Reforma educativa en México y reforma universitaria en la Universidad de Sonora
Oscar Yescas Domínguez
Oscar Yescas Domínguez
Publicado en facebook el 1 de julio de 2,016
Como trabajador de la educación apoyo la lucha de los maestros en contra de la reforma educativa que intenta implementar el gobierno de Peña Nieto en México quien sigue dando grandes muestras de autoritarismo y desprecio a la voluntad de miles de mexicanos.
Lo hago por una cuestión de principios y valores, no es solamente por solidaridad hacia los maestros que ven sus derechos laborales violados y que son víctimas de una represión gubernamental sin igual en la historia de México.
Lo hago porque considero que en estos momentos en México se debaten dos proyectos de educación en México, por un lado tenemos un proyecto que intenta imponerse a través de la reforma educativa del gobierno mexicano que pretende tener maestros dóciles, alumnos adiestrados y la privatización de la educación para favorecer a la iniciativa privada.
Por el otro lado, se encuentran miles de maestros defendiendo la educación como un derecho social (educación pública), los derechos laborales de los maestros y las escuelas públicas en contra de su privatización.
Estoy convencido de que existe una estrecha relación entre la educación y la sociedad en la que se imparte de tal forma que “todo sistema educativo está marcado por una doble elección: la de un proyecto de hombre y sociedad”
http://firgoa.usc.es/drupal/node/34777
Es decir, la educación juega un papel importante en la definición del país al que se aspira por parte de millones de mexicanos.
Apoyo la lucha de los maestros porque veo que tal “reforma educativa” es en realidad una evaluación-despido que pretende acabar con la organización independiente de los maestros agrupados en la CNTE que están resistiendo y combatiendo uno de los objetivos del neoliberalismo que es la privatización de la educación pública en México.
Como educador veo que con el argumento de que la educación debe atender las demandas sociales, se intenta poner a las escuelas y a las universidades al exclusivo servicio de las empresas y se enfoca la educación en formar al individuo amaestrado que solicitan estas empresas.
En este intento la organización colectiva de los trabajadores de la educación (sindicatos) es un estorbo y una amenaza para los fines de destrucción de la educación pública y privatización de la educación.
Veo que se intenta reducir la educación al nivel de un producto de consumo y abrirla al mercado, mientras el Estado hace recortes a la asignación de recursos a la educación, al mismo tiempo que incrementa las partidas para gastos presidenciales, para seguridad (que no es otra cosa que compra de armamento para reprimir a la población y no a la delincuencia organizada).
Al reducir la educación a los principios y prácticas del mercado, se elimina la concepción de la educación como un derecho social que el Estado debe garantizar como una conquista social lograda a través de grandes luchas de la clase trabajadora mexicana.
El autoritarismo mostrado por el Estado mexicano en imponer una reforma educativa que ha sido rechazada por miles de mexicanos se debe por un lado a compromisos contraídos por este gobierno con la clase empresarial que presiona para tener las condiciones que les permitan lucrar con la privatización de un derecho público, además de que la intención de la clase gobernante es mantener en la ignorancia a la mayoría de la población para seguir con la entrega del país al capital privado nacional y extranjero.
Esa ignorancia y analfabetismo político que aprovecha en períodos electorales para realizar fraudes en cada elección manipulando las necesidades de millones de mexicanos marginados que viven en la pobreza.
La reforma educativa es una de las reformas estructurales que forman parte de la implementación del modelo neoliberal en nuestro país que tiene como característica tres principios fundamentales:
1.- La imposición del libre mercado en el funcionamiento de la economía
http://www.monografias.com/…/dios-mercado-religion-del-sigl…
2.- Apertura total comercial y financiera de la economía
3.- Desplazamiento del Estado de la actividad económica y privatización de activos y derechos públicos. Dentro de estos últimos se encuentran los derechos a la educación y a la salud.
