal forma que tome consciencia de que su condición socioeconómica no es resultado de fallas en su desempeño individual, sino que son fallas del sistema social que aplica políticas neoliberales que tienden a aumentar la desigualdad y exclusión social, generando mayor pobreza social. Si actuamos con una actitud diferente a la mayoría pasiva y conformista y tratamos de hacer la diferencia , al reconocernos como integrantes de una comunidad que enfrenta problemas sociales que podremos solucionar si actuamos en forma organizada y colectiva para lograr un cambio social.

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/06/serdiferente-la-alternativa-hacia-el.html

El hecho de que para la mayoría de la población les provoque indiferencia el ver a jóvenes como éste que encontré vendiendo miel de abeja, confirma lo que decía Zygmunt Bauman cuando nos habla de la ceguera moral en la que vivimos (en el libro del mismo nombre Ceguera moral), que nos hace indiferentes al sufrimiento ajeno, esta ceguera nos impide darnos cuenta de que nuestra sociedad está enferma y que nos presenta síntomas de que algo está mal, pero no los reconocemos como síntomas de una enfermedad social porque nos enfrentamos a una creciente adiaforización, aquel término que acuñó Bauman para explicar esta indiferencia social: “hacer que el acto y el propósito de dicho acto, se vuelvan moralmente neutros o irrelevantes”. La adioforización nos hace situar ciertos actos sociales (como la pobreza o enriquecimiento ilícito) fuera del eje moral-inmoral, es decir, fuera del universo de obligaciones morales y al margen del ámbito de los fenómenos sujetos a la evaluación moral.

Ver la riqueza ofensiva de ciertos personajes como Carlos Slim, Carlos Salinas de Gortari y muchos más, junto al empobrecimiento colectivo de millones de personas que tienen en común el experimentar un sufrimiento colectivo, son hechos que no debemos ver con indiferencia alguna, si somos seres humanos, debería provocarnos indignación colectiva.

Ver los casos de injusticia social cometida en contra de la población mexicana como la tragedia de la Guardería ABC donde fallecieron 49 niños y van 11 años de impunidad, no podemos tomarlo con una actitud de indiferencia, debería hacernos sentir deseos de luchar por obtener justicia. Igual sucede con otras injusticias sociales, como los feminicidios en México, la desaparición de 43 estudiantes normalistas en Ayotzinapa, Guerrero, la huelga de mineros de Cananea con 13 años de duración, etc.

Sin embargo la sociedad de consumo nos ha hecho tan individualistas que sólo nos preocupa alcanzar nuestra felicidad personal a través del consumo como estilo de vida, indudablemente que el consumo puede lubricar las ruedas de la economía, pero cuando obstaculiza el engranaje del desarrollo de una conducta moral, contribuye al desarrollo de una sociopatología, en la cual tiene más valor un automóvil nuevo que la vida de un niño de la calle. La exclusión social de nuestra juventud en particular y de la población en general es un indicador de que algo no está funcionando bien en nuestra sociedad, como organismo social nuestra sociedad está enferma y nos presenta varios síntomas de mal funcionamiento que tendemos a ignorar pero que debemos hacer algo para remediarlo y no seguir viviendo en una sociopatología en la cual lo normal tiende a ser anormal (adaptación social a las injusticias) y lo anormal es o debería ser, lo normal (rebelarse, indignarse, protestar, etc.).

Caminar al lado de este joven vendiendo miel de abeja fuera del hospital y verlo con una total indiferencia es parte de esa ceguera moral, lo vemos pero no lo vemos, lo miramos pero no nos importa, somos indiferentes totalmente a sus necesidades.

Por otro lado, parte del aprendizaje de la pandemia del covid es que debemos estar conscientes de que que somos seres sociales, no estamos solos, formamos parte de una colectividad al interactuar en diferentes ámbitos de convivencia social, que pertenecemos a una comunidad y que nuestra salud depende del comportamiento de los demás, al igual que la salud de los demás depende de nuestro comportamiento individual.

Pertenecer a una sociedad en la que existe un sufrimiento colectivo por la desigualdad social debe hacernos tomar consciencia de que no podemos ser felices sin habernos quitado esa adioforización que nos hace ver con gran indiferencia los problemas sociales, el sufrimiento por el que atraviesan miles de personas, como el joven vendedor de miel de abeja.

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/07/lafelicidad-personal-y-el-compromiso_29.html

Con la pandemia han aumentado las personas mendigando en la calle, la pandemia desnudó la desigualdad en nuestra sociedad al quitarle el vestido de invisibilidad social, como aquel Rey que posaba desnudo y sus lacayos alababan el color de su vestimenta, el covid contribuyó a visibilizar la pobreza porque ésta aumentó con la desigualdad social al grado de ser inocultable.

Mientras millones de mexicanos privilegiados o gozando de privilegios logrados con toda una vida de trabajo, pudimos quedarnos en casa cómodamente, siguiendo las instrucciones de las autoridades sanitarias de quedarse en casa, guardar distancia, usar gel antibacterial, salir sólo si era necesario y cuando lo hiciéramos usar cubrebocas.

Otros millones de personas como este chico que vende miel afuera del Hospital Chávez, tuvieron que salir porque no tenían lo necesario para quedarse en casa y necesitaban salir a trabajar para conseguir comida. (esto fue lo que permitió visibilizar la desigualdad social, porque el quedarse en casa se reveló como un privilegio de clase, que no todos pudieron realizar.)

Pero también hubo otros millones que se quejaron de no aguantar el encierro desobedecieron las instrucciones de las autoridades sanitarias y salieron antes de tiempo, no usaron cubrebocas, visitaron familiares, los abrazaron, festejaron cumpleaños, celebrando la vida provocando la muerte de varios de ellos mismos por el contagio de aquellos pacientes asintomáticos que por no tomar las precauciones dichas millones de veces en estos últimos seis meses, lograron aumentar las estadísticas de personas contagiadas y lograron contagiar a su familia que se quedó en casa cuidando su salud, pero fueron afectados por sus propios familiares quienes les dieron el beso de la muerte al regresar. Con todos esos comportamiento de gran irresponsabilidad social sólo contribuyeron a aumentar el número de contagios y de muertos por covid y la prolongación innecesaria de la cuarentena.

El semáforo cambió de color y al ponerse amarillo, una gran cantidad de personas sale a las calles, como si salieran de una prisión y lo más lamentable que reflejan que no aprendieron de la experiencia porque varias personas salen sin usar cubrebocas o los usan mal exponiendo su nariz y algunos llegan al extremo de usar el cubrebocas como guardabarbilla, es decir, dejan libre nariz y boca al usarlo debajo de sus mandíbulas.

En varios países que bajaron la guardia y pusieron el semáforo en amarillo se tuvo que retroceder por nuevos rebrotes de contagios por covid y retrocedieron a la etapa de pedir a las personas que se quedaran en sus casas nuevamente.

En México varias personas actúan como si la cuarentena hubiera quedado atrás y no, regresará, se siente la libertad de salir de nuestras casas, se han reanudado las actividades en varios sectores no esenciales y circula más gente por nuestras calles. Aparentemente el peligro ya pasó, la pesadilla ha terminado, pero esto no es cierto, los riesgos están presentes. El hecho de que nos dieran permiso para salir a las calles no significa que volvamos a la normalidad previa al covid.

Podemos salir pero debemos incorporar nuevos comportamientos en nuestra conducta, estos nuevos comportamientos incluyen el permanente uso de cubrebocas (que cubra también la nariz, no solo la boca), el guardar distancia con las personas con las que nos encontremos, el usar gel antibacterial constantemente, evitar acudir a lugares donde exista concentración de demasiadas personas, no realizar reuniones en casa o acudir a otras reuniones donde se encuentren más de 10 personas, etc. Todo esto es ya sabido por todos, sin embargo, al salir de nuestras casas podemos observar en las calles de nuestras ciudades cientos personas sin cubrebocas en la calle, gente que no guarda su distancia en las filas de los bancos, cajeros automáticos, hospitales, oxxos, tiendas, etc.

El Secretario de Salud del Estado de Sonora advirtió que Sonora podría retornar a color rojo en el semáforo de riesgo epidemiológico de covid-19, debido a que diariamente se reciben reportes de centros recreativos llenos, festejos en oficinas y celebraciones con grandes aforos de personas. Esta situación se repite en varios estados de la república y me atrevo a pensar que en varios países también. No hemos aprendido de la experiencia de la pandemia, no hemos incorporado a nuestro comportamiento las conductas de prevención del covid y las posibilidades de rebrotes de la pandemia lejos de alejarse, aumentan cada día.

¿Cómo explicar esta tozudez de algunas personas que teniendo conocimiento de la necesidad de tomar las precauciones básicas para ser contagiado, insiste en ignorarlas? Me recuerda a las personas que violan las leyes de tránsito cuando circulan en sus vehículos, ignorando la luz roja, rebasando el límite de velocidad, conduciendo en estado de ebriedad o aquellas que sabiendo que el consumir tabaco afecta su salud y lo siguen haciendo aún después del covid que afecta las vías respiratorias, miles de personas siguen consumiendo tabaco.

