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viernes, 17 de febrero de 2023

                                 Rompiendo paradigmas de lucha social

Oscar Yescas Domínguez

17 de febrero de 2023

La capacidad de reinvención del ser humano no tiene límites, a lo largo de nuestra existencia los seres humanos atravesamos por un funeral de identidades y al mismo tiempo creamos nuevas identidades que sustituyen a la anterior. Primero construimos una identidad psicológica en función de nuestra pertenencia a un género determinado, esta primera identidad se logra en la infancia, donde con la ayuda de las figuras significativas que participan en el proceso de socialización, construimos una identidad infantil, que es la etapa donde se consolidan las bases para la construcción de nuestra personalidad psicosocial, que en esencia, es una determinada forma de pensar, sentir y actuar que nos hace diferentes a los demás.

Con el paso del tiempo, en la medida que avanza nuestra edad, entramos en una etapa de cambios psicofisiológicos que nos hacen dejar atrás la identidad infantil y entramos en la adolescencia que se caracteriza por una crisis de identidad porque se deja de ser niño(a), pero todavía no se es adulto, es la llamada crisis de la adolescencia. Esta etapa conflictiva de nuestras vidas termina pronto cuando entramos en la juventud y entramos en un proceso de búsqueda de nosotros mismos, aprendiendo por ensayo y error a conquistar la autonomía individual. La juventud es la etapa de nuestras vidas que más disfrutamos la mayoría de las personas, porque es la etapa en la que sentimos que tenemos derecho a todo y tenemos toda una vida por delante.

Pero en la medida que seguimos creciendo llega un momento en el que tendemos a asumir responsabilidades propias de un adulto al encontrar trabajo, al contraer matrimonio y tener hijos, por lo que dejamos atrás la juventud y empezamos a construir una identidad como adulto responsable y que en una gran mayoría de casos se acompaña con una nueva identidad: la de ser padre o madre. Esta etapa de adultez es más prolongada que la juventud, porque dura varias décadas, durante las cuales el comportamiento socialmente esperado es que actuemos como proveedores trabajando un promedio de 30 años, hasta lograr rebasar la barrera de los 60 años e ingresar a la senectud, por lo cual nos vemos obligados nuevamente a dejar atrás esa identidad de adultos que mantuvimos en nuestra vida laboral activa, para construir una nueva identidad que nos acompañará en el ocaso de nuestras vidas, esta es la identidad de adultos mayores.

A lo largo de nuestra existencia vivimos en el contexto de una creciente desigualdad social, misma que ha crecido de manera inconmensurable en los últimos 30 años. Cuando llegamos a la senectud podemos mirar hacia atrás y ver que muchos familiares, amigos, compañeros de trabajo y conocidos, no lograron llegar a rebasar la edad de 60 años. Otro síntoma de desigualdad social se puede observar en el hecho de que quienes tuvimos la fortuna de tener una estabilidad en el empleo durante más de 3 décadas, logramos obtener una pensión después de jubilarnos, pero millones de personas de la misma edad y hasta con mayor antigüedad laboral no lograron obtener una pensión, lo cual nos convierte de facto en individuos privilegiados que gozamos de un derecho que se logró conquistar a través de varias luchas sindicales y movimientos colectivos. En en el momento que obtenemos nuestra jubilación, dejamos atrás nuestra identidad como trabajadores activos y construimos una nueva identidad: la identidad del jubilado o pensionado.

La representación social del jubilado tiende a percibirla como un trabajador retirado, no sólo de la vida laboral, sino también de la vida social. En algunos casos, se espera de quienes están en estado de retiro laboral que pasen la mayor parte de su tiempo en la privacidad de sus hogares y la imagen generalizada es de que se encuentren en pleno jubileo, es decir, gozando de su tiempo libre. La realidad es que después de toda una vida trabajando y debido a la edad, los jubilados y pensionados padecemos enfermedades propias de la edad (hipertensión, diabetes, etc.), que requieren visitas al consultorio médico con mayor frecuencia y un mayor número de medicamentos para mantener bajo control dichos padecimientos.

Estas son las razones por las cuales varias agrupaciones de jubilados se vieron en la necesidad de abandonar la comodidad de sus hogares para luchar en defensa de sus vidas, al enfrentarse a una deficiente atención médica, a un desbasto de medicamentos en el sistema de salud pública y a la amenaza de la pérdida del pago de sus pensiones en los próximos años bajo el argumento de que “no hay dinero” para seguir pagando pensiones.