Pero la imposición del proyecto neoliberal en el campo de la educación no se limita a los niveles de educación básica y media superior, abarcan todo el espectro de la educación en nuestro país, de tal forma que las universidades como instituciones de educación superior están sufriendo una gran embestida.
http://www.elespectador.com/…/el-neoliberalismo-tomo-asalto…
Si a nivel nacional se intenta imponer una reforma educativa que pretende formar ciudadanos adiestrados para el consumo y obedientes a las figuras de autoridad, sin capacidad de crítica social, en el caso de las universidades sucede algo parecido ya que en todo sistema educativo nacional, la enseñanza universitaria como nivel de educación superior, juega un papel de gran importancia.
Poco a poco las instituciones de educación superior abandonan el compromiso social que tienen con sus comunidades, descuidando el ejercicio de la crítica social y se transforman en empresas educativas que intentan asegurar que el personal que labora en las mismas sea dócil y obediente.
http://www.monografias.com/…/educacion-vs-control-social.sh…
Se intenta reducir costos a nombre de que existen presupuestos bajos, mientras que aumenta el personal administrativo en número mayor que el personal docente llegando a percibir sueldos mayores a los académicos y cumplen la función de controlar a los trabajadores reduciéndolos a la calidad de “recursos humanos”, desviando con ello los fondos financieros de las universidades a fines muy distintos de la mejor de la educación.
El papel que tenían en el siglo pasado las universidades como “islas de democracia” ha quedado en el pasado y el gobierno intenta transformarlas como centros de control social.
La participación estudiantil que en décadas pasadas buscaba la democracia hoy ya no existe ya que la universidad poco a poco pierde su capacidad de centros de crítica social.
La educación dirigida por el mercado es una educación con fines de lucro y el surgimiento de escuelas y universidades improvisadas.
La Universidad de Sonora ha sido escogida como laboratorio experimental en la implementación de una reforma universitaria que pretende lograr los fines del neoliberalismo. La comunidad universitaria de esta institución educativa tenemos nuestra reforma particular, ya implementada con la modificación unilateral al Estatuto de Personal Académico que realizaron las autoridades administrativas, con la característica particular de que esto implicó violar el Contrato Colectivo de trabajo que establecía que cualquier modificación al EPA debería contar con la participación del STAUS y autoridades administrativas.
En este nuevo EPA el perfil del maestro universitario cambia no solo de denominación, si hoy nuestro nombramiento como académicos es “Maestro de Tiempo Completo”, de aquí en adelante será el de “Profesor Investigador de Tiempo Completo”, que implica la reducción del tiempo dedicado y la importancia otorgada a la docencia ya que lo que se pretende imponer es la figura de un investigador especializado, formado con la principal misión de escribir y publicar artículos en revistas internacionales que nadie lee, disminuyendo el tiempo y calidad de su rol como docente, con lo cual se devalúa la calidad de la enseñanza, se reduce su capacidad humanística y su consciencia y compromiso social.
La Universidad de Sonora hace tiempo que se desvió de su función social y del lema que la representa: “El saber de mis hijos hará mi grandeza” para convertirse en una Universidad empresa que concibe la vinculación de la universidad con la sociedad como institución que atiende las necesidades de las empresas, abandonando la atención a los grandes problemas sociales que padece el pueblo sonorense y mexicano.
http://www.monografias.com/…/a-universidad-empresa-o-univer…
En este contexto, los trabajadores de la educación en México debemos sumar fuerzas para enfrentar en forma unida esta embestida neoliberal en contra de la educación. Debemos redefinir el rol que tenemos como educadores y concebir la educación como un recurso vital para la vida democrática de nuestro país, en la medida de que las escuelas son uno de los espacios públicos que quedan en los cuales los estudiantes pueden aprender el valor de la democracia, habilidades para la participación social y política.
Debemos defender la educación tanto básica como superior porque es un espacio que permite superar el individualismo egoísta a través de la integración grupal y prácticas democráticas para construir una identidad social basada en principios democráticos.
Los maestros universitarios debemos conceptualizarnos como pensadores críticos y luchadores sociales para que la universidad siga siendo ese espacio de pensamiento crítico, trabajo colectivo y lucha social.
Como académicos debemos oponernos al neoliberalismo para reconstruir en nuestras universidades la cultura política democrática que hemos perdido en el ámbito universitario.
Para lograrlo debemos cubrir ese vacío que existe de discurso crítico en la cultura universitaria y relacionar estos ataques a la educación pública con la creciente apatía y analfabetismo político que se observa en buena parte de la población ante la crisis política que estamos viviendo actualmente.