En mis cursos de educación sexual les insistía que la información no es suficiente para cambiar el comportamiento de las personas y ponía el ejemplo de que sabemos que el uso de condones ayuda a prevenir el contagio de enfermedades de transmisión sexual y del sida, pero sin embargo, las estadísticas de varias investigaciones indicaban que la mayoría de las personas no usan condón, argumentando diferentes razones.

En resumen, estamos frente a dos problemas aparentemente sin conexión, pero en ciencias sociales, lo primero que se aprende es que todos los problemas sociales están relacionados entre sí porque son la expresión particular del funcionamiento de un sistema social. Abordarlos desde una perspectiva integral nos permite identificar formas de solucionarlos y en este caso los temas tocados en este breve escrito: desigualdad social y tozudez de algunas personas que se resisten a incorporar a sus comportamientos las medidas de prevención del contagio del covid, sólo pueden ser solucionados a través de la educación.

En el caso de la desigualdad social, la educación política que contribuya a la construcción de identidades sociales, al desarrollo de sentimientos de pertenencia a nuestra comunidad y a la identificación de que nuestros problemas personales tienen un origen en la implementación de las políticas gubernamentales y que por lo tanto, como lo personal es político, debemos realizar un empoderamiento individual y colectivo para participar en política.

La desigualdad social debe estar en el centro de la mesa de debates, los cambios logrados en México con la ascensión al poder de Morena y Andrés Manuel López Obrador han logrado una distribución más horizontal de la riqueza socialmente producida a través de la implementación de nuevas políticas y programas dirigidos a sectores desprotegidos. Son políticas y programas buenas pero realmente insuficientes en la medida de que representan sólo paliativos para disminuir los efectos nocivos de la pobreza, pero no atacan las causas estructurales de la misma ya que la desigualdad continúa presente y en crecimiento. Se necesita una verdadera transformación social en la que los cambios provengan de ambos lados y deje de ejercerse esa asimetría en el poder que fomenta un vínculo de dependencia hacia la autoridad en turno.

La educación para disminuir la desigualdad social empieza desde el ámbito de lo privado, iniciando con romper la acriticidad de la vida cotidiana en la que vivimos, desarrollando un pensamiento autónomo que nos permita observar y analizar críticamente el entorno social y reconocernos como sujetos históricos que podemos cambiar la realidad social si actuamos en forma unida, organizada y colectiva asumiendo una identidad como agentes de cambio social.

Esta educación debe incluir el conocimiento de los derechos humanos que posee toda persona y el reconocimiento de que sus derechos humanos están siendo violados con el crecimiento de la desigualdad social. Si las personas ignoran que tienen derechos, jamás protestarán si sus derechos son violados, pero si reconocen que sus derechos humanos están siendo violados, puede esperarse una reacción distinta.

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/01/el-agente-de-cambio-social-oscar-yescas.html

En el caso de la tozudez que se observa en parte de nuestra ciudadanía, la educación debe incluir los derechos humanos, la necesidad de participación en política y las responsabilidades que todos tenemos al formar parte de una ciudadanía que comparte un espacio geográfico, un espacio histórico y un caudal de problemas sociales que tienen expresiones en nuestras vidas particulares. Todos debemos disfrutar de nuestra libertad y de nuestros derechos, pero debemos reconocer los límites de nuestra libertad cuando convivimos en sociedad con otras personas en ámbitos donde existen normas que fueron diseñadas para ser respetadas y no ignoradas. Estas pueden ser normas o leyes de tránsito, leyes laborales, leyes ciudadanas o normas sanitarias.

Si no existen leyes que sancionen comportamientos de irresponsabilidad social como el no usar cubrebocas o guardar distancia en lugares concurridos, continuará el aumento de cifras de contagiados y fallecidos. Recordemos que las leyes son creaciones humanas, diseñadas para lograr el bienestar colectivo y en tiempos de crisis se requieren medidas de para sancionar a quienes no cumplan una norma que nos protege de perder nuestra salud y nuestra vida. Durante los ochentas cuando se presentó la epidemia del sida que afectó a miles de personas, no había leyes que sancionaran a aquellas personas infectadas del sida que de manera consciente continuaban teniendo relaciones sexuales infectando a otras personas. Esto obligó a la creación de nuevas leyes de responsabilidad penal por la transmisión del VIH.

¿Tendremos que llegar a los extremos de crear leyes que sanciones penalmente a quienes no tomen las medidas de precaución en contra del covid-19? Cuando escribí el artículo Libertad individual vs. Control social

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/06/libertadindividual-vs.html recibí críticas en el sentido de que estaba abogando por la instauración de un control social policiaco. La verdad es que la duración de la pandemia del covid-19 y el alto número de contagiados y fallecidos no fue sólo responsabilidad de las autoridades gubernamentales, también fue responsabilidad de la tozudez humana, esa misma actitud necia que sigue poniendo en peligro la vida de aquellos que sí actúan con responsabilidad ciudadana al respetar las vidas de los demás tomando las adecuadas medidas de prevención.

Debemos tener presente que a estas alturas ya no puede alegarse ignorancia sobre los efectos del covid-19 y las formas de prevención, porque se han repetido hasta el cansancio en todos los medios de difusión. Finalizo diciendo lo siguiente: El peligro de nuevos rebrote de contagio de covid representa un peligro a la salud de nuestras comunidades, una amenaza a nuestras vidas y por ello debemos decirlo claramente: El saber acerca de las medidas de prevención del covid y no hacerlo es peor que la ignorancia y conlleva negligencia criminal.

Yescas, Oscar Poder corporativo vs. Poder popular

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/08/podercorporativo-vs_20.html

Yescas, Oscar: Libertad individual vs. Control social

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/06/libertadindividual-vs.html

Yescas, Oscar : Ser diferente, la alternativa hacia el cambio socialmente

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/06/serdiferente-la-alternativa-hacia-el.html

Yescas, Oscar: La felicidad personal y el compromiso social

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/07/lafelicidad-personal-y-el-compromiso_29.html

Yescas, Oscar : El agente de cambio socialmente

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/01/el-agente-de-cambio-social-oscar-yescas.html

miércoles, 16 de septiembre de 2020

 

La transformación social desde una perspectiva científica

Oscar Yescas Domínguez.

16 de septiembre de 2,020


Introducción

La formación académica de agentes de cambio social

La realidad social y la necesidad de su transformación

La transformación social a través del fortalecimiento de la ciudadanía

Conclusiones

Referencias


(Imagen de profesores de Psicología y Comunicación de la Universidad de Sonora discutiendo el estado de la huelga durante el conflicto laboral del STAUS y la Unison en el 2,012, mientras hacían guardia cuidando las instalaciones universitarias)

Introducción

Antes de la pandemia del covid-19 el mundo entero estaba inmerso en una profunda crisis económica, política y ecológica. La obsesión del poder corporativo por obtener una maximización de las ganancias estaba llevando al mundo por un camino que conducía a la autodestrucción. La producción masiva de diversos productos lograda gracias al desarrollo de la tecnología exigía una explotación irracional de los recursos naturales de nuestro planeta. La industria cervecera y refresquera ocupan inmensos volúmenes de agua para fabricar sus productos, el agua es un recurso natural y tiende a escasear pero al poder corporativo no le importa. La industria de la minería extrae recursos de nuestras tierras con métodos que sólo dejan destrucción a su paso. La industria petrolera extrae petróleo de las entrañas de nuestra tierra y deja contaminación y destrucción con su expansión.

La implementación de políticas neoliberales en la era de la globalización ha logrado el divorcio entre la política y la economía, de tal forma que el poder corporativo ha forzado al Estado contemporáneo a abandonar su rol de guardián del bienestar social que se le asignó hace 200 años, para eliminar prestaciones sociales, violar derechos laborales como la estabilidad en el empleo, la jubilación, la salud, etc., y obtiene del mismo Estado la protección que niega a los ciudadanos al evitar el pago de impuestos, al aumentar la explotación de los trabajadores al obligarlos a laborar largas jornadas con el pago de bajos salarios que mantienen en condiciones de hambre a miles de trabajadores que producen la riqueza social que sólo hace más ricos a los ricos y más pobres a los pobres.

Para mantener el ritmo de producción masiva el poder corporativo necesita mantener un consumo masivo de sus productos, no puede darse el lujo de tener productos almacenados porque significan pérdidas y el negocio se trata de obtener beneficios económicos. A través de estudios psicográficos las grandes empresas segmentan el mercado y hoy en día usando las redes sociales permiten obtener un perfil exacto de cada individuo que navega por las redes sociales, registrando cada tecla que oprime en el teclado de su computadora o teléfono celular.

La sociedad contemporánea basada en el sistema capitalista, necesita que los consumidores eviten usar su capacidad de pensamiento, su capacidad de crítica y actúen como seres obedientes, dóciles, adaptados a una realidad que cada vez es más excluyente y que aumenta cada día la desigualdad social.