Salir de lo privado y manifestarse en espacios públicos para exigir respeto a los derechos a la salud y a la jubilación, significó un cambio de paradigma en las luchas sociales porque, por un lado, rompe con el estereotipo del jubilado como persona en estado de aislamiento social, recluido en su ámbito de confort y privado de contacto social, para proceder a construir una nueva identidad como sujeto social activo que enfrenta la embestida de políticas neoliberales que pretenden privatizar los derechos a la salud y a la jubilación, lo cual lo convierte en los hechos, en un sujeto político.

Todo indica que el maestro Eduardo Galeano tenía razón cuando escribió el libro “El mundo patas arriba”, porque los trabajadores activos que están siendo objeto de las mismas agresiones que los jubilados al padecer desabasto de medicamentos y enfrentar la amenaza de perder el derecho a la jubilación, se encuentran inactivos, en estado pasivo y no levantan sus voces de protesta a pesar de estar organizados en sindicatos.

En cambio, un numeroso grupo de jubilados y pensionados de Sonora, pertenecientes a siete organizaciones de pensionados y jubilados, realizaron este día 15 de febrero la Asamblea Constitutiva del Frente de Jubilados y Pensionados de Sonora, en una reunión realizada en el local del Sindicato de telefonistas de la ciudad de Hermosillo, Sonora. En esta reunión que contó con una asistencia promedio de 300 personas de diferentes agrupaciones, asistió una comisión del Sindicato de Trabajadores Mineros de la sección 65 de Cananea, Sonora, quienes anunciaron su adhesión al Frente, por lo que esta naciente organización de organizaciones que es el Frente de Jubilados y Pensionados de Sonora, contará con 8 agrupaciones por lo que presenta una tendencia a un crecimiento cuantitativo.

El evento contó con la asistencia de dos conferencistas de alto nivel que impartieron una disertación sobre el estado actual de las pensiones en México  y el mundo entero: Dr. Gustavo Leal, Profesor-investigador de tiempo completo en la UAM-Xochimilco y Dr. Roberto Ramírez, profesor-investigador de la Universidad de Sonora.

La asamblea constitutiva del Frente de jubilados y pensionados de Sonora representó la fase final de la primera etapa de lucha en la construcción de una nueva organización de carácter ciudadano, sin relación alguna con partidos políticos y construida en forma horizontal para garantizar la democracia participativa en su conducción.

Los antecedentes de este frente se remontan al 1ro. De mayo del 2022, cuando una gran número de personas integrantes de varias organizaciones de jubilados y pensionados, lograron conquistar un espacio y marchar el día del trabajo protestando por las agresiones a sus derechos a la salud y a la jubilación. Venciendo resistencias de trabajadores activos que objetaban la participación de jubilados y pensionados en la marcha del día internacional de los trabajadores, argumentando que como jubilados no teníamos motivo para estar presente en esa marcha, logramos participar y visibilizarnos ante las autoridades del Gobierno del Estado, haciendo historia, porque fue la primera vez que un grupo de jubilados y pensionados participó en una marcha en el día internacional de los trabajadores.

La participación en esa marcha nos permitió conocernos y reconocernos como compañeros de lucha y el segundo triunfo que logramos, fue que las autoridades del Gobierno del Estado recibieron ese mismo día a integrantes de dos organizaciones de jubilados para atenderlos y resolver favorablemente parte de sus peticiones.

De mayo del 2022 a febrero del 2023, hemos realizado varias reuniones en las que hemos discutido la necesidad de actuar en forma organizada, unida y colectiva en defensa de nuestros derechos, hemos acordado construir un frente que incluya a todas las organizaciones de jubilados y pensionados de Sonora, acordando un plan de acción a seguir, una concepción de lucha basada en la unidad en la acción y sobre todo la construcción de una nueva identidad como sujetos que abandonamos el retiro para actuar como sujetos políticos globales.

Con la creación del Frente estatal, los jubilados y pensionados de Sonora, estamos presentando un nuevo comportamiento que es acorde a las nuevas condiciones que estamos enfrentando en un momento histórico en el que los derechos laborales y prestaciones sociales están en peligro de desaparecer ante la embestida de leyes neoliberales que intentan privatizar los derechos a la salud y a la jubilación.