Los académicos debemos concebir a la educación como la esperanza de una visión trasformadora de esta sociedad desigual donde impera la pobreza, la miseria, la violencia, la corrupción y la impunidad.
En nuestro rol como intelectuales debemos enseñar a nuestros alumnos la relación que existe entre el conocimiento y el poder, entre la ideología y la ciencia, entre el conocimiento científico y el conocimiento ideológico, entre obediencia servil y desobediencia civil, entre conformismo y cambio social, entre conocimiento e ignorancia.
El neoliberalismo contempla no sólo la desaparición de la educación pública, intenta lograr también la desaparición de las universidades públicas y de los sindicatos universitarios, para dejar el mercado libre de este nivel de estudios para beneficio exclusivo de las empresas privadas nacionales y extranjeras. Con ello se contempla la desarticulación de todo el sistema educativo nacional en perjuicio de toda la sociedad.
Como decía Cristina Pacheco en su programa de televisión cuando entrevistaba a personas de sectores marginados “aquí nos tocó vivir”, los académicos debemos asumir la responsabilidad social de vivir en tiempos históricos de crisis social y contribuir con nuestro trabajo como educadores a la formación de cuadros que contribuyan al cambio social.
Pero en este momento, en lo inmediato, los trabajadores universitarios debemos unirnos a los trabajadores que luchan en contra de la reforma educativa, al mismo tiempo que debemos organizarnos para resistir en nuestro terreno universitario la imposición de un Estatuto de Personal Académico que lesiona los derechos de los académicos universitarios y luchar por el diseño e implementación de un EPA justo que surja de la propia comunidad docente.
Nos esperan días de lucha, los ataques a la educación púbica, las universidades públicas y sindicatos de académicos no respetan períodos vacacionales, por lo cual la lucha en contra de la educación no tiene vacaciones.
Aparte del reto de frenar la imposición de reformas educativas en todos los niveles de educación en nuestro país, de manera particular los académicos universitarios debemos elaborar un plan de acción que contenga las siguientes metas:
1.- Democratizar las instituciones de educación públicas, lo cual en el caso de la universidad de Sonora implica cambiar la antidemocrática Ley 4 que nos rige y que excluye la participación de los integrantes de la comunidad universitaria (maestros, trabajadores y alumnos) en la toma de decisiones importantes de nuestra universidad.
http://www.monografias.com/…/ley-4-universidad-sonora-impos…
2.- Eliminar la reelección de las autoridades universitarias
3.- Quitar el poder a la burocracia
4.- Transparentar el uso de recursos que se destinan a las universidades públicas.
Debemos tener presente que está en riesgo el futuro de la educación universitaria como un derecho social y el uso del conocimiento que en ella se genera como un derecho público.
El Comité Ejecutivo del STAUS tiene la responsabilidad histórica de asumir su liderazgo formal y organizar una respuesta colectiva a estas amenazas a la educación pública, a nuestra universidad como fuente de trabajo y a nuestra propia organización sindical.
Los integrantes del STAUS debemos despertar de nuestro letargo e inmovilismo social, para recuperar nuestra condición de sindicato democrático, crítico y progresista, retomando el contenido de la declaración de principios de nuestra organización sindical, que a la letra dice:” Nos constituimos en Sindicato para la defensa de los intereses laborales, académicos culturales, políticos y económicos de sus miembros.
http://www.staus.uson.mx/…/nor…/norm_36_03_10_2014_03_42.pdf
El día de hoy tales derechos están siendo violentados tanto por el gobierno federal como por las autoridades universitarias. Pero eso no es todo, se contempla en esta declaración de principios del STAUS:
“Nos identificamos plenamente con las causas justas y reivindicadoras de los campesinos y de los obreros; nos solidarizamos en los planteamientos y en la búsqueda de resoluciones para los problemas de cualquier índole que afecten a estos sectores y afirmamos nuestro propósito inquebrantable de contribuir sin limitación alguna, al logro de la unidad de las clases trabajadoras de nuestro país.”