Para lograrlo manipula las formas de pensar, sentir y actuar de millones de personas usando un ejército de científicos que estudian el comportamiento humano, sus principales motivaciones y necesidades psicológicas para crear aquellos productos que satisfarán dichas necesidades y deseos y fantasías psicológicas. El ideal de la felicidad contemporánea se concentra en las grandes tiendas comerciales que ofrecen una gran variedad de productos y artículos que nos proporcionarán “la felicidad”.

Al mismo tiempo, el mundo entero está inmerso en una cauda de cambios sociales que afectan nuestro entorno individual y ambiente social y de repente nos llega la pandemia del covid-19 que paralizó la economía del mundo entero. Esta pandemia provocó entre otras cosas que se visibilizara la enorme desigualdad social al reconocer que no todas las personas podían atender la petición de quedarse en casa durante la cuarentena, que no todas las personas tenían comida suficiente para estar encerrados en sus casas durante meses enteros, que millones de personas tenían que salir para conseguir comida y alimentar a sus hijos o así mismos. Nos mostró lo frágil que es nuestra salud por estar consumiendo comida chatarra y productos que afectan nuestra salud, al identificar un alto número de enfermos de diabetes, hipertensión y personas con sobre peso.

Pero una lección que nos enseñó esta pandemia es que la ciencia es la alternativa para atender nuestra salud y enfermedad, las Iglesias cerraron sus puertas, los pastores y sacerdotes se encerraron para no contagiarse o provocar mayores contagios, las oraciones no funcionaron y miles de personas fallecieron por covid-19. Otra gran lección de la pandemia del covid-19 es que prevalece la ignorancia colectiva, la falta de compromiso social, la ausencia de sentimiento de pertenencia a nuestras comunidades, etc.

El surgimiento de la pandemia, su larga extensión, la desobediencia masiva a las instrucciones de las autoridades de salud de quedarse en casa si no era necesario salir, de usar cubrebocas y guardar distancia, el alto número de fallecidos y contagiados fueron producto del comportamiento humano y no castigo de algún dios.

La ciencia salió fortalecida de esta crisis, sin la ayuda de los médicos, enfermeras y personal que labora en centros de salud y hospitales, las consecuencias podrían haber sido peores. Las ciencias sociales pueden hacer algo parecido para lograr que la cauda de cambios sociales que estamos padeciendo cotidianamente (cambios políticos, cambios económicos, cambios tecnológicos, cambios culturales, etc.), que nos generan incertidumbre social, puedan ser controlados para lograr una verdadera transformación social de nuestra realidad que nos permita cambiar los niveles de desigualdad social, explotación laboral, destrucción del medio ambiente, ausencia de democracia, corrupción, impunidad, etc.

Para lograrlo, es necesario lograr cambios a nivel individual, grupal, organizacional y comunitario de tal forma que todo ciudadano se vea a sí mismo como un agente de cambio social que puede contribuir con su participación social en esfuerzos colectivos, en forma unida y organizada a construir una sociedad donde realmente exista una democracia participativa en la que todos participemos en una auténtica transformación de nuestra realidad social.


La formación académica de agentes de cambio social

En la década de los noventas en el siglo pasado después de que cayó el muro de Berlín, el mundo entero sufrió los efectos de diversos cambios geopolíticos y económicos, a los cuales se sumaron los cambios provocados por el desarrollo de la tecnología expresada en la aplicación de la ciencia y la tecnología en el proceso de la producción, el surgimiento de internet, telefonía celular, lo cual provocaba a su vez diversos cambios culturales, etc., En aquel entonces solía decir a los alumnos de Psicología en la Universidad de Sonora que tomaban los seminarios que impartía sobre Psicología social, Psicología organizacional y Educación en sexualidad humana que debíamos tomar consciencia de que estaba cambiando el mundo entero y que nosotros estábamos sufriendo los efectos de una cauda interminable de cambios sociales, por lo que deberíamos aprender a implementar cambios planeados en las intervenciones psicológicas que hicieran en el futuro con individuos, grupos, organizaciones y comunidades que fueran objeto de su intervención.

En la medida que avanzaban los años modifiqué mi discurso para decirles que no bastaba con tomar consciencia de que el mundo estaba cambiando rápidamente y que deberíamos planear sus cambios, que lo que necesitábamos hacer era desarrollar nuevos comportamientos en nuestras personas porque las respuestas que en el pasado nos permitieron enfrentar con éxito algunas situaciones, en ese momento eran insuficientes ya que surgían varios cambios de manera constante y esto nos obligaba a crear nuevas formas de responder a los nuevos retos que surgían día a día para y que esos nuevos comportamientos nos ayudarían a adaptarnos con éxito a las nuevas condiciones sociales.

Con la entrada del nuevo siglo y nuevo milenio me vi obligado a cambiar nuevamente mi discurso porque me di cuenta de que la adaptación no era la respuesta a unas condiciones sociales que estaban en permanente cambio, que generaban incertidumbre sobre el porvenir y que sobre todo estaban contribuyendo a aumentar a niveles inéditos la desigualdad social provocando un sufrimiento colectivo.

Por lo que retomando la tesis marxista de que “hasta el momento los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos al mundo pero de lo que se trata es de transformarlo”, decidí entonces retomar la condición de mis alumnos como personas en proceso de constantes cambios psicosociales por la edad en la que se encontraban (el promedio de edad de mis alumnos era de 22 años), que estaban viviendo en un momento histórico caracterizado por una dinámica social de cambios constantes y se encontraban frente a mí esperando formarse como profesionistas de Psicología, para proceder a formarlos como agentes de cambio planeado a través de un proceso académico que los conduciría a realizar cambios en su crecimiento como personas partiendo de un avance en su autoconocimiento y autoaceptación, proporcionándoles un aprendizaje teórico y práctico que les ayudarían a contribuir a la planeación de cambios sociales a través de su práctica como profesionales de la psicología, cuando intervinieran con individuos, grupos, organizaciones o comunidades de su elección.

Las premisas de las cuales partía es que la educación debe darse con plena consciencia del contexto social en el que se realiza y en el contexto de una sociedad en crisis como la que vivimos, la función social de toda educación no puede ser otra más de liberación social. En el mundo que estábamos viviendo los cambios sociales estaban provocando un crecimiento de la desigualdad social que no podía ser ignorado ya que ésta provocaba un gran sufrimiento colectivo de las grandes mayorías que cada vez más se veían desprotegidas por el desarrollo de una modernidad excluyente y por todo ello mi labor como docente partía de la premisa de que la función social de todo profesionista egresado de una universidad pública es la de contribuir a la transformación social de la realidad.

Con esas expectativas y objetivos en mi mente cambié la metodología de enseñanza tradicional basada en la técnica expositiva en la cual el maestro se coloca frente al grupo y habla ante alumnos que escuchan en forma pasiva tomando notas, por una estrategia que estuviese basada en la participación de los alumnos en un aprendizaje vivencial, utilizando experiencias de aprendizaje estructuradas apoyadas en la teoría de la Psicología de los grupos.

El primer día del seminario hable con mis alumnos les expliqué el aprendizaje sería teórico-vivencial, que actuaría ante ellos como agente de cambio planeado haciendo lo que se esperaba que harían en su práctica profesional, implementar cambios planeados en su comportamiento individual y grupal. Que pusieran atención a todas las actividades que yo realizara y me vieran como un modelo a seguir para que en un ejercicio de empatía imaginaran verse a sí mismos haciendo lo que yo estaba haciendo con ellos. Aprenderían vivenciando las experiencias que se esperaba ellos lograran en las personas con las que trabajaran en el futuro.

Al inicio de cada semestre solía hacer una intervención central en la que retomando las lecturas asignadas como tareas, les explicaba los fundamentos teóricos de la intervención psicosocial, en la misma ponía énfasis en describir que el primer paso de toda intervención social era la realización de un diagnóstico que nos ayudara a identificar el estado actual de nuestro objeto de intervención, reconociendo las principales fuerzas restrictivas y fuerzas impulsoras que determinaban su funcionamiento y generar los cambios necesarios para para lograr un mejoramiento continuo que consiste en una constante autoevaluación para seguir mejorando.

Les expliqué el concepto de contrato psicológico para clarificar las expectativas que tenía yo acerca de su futuro comportamiento y les pedí escribieran diez expectativas que tenían sobre el seminario y sobre mi persona las cuales comentamos posteriormente en grupo y tomamos algunos acuerdos que conformaron las bases de nuestro contrato psicológico.

El contrato psicológico que acordamos contenía ciertas reglas que debían respetarse por todos: asistencia, puntualidad, respeto mutuo, guardar silencio y escuchar a quien esté usando la palabra, discreción en el sentido de que todo lo que se dijera en ese grupo quedaría en el mismo y no se permitía compartir con alguna persona que no perteneciera al grupo alguna confidencia personal que alguien hiciera, etc.