Estos nuevos comportamientos implican la construcción de una nueva identidad de jubilados y pensionados, que al actuar en forma unida, organizada y colectiva logran un empoderamiento individual y colectivo, creando una nueva figura de jubilados y pensionados como sujetos políticos que comprenden que los problemas locales tienen un origen global y se impone la necesidad de crear y fortalecer lazos de unidad en la acción.

https://www.youtube.com/watch?v=eG0_uWqne9g&ab_channel=OscarYescas



Los trabajadores activos siguen inmovilizados a pesar de que la lucha de los jubilados por el derecho a la salud y a la jubilación, es una lucha que defiende sus propios intereses. Detrás de los problemas que afectan a jubilados y pensionados, se encuentra el accionar conjunto y homogéneo del poder corporativo, que está conformado por las grandes corporaciones que pretenden dejar caer el peso de la crisis económica sobre los hombros de trabajadores activos, jubilados y pensionados. Hasta el momento han logrado eliminar el derecho a la jubilación a las actuales generaciones de trabajadores, han logrado disminuir el número de pensionados y seguirán en sus intentos de privatizar la salud y eliminar las pensiones.

En el contexto de una sociedad inmersa en un estado de crisis social permanente, las instituciones y organizaciones que conforman nuestra sociedad, tarde o temprano se ven afectadas por esta, enfrentando una grave crisis de liderazgo. Los partidos políticos, los sindicatos no son la excepción y esa es la razón de que exista una gran distancia entre dirigentes y dirigidos. Las agresiones a los derechos de los trabajadores, jubilados y pensionados se presentan porque no encuentran resistencia alguna de parte de los trabajadores organizados en sindicatos y los jubilados y pensionados se encontraban abandonados a su suerte, porque al dejar de ser trabajadores activos, los sindicatos actúan como si ya no existieran.

En este contexto, la necesidad de construir nuevas organizaciones que representen los intereses de jubilados y pensionados, encuentra una respuesta pertinente al crear el Frente de jubilados y pensionados de Sonora, ya que representa una luz de esperanza en el horizonte social porque la creación de este tipo de organizaciones representa el surgimiento de un nuevo paradigma emancipatorio en la lucha por transformar la realidad social.

Acciones de este tipo cambian la visión estereotipada de los jubilados y pensionados como adultos mayores vulnerables que se encuentran en el ocaso de sus vidas totalmente indefensos, contribuyen a un empoderamiento individual y colectivo al crear una nueva imagen de los jubilados y pensionados que al actuar en forma unida, organizada y colectiva, están construyendo una nueva identidad como sujetos activos socialmente que han encontrado un nuevo motivo para seguir viviendo, al tomar los espacios públicos para luchar en defensa de sus propias vidas, al pelear por la recuperación de los derechos a la salud, de la jubilación y por una vejez vivida en condiciones de dignidad.

No estamos hablando de personas sin experiencia alguna, estamos frente a un colectivo que está integrado por individuos mayores de 60 años que a lo largo de sus vidas han participado en varias luchas sindicales y movimientos colectivos, por lo que reunidos han aprendido que la clave para obtener el triunfo en la lucha por la defensa de sus derechos se encuentra en la actuación unida, organizada y colectiva de todos los colectivos de jubilados y pensionados que anteriormente actuaban en forma dispersa y aislada.

También forma parte de su aprendizaje en esa lucha, la comprensión de la necesidad de actuar como sujetos globales porque la lucha por la defensa de la salud y de las pensiones se está librando en todos los países del mundo. Tan solo veamos el ejemplo de Francia, país en el cual se realizan actualmente masivas movilizaciones en contra de la reforma al sistema de pensiones que intenta aumentar la edad mínima de jubilación hasta los 65 años de edad y que se pretende aplicar en este año 2023. Esta reforma también pretende imponer la obligatoriedad de cotizar un mínimo de 43 años para cobrar la pensión completa, pero hasta el momento ha sido rechazada por los sindicatos de trabajadores.

En el caso de México, algunos sindicatos ya aceptaron que en sus contratos colectivos de trabajo se incluya el aumento de la edad mínima de 65 años para jubilarse, como sucedió en la Universidad de Sonora recientemente y por otro lado, en Teléfonos de México, la reciente huelga efímera del Sindicato de trabajadores, logró impedir que se tocaran las pensiones de los actuales trabajadores, pero la dirección nacional de este gremio aceptó que se reduzca el porcentaje de las pensiones de un máximo de 80% a un 60% de su último sueldo. Los más perjudicados serán los empleados de nuevo ingreso que no podrán disfrutar del derecho a la jubilación.