Estamos en un momento histórico que exige hacer realidad esta hermosa declaración que nos da un gran sentimiento de orgullo la pertenencia al STAUS
Como trabajador de la educación apoyo la lucha de los maestros en contra de la reforma educativa que intenta implementar el gobierno de Peña Nieto en México quien sigue dando grandes muestras de autoritarismo y desprecio a la voluntad de miles de mexicanos.
Lo hago por una cuestión de principios y valores, no es solamente por solidaridad hacia los maestros que ven sus derechos laborales violados y que son víctimas de una represión gubernamental sin igual en la historia de México.
Lo hago porque considero que en estos momentos en México se debaten dos proyectos de educación en México, por un lado tenemos un proyecto que intenta imponerse a través de la reforma educativa del gobierno mexicano que pretende tener maestros dóciles, alumnos adiestrados y la privatización de la educación para favorecer a la iniciativa privada.
Por el otro lado, se encuentran miles de maestros defendiendo la educación como un derecho social (educación pública), los derechos laborales de los maestros y las escuelas públicas en contra de su privatización.
Estoy convencido de que existe una estrecha relación entre la educación y la sociedad en la que se imparte de tal forma que “todo sistema educativo está marcado por una doble elección: la de un proyecto de hombre y sociedad”
http://firgoa.usc.es/drupal/node/34777
Es decir, la educación juega un papel importante en la definición del país al que se aspira por parte de millones de mexicanos.
Apoyo la lucha de los maestros porque veo que tal “reforma educativa” es en realidad una evaluación-despido que pretende acabar con la organización independiente de los maestros agrupados en la CNTE que están resistiendo y combatiendo uno de los objetivos del neoliberalismo que es la privatización de la educación pública en México.
Como educador veo que con el argumento de que la educación debe atender las demandas sociales, se intenta poner a las escuelas y a las universidades al exclusivo servicio de las empresas y se enfoca la educación en formar al individuo amaestrado que solicitan estas empresas.
En este intento la organización colectiva de los trabajadores de la educación (sindicatos) es un estorbo y una amenaza para los fines de destrucción de la educación pública y privatización de la educación.
Veo que se intenta reducir la educación al nivel de un producto de consumo y abrirla al mercado, mientras el Estado hace recortes a la asignación de recursos a la educación, al mismo tiempo que incrementa las partidas para gastos presidenciales, para seguridad (que no es otra cosa que compra de armamento para reprimir a la población y no a la delincuencia organizada).
Al reducir la educación a los principios y prácticas del mercado, se elimina la concepción de la educación como un derecho social que el Estado debe garantizar como una conquista social lograda a través de grandes luchas de la clase trabajadora mexicana.
El autoritarismo mostrado por el Estado mexicano en imponer una reforma educativa que ha sido rechazada por miles de mexicanos se debe por un lado a compromisos contraídos por este gobierno con la clase empresarial que presiona para tener las condiciones que les permitan lucrar con la privatización de un derecho público, además de que la intención de la clase gobernante es mantener en la ignorancia a la mayoría de la población para seguir con la entrega del país al capital privado nacional y extranjero.
Esa ignorancia y analfabetismo político que aprovecha en períodos electorales para realizar fraudes en cada elección manipulando las necesidades de millones de mexicanos marginados que viven en la pobreza.
La reforma educativa es una de las reformas estructurales que forman parte de la implementación del modelo neoliberal en nuestro país que tiene como característica tres principios fundamentales:
1.- La imposición del libre mercado en el funcionamiento de la economía
http://www.monografias.com/…/dios-mercado-religion-del-sigl…
2.- Apertura total comercial y financiera de la economía
3.- Desplazamiento del Estado de la actividad económica y privatización de activos y derechos públicos. Dentro de estos últimos se encuentran los derechos a la educación y a la salud.
Pero la imposición del proyecto neoliberal en el campo de la educación no se limita a los niveles de educación básica y media superior, abarcan todo el espectro de la educación en nuestro país, de tal forma que las universidades como instituciones de educación superior están sufriendo una gran embestida.
http://www.elespectador.com/…/el-neoliberalismo-tomo-asalto…
Si a nivel nacional se intenta imponer una reforma educativa que pretende formar ciudadanos adiestrados para el consumo y obedientes a las figuras de autoridad, sin capacidad de crítica social, en el caso de las universidades sucede algo parecido ya que en todo sistema educativo nacional, la enseñanza universitaria como nivel de educación superior, juega un papel de gran importancia.