En ese momento inicié con una introducción a la teoría de grupos describiendo aportaciones de diferentes autores sobre el tema, principalmente de Kurt Lewin, continué con la aplicación de técnicas de de integración grupal para construir una atmósfera de apertura en la comunicación para que sintieran la libertad para expresarse (dinámicas de integración grupal, de autoconocimiento, de sensibilización, psicodramas, sociodramas, etc.), y

Abandoné de manera definitiva la técnica expositiva en cada uno de los seminarios que impartía, dejé de usar el cañón proyector porque sentí que era innecesario e inhibía la participación del grupo y fomentaba el distanciamiento de los estudiantes con el profesor ya que lo hacía ver como “un experto”.

Tomé la decisión de disminuir mi autoridad ante el grupo para construir un liderazgo distribuido y compartido que permitiera reducir la distancia entre ambos, construir un vínculo de colaboración para desarrollar la tarea que nos unió (el aprendizaje de la Psicología), pero prestando atención al proceso (es decir, al cómo lo estábamos haciendo) y poder compartir con mis alumnos el peso de las actividades de análisis y discusión de varios textos teóricos para incursionar en un verdadero proceso de enseñanza-aprendizaje en el cual quien enseña (el maestro), aprende en el acto de enseñar y el que aprende (el estudiante) contribuye al aprendizaje grupal con su participación individual en el contexto grupal.

Las primeras clases de cada semestre veía la expresión de sorpresa en sus rostros cuando les decía que en adelante mi actuación como docente sería la de asumir mi rol de un agente de cambio planeado que realizaría una intervención psicológica con ellos estimulando su participación en el grupo para generar cambios en sus actitudes, en sus valores, en sus percepción, en su autoimagen y que al terminar el semestre serían los mismos pero mejores personas.

Les comentaba que el aprendizaje no se limitaría a adquirir el manejo de nueva información, porque partía de la definición de aprendizaje en psicología como “el cambio relativamente permanente en el comportamiento de una persona después de atravesar una experiencia de aprendizaje”. Por lo tanto, esperaba desarrollar en ellos cambios en sus actitudes, cambios en sus valores, cambios en la percepción de ellos mismos y de su entorno social, todos esos cambios deberán reflejarse en cambios en su comportamiento al final del semestre, pero que sólo lo lograría si construíamos un vínculo de colaboración reflejado en un compromiso de cada uno de ellos de participar en cada clase para alcanzar el objetivo general del programa del seminario (en este caso el programa del seminario Intervención psicológica en convivencia social III dirigido a alumnos del octavo semestre de la carrera de Psicología) que de manera explícita hacía referencia a su formación como agentes de cambio social:

Al finalizar el seminario, el estudiante habrá adquirido el bagaje teórico, desarrollado las capacidades y habilidades necesarias para actuar como agente de cambio social y proceder al diseño y realización de una intervención psicosocial que permita elevar la calidad de vida y promover el bienestar social de las personas integrantes de la comunidad objeto de su intervención”

En consecuencia, la evaluación final no sería sólo una evaluación de conocimientos, sino que se incluía una evaluación de los cambios logrados en su comportamiento individual y esa evaluación la harían ellos mismos en forma grupal realizando una retroalimentación mutua al evaluar el programa del seminario, el aprendizaje obtenido, la metodología de la enseñanza, el desempeño individual y el desempeño de los demás, incluido el del profesor en su rol como docente, es decir, que yo mismo me exponía a ser objeto de sus críticas. Esta evaluación se haría en la última reunión del grupo al finalizar el semestre y sería filmada y subida a mi cuenta de youtube donde estaría disponible en forma pública.

Algunos rostros reflejaban incomodidad al principio, sobre todo cuando les mencionaba que construiríamos una atmósfera de apertura en la comunicación y llegaría un momento en el que entraríamos a un “desnudo psicológico” cuando realizáramos ejercicios de entrenamiento en sensibilización conocidos comúnmente como Grupo T (sensivity trainning group), T group), a través del cual expresaríamos nuestros verdaderos sentimientos y compartiríamos lo que realmente pensábamos. Es decir, la meta a alcanzar era el desarrollo de comportamientos auténticos.

A partir de la segunda reunión y a medida que avanzaba el semestre percibía cambios en sus comportamientos, todos llegaban puntuales a la cita, veía mejoras en su forma de escribir los ensayos (me parecía increíble encontrar en octavo semestre estudiantes que no sabían escribir un ensayo, pero poco a poco aprendieron), pero también era notorio un aumento en su participación en clase porque al estar en posición de círculo con sólo una mirada era suficiente para que algunos alumnos levantaran su mano y participaran. Fueron perdiendo la timidez poco a poco, el ambiente era más cordial cada semana, no faltaban las bromas, risas y más que una clase hubo momentos en los que parecía una reunión de un grupo de amigos disfrutando un premio: el aprendizaje teórico y práctico. No exagero al decir que ambas partes, el profesor y los alumnos esperábamos ansiosos la próxima reunión, y o así lo sentía y varios estudiantes lo expresaron más de una vez. Por todas estas consideraciones confieso que me encantaba y disfrutaba intensamente mi trabajo como docente universitario.

Empecé por colocar a mis alumnos en posición de círculo para que todos pudiéramos vernos las caras (en el buen sentido del término), les pedí que no buscaran rendijas en el suelo o moscas en vuelo con las que pudieran distraerse y que de manera permanente todos tuviéramos contacto visual con cada uno de los presentes. Procedí a realizar un diagnóstico de la dinámica del grupo retomando las aportaciones de la sociometría de Jackob Moreno aplicando un test sociométrico para identificar la estructura informal del grupo y reconocer a los individuos aislados, las parejas recíprocas, parejas excluyentes y líderes informales.

La siguiente clase revisamos los resultados del test sociométrico y varios de ellos se sorprendieron al ver la ocupación que ocupaban ante el grupo. Procedí a pedirles que escribieran en un papel en forma anónima el nombre y las características que los motivaron para elegir a uno de sus compañeros para no aceptarlos como parejas en la realización de una tarea y el nombre de la persona que eligieron para no acercarse y confiarle un problema. Después entregué a sus destinatarios las retroalimentaciones y empezamos una reunión de psicoterapia de grupo conocida como grupo de entrenamiento en sensibilización (GrupoT).

Después de esos ejercicios cada grupo cambió radicalmente, dejaron de ser un agrupamiento y empezaron a trabajar como verdaderos equipos de trabajo en un ambiente de camaradería y apertura en la comunicación. Sentían que estaba aprendiendo acerca de sí mismos con la ayuda de sus compañeros, aprendían a trabajar en equipo y lo hacían en forma divertida, tanto el profesor como los estudiantes disfrutaban cada clase.

A través de la plataforma de la Universidad de Sonora les enviaba el programa de la materia donde se encontraban los links de internet de los diferentes materiales de lectura con la consigna de leerlos antes de llegar a la clase, cumplir con la tarea de redactar un ensayo de cinco cuartillas de cada lectura para entregarlo impreso en clase y participar activamente expresando sus opiniones personales de las lecturas efectuadas durante el seminario.

Obviamente esto implicó un aumento en la carga de trabajo para mí porque después de cada clase me llevaba la tarea de revisar y evaluar cada uno de los ensayos, revisar su contenido, corregir faltas de ortografía y escribir notas en cada uno de ellos. Los fines de semana me eran insuficientes para revisar todos los ensayos, pero lo aceptaba como parte de mi trabajo, porque sentía que mientras enseñaba, estaba aprendiendo de mis alumnos.

Más adelante en el 2,015 abrí una página en facebook para cada uno de mis grupos, lo cual me facilitó una comunicación más rápida y eficiente, pude compartirles libros completos, artículos, asignarles tareas, etc. Y les pedí que publicaran en ese espacio sus ensayos para que el resto de integrantes del grupo pudieran leer cada uno de los ensayos. En la medida que pasaba el tiempo veía con placer como mejoraban cada vez más sus habilidades de escritura al escribir libremente sus pensamientos por la vía escrita y publicar sus ensayos.

La nueva estrategia educativa estaba dirigida a lograr un empoderamiento individual de cada uno de mis estudiantes, desarrollar un pensamiento autónomo en cada uno de ellos, enseñar el placer por la lectura, generar un interés en formarse como investigadores, estimular su participación en clase, (porque parte del contrato psicológico que pactamos desde la primera reunión del seminario era de que todos debían participar en las discusiones grupales), incrementar su sensibilidad a los problemas sociales, ampliar su empatía social y sobre todo sembrar la semilla que les permitiera construir una identidad como agentes de cambio social, alimentándoles la idea de que con su actuación como profesionales de la Psicología podrían contribuir a construir un mayor bienestar social al identificar el origen social de los problemas psicológicos que enfrentan los individuos, grupos, organizaciones y comunidades que forman nuestra sociedad.

Todo lo anterior era necesario ya que en su práctica como profesionales de la Psicología intervendrían con individuos, grupos, organizaciones y comunidades que se encontraban en una sociedad en crisis y era necesario una intervención psicosocial que permitiera generar un cambio planeado que les ayudara a transitar desde un estado deficitario hasta un estado de mayor satisfacción, tarea que exige mucho más que manejar un alto nivel de información, exige el desarrollo de habilidades sociales de comunicación, empatía, sensibilidad, trabajo en equipo, etc.

En las evaluaciones al final del semestre, no faltaron momentos emotivos en los cuales algunas de mis alumnas rompieron en llanto al describir los cambios logrados en su persona, un llanto de emoción y alegría por haber cambiado radicalmente de ser una persona tímida e introspectiva a ser otra persona mas abierta y sincera en la expresión de sus emociones y pensamientos.

https://www.youtube.com/watch?v=MlxhmMvThb0&ab_channel=OscarYescas

(video de evaluación del seminario de Psicología organizacional con alumnos del octavo semestre de Psicología de la Universidad de Sonora)

Todo esto se logró gracias a que aprendieron a usar la retroalimentación positiva y retroalimentación negativa que consiste en describir las características que observamos en los otros que nos atraen o nos alejan de ellos. Es agradable que nos digan nuestras cualidades, pero es difícil aceptar cuando nos describen aquellas características que son motivo de alejamiento de las personas, es decir, aquellas características que necesitamos cambiar para ser mejores personas. Les hablaba con frecuencia acerca de la técnica del “espejo en el grupo”, que consiste en reflexionar acerca del hecho de que si algunas personas se acercaban a uno es porque veían en nosotros alguna característica que les gustaba, que les atraía y si los demás se alejaban, tomaban distancia de uno mismo es porque veían alguna característica en nuestra persona que no les atraía o que les molestaba y nuestra tarea era identificar las características individuales que atraían o alejaban a las personas de nosotros utilizando la retroalimentación mutua en cada uno de los integrante sdel grupo. El test sociométrico fue una de las herramientas que ayudó enormemente a identificar la estructura informal del grupo, reconociendo a quienes ejercían liderazgo en el grupo, a los individuos aislados, a las parejas coincidentes y a las parejas discordantes.

En verdad, algunas reuniones académicas se convirtieron en verdaderas reuniones de psicoterapia de grupo, pero por lo general el consenso final era de satisfacción individual y grupal del aprendizaje obtenido, un autoaprendizaje que les permitía ser una mejor persona, con mayor sensibilidad social, con capacidad de recibir críticas sin molestarse, habilidad de retroalimentar a los demás y el manejo de un aprendizaje teórico que les permitiera ser mejor profesional para actuar como agentes de cambio social. Mi labor como docente de crear la formación académica de agentes de cambio social se cumplía al final de cada seminario y no lo digo yo, era expresado en palabras de los propios alumnos y están disponibles en youtube las filmaciones de evaluación final de cada uno de mis grupos. Por todo lo anterior, al terminar cada semestre disfrutaba el relajamiento de no tener que revisar más tareas y ensayos y era frecuente que saliera a dar una caminata por el interior del campus universitario con una expresión sonriente experimentando una agradable sensación de satisfacción por haber realizado un buen trabajo.

https://www.youtube.com/watch?v=oEpqbTF4awM&t=136s&ab_channel=OscarYescas

(video de evaluación grupal del seminario intervención psicológica en convivencia social III con alumnos de Psicología de la universidad de Sonora)

La realidad social y la necesidad de su transformación

En la historia de la humanidad se han presentado grandes cambios sociales que han sido impulsados por movimientos colectivos que luchaban por conquistar derechos humanos, laborales y sociales. Algunos cambios se dieron de manera violenta como la revolución francesa que derribó a la monarquía, conquistó la igualdad social y dio inicio al Estado moderno, la revolución mexicana que terminó con la explotación de millones de mexicanos y conquistó una serie de derechos humanos y laborales. La revolución rusa, que derribó al zarismo y creó un Estado obrero bajo el sistema socialista que como bien sabemos posteriormente degeneró en la creación de un grupo de privilegiados que a nombre del Partido comunista abandonaron los principios del socialismo para crear un Estado totalitario. Pero otros grandes cambios sociales que han marcado hitos en la historia de la humanidad han sido realizados con métodos pacíficos, dentro de los cuales podemos mencionar la conquista del voto femenino, la eliminación de la discriminación racial en Estados Unidos, la aprobación de matrimonios entre personas del mismo sexo en varios países, la caída del muro de Berlín y la desintegración de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y la instauración del capitalismo en cada una de ellas, el triunfo de Andrés Manuel López Obrador en México que terminó con la dictadura del Prian que duró más de 80 años, etc.

En este momento histórico que nos tocó vivir, con la internacionalización de la economía de libre mercado, el surgimiento de la globalización que ha disminuido drásticamente la regulación del Estado en la operación de las grandes corporaciones y provocando un aumento en la explotación de los trabajadores al cambiar las constituciones eliminando leyes que contenían derechos laborales y prestaciones sociales, para privatizar servicios que antes proporcionaba el Estado Benefactor, se dejan en estado de indefensión a los trabajadores y población en general.

Al mismo tiempo que se incrementa la explotación de los recursos naturales y la destrucción del medio ambiente creando una grave crisis ecológica provocada por la producción masiva de recursos que utilizan recursos no renovables y el consumo masivo que crea enormes cantidades de basura que contamina mares, ríos y lagunas.

La desigualdad social crece cada día, millones de personas son empujadas a vivir en condiciones de miseria y pobreza, mientras que unos cuantos acaparan la mayor parte de la riqueza que es socialmente producida. Las grandes corporaciones explotan los recursos naturales y la población trabajadora de países con menor desarrollo económico y esto provoca emigraciones masivas de personas que huyen de la pobreza, del narcotráfico o de la violencia política para buscar en otros países una vida mejor.

El tema de la emigración es uno de los que está en la mesa de discusión de varios gobiernos hoy en día y se intenta contenerla sin atender las causas que la originan que no es otra que la ambición del poder corporativo de maximizar sus ganancias explotando recursos naturales y corrompiendo a las autoridades de otros países, disfrutando de un trato preferencial de autoridades gubernamentales que se expresa en la ausencia total de pago de impuestos o pagos simbólicos de los mismos, descuentos en tarifas de consumo de agua o energía eléctrica, ausencia total de regulación en su funcionamiento, etc.

Cada vez es más evidente que vivimos en un mundo en el que los contrastes entre pobreza y riqueza son más evidentes y esto se debe a la globalización, la debilitación del Estado y las instituciones públicas y al aumento de la hegemonía del poder corporativo porque vivimos un momento histórico en el que a nombre de la democracia estamos padeciendo una verdadera dictadura del mercado.

Vivimos un momento histórico caracterizado por la existencia de una enorme desigualdad social nunca antes vista, que produce un sufrimiento colectivo en millones de personas que sobreviven en condiciones de miseria y pobreza mientras que un reducido porcentaje de individuos se queda con el mayor porcentaje de la riqueza socialmente producida. Todo con el aval de las autoridades de gobierno. En estas condiciones creo sinceramente que no sería una exageración el pensar que en la mayoría de los países que conforman este mundo existe un alto grado de insatisfacción social y que una gran cantidad de personas desearían cambiar sus condiciones de vida, elevar la calidad de vida y vivir en una realidad que fuese mucho mejor.

El poder corporativo aumenta su hegemonía a nivel internacional debilitando en cada país a los Estados que tenían como misión proporcionar el bienestar social a sus ciudadanos, pero los políticos de hoy gobiernan a la deriva sin poder controlar los vaivenes de la economía de libre mercado y han cedido a las presiones para implementar políticas neoliberales que provocan la debilitación presupuestal y desaparición de las instituciones que eran responsables de la prestación de los servicios públicos que eran proporcionados por el Estado y que hoy se avanza en la privatización de todo tipo de servicios que antes eran gratuitos.

La realidad social es una sola, pero es percibida de manera diferente por cada persona debido a factores psicológicos individuales, factores socioeconómicos. Todos sabemos que la sociedad está conformada por seres humanos que interactúan en diferentes grupos y organizaciones, pero este conocimiento es insuficiente para comprender la realidad social actual que está regida por una serie interminable de cambios sociales. Tenemos que reconstruir nuestra concepción de lo que es la sociedad y una forma de lograrlo es respondiendo a la pregunta ¿qué es lo que mantiene unida a la sociedad?

Siguiendo a Cornelius Castoriadis podemos afirmar que lo que mantiene unida a una sociedad son sus instituciones, esto es, la suma de las instituciones sobre las que descansa el funcionamiento de una sociedad es la que la conforma como un todo. La sociedad como institución está constituida por varias instituciones particulares que forman un conjunto coherente y la unidad de estas instituciones es lo que conforma a una sociedad.

Las diferentes instituciones que conforman la institución total que es la sociedad funcionan de diferentes formas, algunas a través de la coerción, las sanciones, otras mediante la adhesión, el consenso, la legitimidad y otras usando las creencias. La unidad y la cohesión interna del conjunto de individuos que conforman una sociedad se debe a la existencia de una red de significados que Castoriadis denomina el magma de las significaciones imaginario sociales.

Esta red de significados sociales compartidos por los integrantes de una sociedad son la creencia compartida de la existencia de un Dios, el sentimiento de pertenencia a una nación, a un partido político o lugar geográfico. La importancia asignada a una virtud, al pecado o el culto al capital y al dinero. Se les llama imaginario sociales porque existen solamente si son instituidas y compartidas por una colectividad impersonal y anónima.