Poco a poco las instituciones de educación superior abandonan el compromiso social que tienen con sus comunidades, descuidando el ejercicio de la crítica social y se transforman en empresas educativas que intentan asegurar que el personal que labora en las mismas sea dócil y obediente.
http://www.monografias.com/…/educacion-vs-control-social.sh…
Se intenta reducir costos a nombre de que existen presupuestos bajos, mientras que aumenta el personal administrativo en número mayor que el personal docente llegando a percibir sueldos mayores a los académicos y cumplen la función de controlar a los trabajadores reduciéndolos a la calidad de “recursos humanos”, desviando con ello los fondos financieros de las universidades a fines muy distintos de la mejor de la educación.
El papel que tenían en el siglo pasado las universidades como “islas de democracia” ha quedado en el pasado y el gobierno intenta transformarlas como centros de control social.
La participación estudiantil que en décadas pasadas buscaba la democracia hoy ya no existe ya que la universidad poco a poco pierde su capacidad de centros de crítica social.
La educación dirigida por el mercado es una educación con fines de lucro y el surgimiento de escuelas y universidades improvisadas.
La Universidad de Sonora ha sido escogida como laboratorio experimental en la implementación de una reforma universitaria que pretende lograr los fines del neoliberalismo. La comunidad universitaria de esta institución educativa tenemos nuestra reforma particular, ya implementada con la modificación unilateral al Estatuto de Personal Académico que realizaron las autoridades administrativas, con la característica particular de que esto implicó violar el Contrato Colectivo de trabajo que establecía que cualquier modificación al EPA debería contar con la participación del STAUS y autoridades administrativas.
En este nuevo EPA el perfil del maestro universitario cambia no solo de denominación, si hoy nuestro nombramiento como académicos es “Maestro de Tiempo Completo”, de aquí en adelante será el de “Profesor Investigador de Tiempo Completo”, que implica la reducción del tiempo dedicado y la importancia otorgada a la docencia ya que lo que se pretende imponer es la figura de un investigador especializado, formado con la principal misión de escribir y publicar artículos en revistas internacionales que nadie lee, disminuyendo el tiempo y calidad de su rol como docente, con lo cual se devalúa la calidad de la enseñanza, se reduce su capacidad humanística y su consciencia y compromiso social.
La Universidad de Sonora hace tiempo que se desvió de su función social y del lema que la representa: “El saber de mis hijos hará mi grandeza” para convertirse en una Universidad empresa que concibe la vinculación de la universidad con la sociedad como institución que atiende las necesidades de las empresas, abandonando la atención a los grandes problemas sociales que padece el pueblo sonorense y mexicano.
http://www.monografias.com/…/a-universidad-empresa-o-univer…
En este contexto, los trabajadores de la educación en México debemos sumar fuerzas para enfrentar en forma unida esta embestida neoliberal en contra de la educación. Debemos redefinir el rol que tenemos como educadores y concebir la educación como un recurso vital para la vida democrática de nuestro país, en la medida de que las escuelas son uno de los espacios públicos que quedan en los cuales los estudiantes pueden aprender el valor de la democracia, habilidades para la participación social y política.
Debemos defender la educación tanto básica como superior porque es un espacio que permite superar el individualismo egoísta a través de la integración grupal y prácticas democráticas para construir una identidad social basada en principios democráticos.
Los maestros universitarios debemos conceptualizarnos como pensadores críticos y luchadores sociales para que la universidad siga siendo ese espacio de pensamiento crítico, trabajo colectivo y lucha social.
Como académicos debemos oponernos al neoliberalismo para reconstruir en nuestras universidades la cultura política democrática que hemos perdido en el ámbito universitario.
Para lograrlo debemos cubrir ese vacío que existe de discurso crítico en la cultura universitaria y relacionar estos ataques a la educación pública con la creciente apatía y analfabetismo político que se observa en buena parte de la población ante la crisis política que estamos viviendo actualmente.