Cada sociedad crea su propio mundo y determina lo que es real y lo que no lo es, la sociedad en sí misma es una construcción social, su identidad se basa en ese sistema de interpretación que es creado por ella misma a través de sus instituciones. Si se presenta un cuestionamiento a su sistema de interpretación creado por una institución o por el conjunto de la sociedad, se percibe como un ataque, como una amenaza en contra de su propia identidad.

La crisis de la sociedad contemporánea se manifiesta en la crisis de las instituciones que conforman a la misma, las instituciones que forman la base de nuestra sociedad presentan una gran distancia entre el discurso y la acción y por ello enfrentan una crisis de credibilidad entre los integrantes de nuestra sociedad. Las instituciones gubernamentales atraviesan por una prolongada crisis de credibilidad porque su funcionamiento se desvía de la misión para la cual fueron creadas (Instituciones que deberían garantizar la impartición de justicia, instituciones que deberían proporcionar educación, instituciones que deberían proporcionar seguridad pública, instituciones que deberían proporcionar salud, instituciones que deberían estimular el deporte, instituciones que deberían vivienda, instituciones que deberían garantizar elecciones democráticas, etc.).

En México se logró un gran cambio político a través de la vía electoral y se están dando grandes cambios en la forma de gobernar y de distribuir el presupuesto público. Pero el pueblo mexicano debe tener presente que el cambio de gobierno no se dio por la acción de un solo individuo, o de unas cuantas personas. El echar abajo la tiranía del Prian se dio por la acción de millones de personas que actuaron en forma unida, organizada y colectivamente en el día de las elecciones. Con su acción lograron reconquistar la democracia electoral, dando un ejemplo a nivel mundial de que la democracia existe si y solo si, las masas se movilizan.

Parecía el fin de la democracia representativa que consiste en la libertad de elegir a nuestros representantes políticos en el Congreso de la Unión (diputados y senadores), pero dicha libertad y democracia dura sólo el día de las elecciones, porque los nuevos “representantes del pueblo”, una vez que llegan al poder terminan su contacto con la población y toman decisiones en nombre del pueblo mexicano sin consultar a la población acerca del sentido de su voto. El partido en el poder Morena se alejó de los movimientos colectivos, de aquellos fueguitos que siguen exigiendo justicia ante las impunidades del pasado reciente y actúan realizando acciones de protesta sin lograr ser escuchados en su totalidad.

La necesidad de un cambios planeados y dirigidos en en una verdadera transformación social de nuestra sociedad surge por la enorme cantidad de problemas sociales que estamos presenciamos en pleno siglo XXI provocados por la globalización, que se traducen en un aumento de la distribución desigual de la riqueza social que hace más ricos a los ricos y aumenta la cantidad de personas que pasan a vivir en condiciones de pobreza y marginación, en un momento histórico en el que el desarrollo de la tecnología podría terminar con el sufrimiento colectivo ya que existe la capacidad de realizar una producción masiva de alimentos y productos.

La transformación social a través del fortalecimiento de la ciudadanía

En todo proceso de transformación social se requiere de un alto nivel de participación de los integrantes de la sociedad que esté en proceso de transformación para lograr que ésta tenga efectividad y sea realmente una transformación social. Las reformas que provengan del poder en turno no significa que se esté realizando realmente una transformación social, son reformas emitidas por decreto o adoptadas por consenso de los representantes de las diferentes fuerzas políticas.

Toda transformación social dentro de un país o sociedad determinada debe incluir de manera inevitable las nociones de poder y transformación de tal forma que a los integrantes de dicha sociedad les quede claro cuál es el tipo de transformación que se está buscando y sobre todo cuál es su papel en dicho proceso, porque los cambios sociales pueden provenir de la cúpula dirigente o de los movimientos colectivos reclamando sus reivindicaciones.

Los cambios en las políticas gubernamentales que afectan o benefician a una población suelen darse de forma unilateral, ejerciendo un poder basado en una asimetría en su ejercicio. Es decir, quienes tienen el poder político toman las decisiones sin consultar a quienes serán perjudicados o beneficiados, utilizando las facultades que les da estar en posición de poder. La asimetría consiste en que los directamente afectados o beneficiados por las decisiones políticas no participan en el proceso de discusión sobre el impacto social de ese tipo de decisiones y mucho menos participan en el acto de tomar dichas decisiones.

La esencia de la democracia real es la participación colectiva en la toma de decisiones sobre asuntos relevantes de interés colectivo. Las elecciones democráticas son un claro ejemplo de participación colectiva en la toma de decisión acerca de quién será la próxima figura máxima de autoridad en cada país. Las elecciones políticas son un ejemplo de democracia, pero no representan a la democracia en su totalidad. Puede haber elecciones democráticas y gobiernos autocráticos, en México padecimos décadas de fraudes electorales y gobiernos autoritarios y corruptos.

La definición de democracia es “la forma de gobierno que se caracteriza por hacer que el poder recaiga sobre el pueblo”, es decir, que las decisiones relevantes tomadas por el ejecutivo de un país o por los representantes del poder político sean consultadas con la población. https://conceptodefinicion.de/democracia/. Según esta definición disfrutamos de la democracia sólo en época de elecciones, el resto del tiempo quienes gobiernan se olvidan del pueblo.

La democracia no es un obsequio de algún dirigente político, la democracia se conquista y se construye cada día. Para comprender esto debemos tener claridad sobre la diferencia que existe entre democracia representativa y democracia participativa. En las últimas décadas hemos vivido una democracia representativa, elegimos a nuestros representantes políticos en el Senado, en la Cámara de Diputados y a quien actúe como Presidente de nuestro país.

Pero nuestra libertad y ejercicio de democracia se limita al acto de votar por algún o algunos candidatos, después del días de las elecciones volvemos a nuestra rutina cotidiana alejándonos de aquello que llaman “política”. Quienes accedieron al poder político gracias a nuestros votos no se toman la molestia de buscarnos para cumplir sus promesas de campaña (hablo a nivel general, es obvio que Andrés Manuel López Obrador ha sido la gran excepción y ejemplar figura de lo que debe ser un político).

En los últimos 30 años los partidos políticos dominantes y los expresidentes del Prian implementaron una serie de reformas que golpearon la economía familiar, vendieron recursos naturales al capital privado nacional y extranjero y saquearon las fianzas públicas para enriquecer fortunas personales. Pero sobre todo aprobaron la implementación de políticas neoliberales que hundieron a la mayoría del país en una crisis económica y aumentaron las cifras de personas que viven en condiciones de pobreza y marginación. Quienes vivían de la política tomaron decisiones unilateralmente, a nuestro nombre, nos perjudicaron y se enriquecieron, todo gracias a la democracia representativa, gracias a la indiferencia que millones de personas tienen hacia la política, que no lograron comprender el vínculo que existe entre sus vidas privadas y la implementación de políticas públicas.

La democracia participativa implica un cambio de actitud hacia la política, requiere el reconocimiento de que estamos perdiendo derechos laborales, humanos y sociales que fueron conquistados a través de luchas de movimientos colectivos que se dieron el siglo pasado y lograron ser plasmados en la constitución para garantizar el Estado de bienestar social. La implementación de la democracia participativa necesita un cambio de autoimagen en cada ciudadano, de tal forma que deje de verse a sí mismo como individuo aislado con problemas personales provocados por él mismo. Necesitamos vernos como seres sociales que pertenecemos a una comunidad, sociedad y país, cuyos habitantes comparten problemas sociales que afectan su vida privada (delincuencia común, bajos salarios, falta de oportunidades de educación y esparcimiento, desempleo, ausencia de espacios públicos y deportivos, transporte público deficiente, corrupción, impunidad, etc.).

Convertir los cambios sociales que estamos viviendo en este momento histórico en cambios planeados que logren convertirse en una verdadera transformación social de nuestra realidad, tiene muchas semejanzas con la formación académica de agentes de cambio que intervendrán para lograr cambios en individuos, grupos y organizaciones.

La principal semejanza es que ambas requieren de la adopción del conocimiento científico, del uso de las aportaciones que nos brindan las diferentes ciencias sociales utilizando un enfoque ecléctico y la investigación-acción que permita lograr una colaboración entre agentes de cambio externos y la construcción de una identidad como agentes de cambio social en los integrantes de nuestras comunidades.

Para empezar debemos tener una adecuada conceptualización de la realidad histórica que estamos viviendo (diagnóstico social). El estudio de la sociedad contemporánea no puede ser abordada desde la óptica de una disciplina científica particular, ya que la existencia humana contiene demasiados matices, ángulos y dimensiones en su funcionamiento, por lo que el abordaje de lo social requiere necesariamente de un enfoque ecléctico y multidisciplinario en virtud de que los paradigmas que antes nos permitían comprender nuestra realidad social ya no funcionan porque lo que llamamos realidad social o sociedad, ha cambiado tanto que los viejos paradigmas no nos sirven para comprender la nueva realidad y por ello necesitamos construir nuevos paradigmas. Como científicos sociales en la tarea de analizar nuestra sociedad contemporánea debemos dar mayor importancia a la sensibilidad social y a la empatía que al rigor metodológico que exigen algunos “puristas científicos” que están encajonados en reduccionismos científicos sin considerar que lo que intentamos estudiar es la experiencia humana lo cual representa una tarea de gran complejidad. Recordemos que estudiar a un solo individuo es una tarea compleja, ahora estudiar a una sociedad entera, representa un verdadero reto.

En el momento histórico que nos tocó vivir nos encontramos en un mundo en el cual los contrastes entre poder y riqueza aumentan constantemente de tal forma que hemos llegado a un nivel de desigualdad social nunca antes visto en la historia de la humanidad. Esto nos obliga a reconocer que la objetividad en las ciencias sociales se logra al reconocer que no existe objetividad alguna cuando nos estudiamos a nosotros mismos, por lo que nuestra inclinación como científicos sociales debe ser a favor de la inmensa mayoría de aquellos a quienes se les llama peyorativamente “perdedores” que han sido excluidos de los beneficios de la modernización de nuestra sociedad y que nuestra actuación debe incluír la identidad de agentes de cambio social. En la realización de esta tarea debemos unir el pensamiento y la acción en la búsqueda de soluciones a los problemas sociales en una estrecha cooperación entre nuestra sensibilidad como seres humanos y el uso de los conocimientos científicos aportados por diferentes disciplinas de las ciencias sociales. Al construir un nuevo campo de acción, una nueva visión, un nuevo paradigma, debemos retomar las aportaciones de la Psicología, Sociología, Filosofía, Antropología, Pedagogía, Comunicación, etc., de tal forma que tengamos presente que necesitamos avanzar juntos para sobrevivir y ser más fuertes que nunca, porque si nos separamos en esta tarea colectiva, la humanidad entrará en un estado de barbarie.

Este nuevo campo de acción requiere de una revolución paradigmática que permita construir un nuevo paradigma en el cual de la sociedad objeto de análisis dejen de ser vistos como sujetos pasivos y sean considerados como sujetos activos con plena consciencia del momento histórico que están viviendo y de su carácter de sujetos que están construyendo la historia contemporánea con su actuación cotidiana. En el proceso de transformación de la sociedad se requiere de la construcción de un vínculo de colaboración entre los agentes externos que acuden a una comunidad a apoyar los procesos de cambio y los integrantes de esa sociedad que de manera paulatina deberán construir su identidad como agentes de cambio internos.

Toda transformación social tiene un carácter político y para aceptar el carácter político de la misma se necesita desarrollar un proceso de sensibilización individual, grupal y comunitario que conduzca al desarrollo y fortalecimiento de los ciudadanos y de las comunidades que conforman nuestra sociedad, para lograr que una comunidad haga escuchar su voz en los espacios públicos haciendo un reclamo de respeto a sus derechos sociales, políticos y humanos. Es en esta perspectiva que al hablar de transformación social es necesario contemplar la perspectiva psicocosocial en la medida que estamos interviniendo en cambiar la interinfluencia que existe entre el individuo y la sociedad. La Psicología social es la disciplina social que tiene como objeto de estudio esta interinfuencia y maneja diferentes niveles de intervención: individua, grupal, organizacional y comunitario.

La verdadera transformación social no se da en un nivel abstracto, se debe reflejar en la práctica, en lograr cambios de actitudes en los individuos, en cambiar la concepción que tienen de sí mismos, en tanto que son personas que viven en una sociedad y forman parte de una comunidad que enfrenta problemas colectivos con efectos en la vida individual de los integrantes de esa comunidad. Desde la perspectiva de la Psicología social es muy importante que el intentar la transformación de una comunidad se debe contar con la participación y el compromiso social de los grupos organizados y de las personas interesadas en la transformación de la comunidad. Esta necesidad de la participación social no nace de la teoría, sino que surge de la identificación de las necesidades sentidas por los integrantes de esa comunidad, al reconocer la relación que existe entre sus problemas privados con la implementación de políticas públicas.

Por lo tanto, hablar de transformación social es hablar de participación social, la transformación social no es un discurso político, es una acción colectiva que sólo puede lograrse construyendo puentes de comunicación entre autoridades y población, vínculos de colaboración entre agentes externos y agentes internos. La democracia no se da por decreto presidencial, se construye en forma colectiva a través de la participación de la mayoría. La esencia de la democracia en una sociedad se refleja en la participación colectiva en la toma de decisiones relevantes para la sociedad y evitar que sea un grupo pequeño quienes concentren la toma de decisiones.

Todos los individuos somos seres sociales que formamos parte de diferentes grupos simultáneamente, pertenecemos a diferentes organizaciones y somos parte de una o varias comunidades. Tomar consciencia de que somos parte del tejido social nos permite construir un sentimiento de pertenencia a nuestras comunidades y una identidad social en base a la cual se puede crear un vínculo de colaboración al reconocer que los integrantes de esa comunidad padecen los mismos problemas sociales y que los problemas locales tienen origen en problemas globales, por lo cual la solución a los mismos solo podrá darse en forma colectiva, unida y organizada mediante el incremento de la participación social. 

En la transformación de la sociedad se debe actuar desde, para y con la comunidad realizando acciones políticas que tienen consecuencias comunitarias y un verdadero impacto social. Al iniciar un proceso de transformación comunitaria es muy importante identificar las manifestaciones del poder, porque la comunidad puede recibir la influencia del poder desde fuera y hacia ella, que es lo que comúnmente sucede con el poder asimétrico donde el poder se ejerce por parte de quien tiene el poder sobre quien carece del mismo, como sucede con el ejercicio del poder político, del poder gubernamental o el poder económico.

En todas estas expresiones de poder hay una parte “fuerte” y una parte “débil”, esa es la asimetría del poder, un poder no compartido que genera formas de opresión y desigualdad social y que afectan a una gran mayoría de personas que ignoran que a través de un empoderamiento individual, a través del fortalecimiento de la ciudadanía, podrían lograr un empoderamiento colectivo que construiría un poder popular con el cual podrían interactuar con el poder político y económico en una relación de igual a igual.

La comunidad puede generar un poder superior al poder político, gubernamental y económico al invertir la asimetría en el poder, si los integrantes de la comunidad toman consciencia de que a través de la actuación unida, organizada y colectiva lograrían un fortalecimiento de la comunidad que les permita lograr objetivos identificados como parte de su estrategia de cambio social y terminar con las formas de opresión que enfrentan actualmente en su vida cotidiana. El poder popular o poder comunitario se construye al crear vínculos de colaboración entre los integrantes de la misma, al crear un sentimiento de pertenencia a la comunidad, al lograr un cambio de identidad individual a una identidad social, al incrementar la sensibilidad hacia los problemas sociales, al generar el compromiso de la participación ciudadana en la discusión de problemas colectivos y sobre todo en la toma de decisiones que resuelvan esos problemas y beneficien a la comunidad. En el proceso de transformación social debemos reconceptualizar nuestra idea del poder definiéndolo desde una perspectiva simétrica en la que no exista desigualdad ni opresión y reconocer que en cualquier tipo de de relación entre individuos, grupos, organizaciones y comunidades, existe una fuente de poder. Hasta el momento el poder se ha asociado con quienes ocupan cargos de poder económico, político o gubernamental, pero esa es la versión asimétrica.

Conclusiones

En México vivimos en un sistema que no puede llamarse democrático porque los representantes políticos utilizan el discurso de la democracia participativa, pero siguen actuando actuando en el esquema de la democracia representativa al tomar decisiones de gran relevancia social sin consultar a la población que dicen representar. Con el arribo al poder de Amlo y Morena se ha incluido la figura de la consulta popular para apoyar decisiones de trascendencia social, de antemano se reconoce que es obvio que no se podría estar consultando constantemente a la población sobre cualquier tipo de decisión a tomar por por parte de la Presidencia de la república o en el Congreso de la unión, pero lo esperable sería que quienes ocupan cargos de representación popular tomen decisiones actuando como verdaderos representantes de los intereses de quienes los llevaron a ese cargo de poder político. Todo poder político debe descansar en la congruencia que tiene en su comportamiento político y la satisfacción de las necesidades de la población que representa.

La verdadera transformación social vista desde una perspectiva científica requiere de la construcción de un poder basado en la simetría que se construya entre quienes ejercen el poder político y quienes son representados por ese poder político. Los integrantes de las comunidades objeto de transformación social deben ser partícipes de los cambios que se están efectuando. Hasta el momento quienes ejercen el poder político miran desde las alturas y hacia abajo a la población que continúa viviendo en condiciones de opresión por las políticas liberales implementadas en los últimos 30 años. Los ciudadanos deben tomar consciencia de que han sido objeto de estrategias basadas en la consigna “divide y vencerás” al destruir los vínculos sociales y promover el individualismo. Si los ciudadanos se unen y actúan en forma colectiva y organizada podrán construir un poder popular con el cual podrán romper la asimetría, es decir la desigualdad del poder en la que hoy se encuentran.