Los académicos debemos concebir a la educación como la esperanza de una visión trasformadora de esta sociedad desigual donde impera la pobreza, la miseria, la violencia, la corrupción y la impunidad.
En nuestro rol como intelectuales debemos enseñar a nuestros alumnos la relación que existe entre el conocimiento y el poder, entre la ideología y la ciencia, entre el conocimiento científico y el conocimiento ideológico, entre obediencia servil y desobediencia civil, entre conformismo y cambio social, entre conocimiento e ignorancia.
El neoliberalismo contempla no sólo la desaparición de la educación pública, intenta lograr también la desaparición de las universidades públicas y de los sindicatos universitarios, para dejar el mercado libre de este nivel de estudios para beneficio exclusivo de las empresas privadas nacionales y extranjeras. Con ello se contempla la desarticulación de todo el sistema educativo nacional en perjuicio de toda la sociedad.
Como decía Cristina Pacheco en su programa de televisión cuando entrevistaba a personas de sectores marginados “aquí nos tocó vivir”, los académicos debemos asumir la responsabilidad social de vivir en tiempos históricos de crisis social y contribuir con nuestro trabajo como educadores a la formación de cuadros que contribuyan al cambio social.
Pero en este momento, en lo inmediato, los trabajadores universitarios debemos unirnos a los trabajadores que luchan en contra de la reforma educativa, al mismo tiempo que debemos organizarnos para resistir en nuestro terreno universitario la imposición de un Estatuto de Personal Académico que lesiona los derechos de los académicos universitarios y luchar por el diseño e implementación de un EPA justo que surja de la propia comunidad docente.
Nos esperan días de lucha, los ataques a la educación púbica, las universidades públicas y sindicatos de académicos no respetan períodos vacacionales, por lo cual la lucha en contra de la educación no tiene vacaciones.
Aparte del reto de frenar la imposición de reformas educativas en todos los niveles de educación en nuestro país, de manera particular los académicos universitarios debemos elaborar un plan de acción que contenga las siguientes metas:
1.- Democratizar las instituciones de educación públicas, lo cual en el caso de la universidad de Sonora implica cambiar la antidemocrática Ley 4 que nos rige y que excluye la participación de los integrantes de la comunidad universitaria (maestros, trabajadores y alumnos) en la toma de decisiones importantes de nuestra universidad.
http://www.monografias.com/…/ley-4-universidad-sonora-impos…
2.- Eliminar la reelección de las autoridades universitarias
3.- Quitar el poder a la burocracia
4.- Transparentar el uso de recursos que se destinan a las universidades públicas.
Debemos tener presente que está en riesgo el futuro de la educación universitaria como un derecho social y el uso del conocimiento que en ella se genera como un derecho público.
El Comité Ejecutivo del STAUS tiene la responsabilidad histórica de asumir su liderazgo formal y organizar una respuesta colectiva a estas amenazas a la educación pública, a nuestra universidad como fuente de trabajo y a nuestra propia organización sindical.
Los integrantes del STAUS debemos despertar de nuestro letargo e inmovilismo social, para recuperar nuestra condición de sindicato democrático, crítico y progresista, retomando el contenido de la declaración de principios de nuestra organización sindical, que a la letra dice:” Nos constituimos en Sindicato para la defensa de los intereses laborales, académicos culturales, políticos y económicos de sus miembros.
http://www.staus.uson.mx/…/nor…/norm_36_03_10_2014_03_42.pdf
El día de hoy tales derechos están siendo violentados tanto por el gobierno federal como por las autoridades universitarias. Pero eso no es todo, se contempla en esta declaración de principios del STAUS:
“Nos identificamos plenamente con las causas justas y reivindicadoras de los campesinos y de los obreros; nos solidarizamos en los planteamientos y en la búsqueda de resoluciones para los problemas de cualquier índole que afecten a estos sectores y afirmamos nuestro propósito inquebrantable de contribuir sin limitación alguna, al logro de la unidad de las clases trabajadoras de nuestro país.”
Estamos en un momento histórico que exige hacer realidad esta hermosa declaración que nos da un gran sentimiento de orgullo la pertenencia al STAUS
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