Los partidos políticos han mostrado su fracaso en la construcción de la democracia porque siguen en la línea de la democracia representativa y se alejan de la ciudadanía y de los movimientos colectivos que luchan por diversas causas sociales. El partido en el poder en México Morena presenta una división actual en varias tribus que enfrentan una pugna interna por el poder de dicho organismo. Morena como partido oficial de gobierno se ha institucionalizado y se ha alejado de los movimientos colectivos que se encuentran activos y continúan luchando por la defensa de sus derechos humanos y laborales. Se acercan elecciones en varios estados de la república mexicana y los funcionarios de Morena manejando el discurso de que son representantes de una “Cuarta Transformación” están más preocupados en realizar cabildeos para lograr alianzas que les permitan seguir en posiciones de poder en los próximos gobiernos estatales, que en gobernar atendiendo los reclamos de la ciudadanía que exige solución a varios problemas sociales. Si Morena no rectifica el rumbo que ha tomado estos años de institucionalización, si sigue aislándose de los movimientos colectivos que aún siguen luchando, si continúa aceptando elementos que tuvieron destacada participación en los gobiernos del Prian y si no democratiza la elección de candidatos que lo representarán en las próximas elecciones, corre el riesgo de perder el apoyo popular con el que inició su papel como partido en el poder.

No se puede seguir ignorando la continua violación de derechos laborales, humanos y sociales que tiene lugar en varios lugares de México. En el ámbito de la educación se observa que a las Escuelas Normales rurales del país se les recortó el presupuesto para el año que viene en un 95%. Esta acción representa una contradicción con el discurso oficial de gobernar para los pobres porque implica condenar a la ignorancia y analfabetismo a millones de personas que viven en el campo y forman parte de comunidades indígenas.

Los maestros agrupados en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se encuentra actualmente en movilización de protesta por su derecho a la estabilidad laboral, solución a problemas de pago, en contra de recortes al presupuesto a la educación y contra la violación de derechos laborales de miles de maestros y la negación del derecho a la educación a la niñez de nuestro país.

Por otro lado, se continúa con el despojo de derechos laborales como el derecho a la jubilación para los trabajadores de Teléfonos de México a quienes se les intenta obligar a firmar un nuevo contrato colectivo en el que acepten que los nuevos trabajadores renuncien a su derecho a la jubilación y a los trabajadores ya jubilados se les está exigiendo aceptar que un 45% de las percepciones de sus pensiones se destinen a la compra de acciones de la empresa.

El ISSSSTESON en Sonora tiene tiempo violando el derecho a la jubilación al negarse a otorgar nuevas jubilaciones y violando el derecho a la salud de sus miles de derechohabientes al no proporcionar los medicamentos prescritos por el personal médico para atender su salud. Los dirigentes de los sindicatos que agrupan a los trabajadores afiliados al Isssteson son copartícipes de estas violaciones al no convocar a la construcción de un frente sindical que luche para terminar con el saqueo de las finanzas del Isssteson.

Estas acciones sólo son ejemplos parciales de una violación de derechos humanos laborales y sociales que contradice el discurso oficial de una Cuarta transformación de la república. Desde una perspectiva científica la frase “sólo el pueblo salvará al pueblo” adquiere significado en la medida que debe interpretarse como el mensaje de que la ciudadanía y trabajadores deben construir sus propias organizaciones que realmente los representen en la vida política y esto requiere de un cambio de actitud hacia la política y redefinirla como una acción humana que involucra a la sociedad en la toma de decisiones para conducir el destino de un país o una sociedad, concebir a la política como “una actividad lúcida y explícita que se ocupa de instaurar instituciones deseables y definir a la democracia como el régimen de la autoinstitución lúcida y explícita, en la medida de lo posible, de las instituciones sociales que dependen de la actividad colectiva explícita” (Castoriadis, 1998).

Lo anterior se traduce en la afirmación de que la transformación de una sociedad es un proceso que no se logra de la noche a la mañana, requiere de una educación de masas que requiere métodos pedagógicos que busquen provocar cambios en sus comportamientos para sensibilizarlas en cuatro procesos:

Primero: iniciar un proceso de empoderamiento individual y colectivo que les permita fortalecer una identidad social, un sentimiento de pertenencia a las comunidades, el desarrollo de la confianza en sí mismos, la construcción de un vínculo de colaboración y la certeza de que actuando juntos, unidos y en forma organizada podrán cambiar las condiciones en que viven y transitar de un estado deficitario a otro estado de bienestar social.

Segundo: construir un estado de sensibilidad social hacia los grandes problemas sociales, desarrollar lazos de empatía social y solidaridad con los más marginados y verlos como hermanos en desgracia que sufren por la implementación de políticas de exclusión económica y política que tarde o temprano llegará a afectarlos. En esta perspectiva ayudar a la población a vincular los problemas personales implementadas por quienes dirigen el gobierno que enfrentan en su vida cotidiana, con la implementación de políticas públicas por quienes administran las finanzas gubernamentales olvidando que son servidores públicos cuya función es administrar los recursos gubernamentales para satisfacer necesidades sociales y lograr fortalecer el Estado de bienestar social que hemos perdido en las tres últimas décadas.

Tercero: la participación en política es la única alternativa viable para lograr un cambio social y esta participación debe darse desde la organización de vecinos en una colonia, los habitantes de una ciudad o municipio y los ciudadanos que pertenecen a un país. Esta participación debe darse en el contexto de la construcción de organizaciones realmente representativas de los integrantes de las comunidades y trabajadores organizados.

Cuarto: Los trabajadores organizados en sindicatos que funcionan con la democracia representativa y en forma antidemocrática, deben tomar la iniciativa y obligar a sus dirigentes a consultarlos en las decisiones que tomen que los involucren directamente, sobre todo en lo referente a revisiones de contratos colectivos de trabajo, en momentos en los que el poder corporativo intenta mutilar derechos conquistados a través de grandes luchas sociales como lo son el derecho a la jubilación, el derecho a la estabilidad en el empleo y el derecho a la salud.

Referencias:

Bauman, Zygmunt: En busca de la política.Fondo de Cultura Económica. México, 2,015

Bauman, Zygmunt: La sociedad sitiada. Fondo de cultura económica. México, 2,013

Castoriadis, Cornelius: Ciudadanos sin brújula. Ediciones Coyoacán, México, 2,017

Touraine, Alain: El fin de las sociedades. Fodo de Cultura Económica. México, 2,016

Touraine, Alan: Un nuevo paradigma para comprender al mundo de hoy. Ed. Paidós. Barcelona, 2,005

Definición de democracia

https://conceptodefinicion.de/democracia/

Evaluacion grupal del curso de Oscar Yescas Psicologia organizacional III del semestre 2,018 1

https://www.youtube.com/watch?v=MlxhmMvThb0&ab_channel=OscarYescas

Evaluación del curso Intervención psicológica en convivencia social tres 2,018-2 

https://www.youtube.com/watch?v=oEpqbTF4awM&t=136s&ab_channel=OscarYescas

Yescas, Oscar: Porqué Morena votó a favor del Pri'

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/09/porque-morena-voto-por-favor-del-pri_3.html

Yescas, Oscar: Justicia real y consultas ciudadanas

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/09/justiciareal-y-consultas-ciudadanas_46.html

Yescas, Oscar: Poder corporativo y poder popular

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/08/podercorporativo-vs_20.html

Yescas, Oscar: Algo está pasando y usted no sabe qué es¡

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/07/algoesta-pasando-y-usted-no-sabe-que-es.html

Yescas, Oscar: La traición de Morena en Hermosillo

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/03/latraicion-de-morena-en-hermosillo_31.html

Yescas, Oscar: La Cuarta Transformación y la corrupción en Sonora

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/01/lacuarta-transformacion-y-la-corrupcion.html

Yescas, Oscar: La felicidad personal y el compromiso social

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/07/lafelicidad-personal-y-el-compromiso_29.html

Yescas, Oscar: Sabe usted qué es el neoliberalismo?

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/07/sabeusted-que-es-el-neoliberalismo.html

Yescas, Oscar: El compromiso social del trabajador intelectual

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/05/el-compromiso-social-deltrabajador.html

Yescas, Oscar: La construcción social de la democracia

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/07/laconstruccion-social-de-la-democracia.html

Yescas, Oscar: El agente de cambio social

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/01/el-agente-de-cambio-social-oscar-yescas.html

Yescas, Oscar: La revolución de las consciencias

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/06/la-revolucion-de-las-consciencias-oscar.html

Yescas, Oscar: El derecho a la jubilación en proceso de extinción

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/06/elderecho-la-jubilacion-en-proceso-de.html

Yescas, Oscar: La Cuarta Transformación y la participación popular

https://oscaryescasd.blogspot.com/2018/12/la-cuarta-transformaciony-la.html

Yescas, Oscar: Introducción a la Psicología comunitaria latinoamericana

https://oscaryescasd.blogspot.com/2017/10/introduccion-la-psicologia-comunitaria.html