En este panorama, la creación del Frente de jubilados y Pensionados de Sonora, representa una bocanada de aire fresco, un alternativa que permite alimentar la esperanza, porque representa un paso adelante en la construcción de la unidad de un amplio sector social que no tenía representación gremial y se encontraba invisibilizado tanto para las diferentes autoridades gubernamentales, como para las direcciones de los sindicatos a los que pertenecieron durante sus vidas como trabajadores activos y no se diga del abandono e indiferencia que han sufrido por parte de los partidos políticos

Jubilados y Pensionados se encuentran inactivos laboralmente, pero activos políticamente, al ponerse de pie para luchar en contra de la agresión a los derechos a la salud y a la jubilación, derechos que están también siendo negados a los trabajadores activos y a diferencia de éstos últimos, dan un gran ejemplo de cómo lo viejo puede convertirse en algo nuevo, con la creación del Frente los jubilados y pensionados se visibilizan y se unen para hacer escuchar sus voces, enseñando con el ejemplo a los trabajadores activos cómo deben defenderse las agresiones a los derechos de la clase trabajadora, partiendo de dos premisas fundamentales:

a) Nadie defenderá los derechos mejor que los propios jubilados y pensionados

b) Gobierne quien gobierne, las  pensiones se defienden.


Yescas, Oscar: Invitación a participar en la Asamblea constitutiva del Frente de Jubilados y Pensionados de Sonora

https://oscaryescasd.blogspot.com/2023/01/convocatoriaa-la-asamblea-constitutiva.html

Yescas, Oscar: Un parto placentero: La creación del Frente Estatal de Jubilados de Sonora

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/10/unparto-placentero-la-creacion-del.html

Yescas, Oscar: En defensa de las pensiones y de la jubilación

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/07/endefensa-de-las-pensiones-y-de-la.html

Yescas, Oscar: Apuntes sobre la construcción del Frente Estatal de Jubilados en Sonora

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/06/apuntessobre-la-construccion-del-frente.html

Yescas, Oscar: El renacimiento de los jubilados

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/06/elrenacimiento-de-los-jubilados.html

Yescas, Oscar: Construyendo la unidad de los jubilados

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/05/construyendola-unidad-de-los-jubilados.html

Yescas, Oscar: Manifiesto por la unidad de los jubilados sonorenses

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/05/manifiestopor-la-unidad-de-los.html

Yescas, Oscar: Cuando lo viejo se convierte en nuevo y transforma la realidad

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/05/cuandolo-viejo-se-convierte-en-nuevo-y.html

Yescas, Oscar: Notas sobre la marcha de jubilados el primero de mayo en Hermosillo

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/05/notassobre-la-marcha-de-jubilados-el.html

Yescas, Oscar: ¿Por qué los jubilados debemos participar en el desfile del primero de mayo en Hermosillo? https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/04/porque-los-jubilados-debemos-participar.html

Yescas, Oscar: Por la recuperación de nuestros derechos

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/03/porla-recuperacion-de-nuestros-derechos.html

Yescas, Oscar: Horizontes de un paradigma emancipatorio

https://oscaryescasd.blogspot.com/2021/12/horizontesde-un-paradigma-emancipatorio.html

Conferencia del Dr. Roberto Ramírez hablando sobre las pensiones en México

https://www.youtube.com/watch?v=LOOljqaTKAM&ab_channel=OscarYescas

Charla del Dr. Gustavo Leal sobre el estado de las pensiones de trabajadores adscritos al apartado A en México. 

https://www.youtube.com/watch?v=FOHam_4qhHg&t=73s&ab_channel=OscarYescas

Charla del Dr. Gustavo Leal sobre el estado de las pensiones de trabajadores adscritos al apartado B en México.

https://www.youtube.com/watch?v=8qKydzdzE8o&t=37s&ab_channel=OscarYescas

Charla del Dr. Gustavo Leal con miembros del Frente de Jubilados y Pensionados de Sonora.

https://www.youtube.com/watch?v=fu4i0GCwfp8&t=72s&ab_channel=OscarYescas


domingo, 12 de febrero de 2023

     Las pandillas académicas y el aislamiento social de profesores-               investigadores

Oscar Yescas Domínguez

12 de febrero de 2023

El hombre es lobo para el hombre sentenció Thomas Hobbes (homo homini lupus) en 1651 al referirse al “estado natural” del hombre que lo lleva a una lucha en contra de su prójimo y con esta lapidaria frase fundamentó la creación de la figura del Leviatán, aquel gigante que crecía cada vez más al incorporarse más ciudadanos a la propuesta de crear un Estado-Nación que tuviera como objetivo garantizar la seguridad de los ciudadanos, mediar en los conflictos que surgieran entre la ciudadanía y garantizar el bienestar social (1).

Más de 370 años después de la publicación del histórico libro titulado El Leviatán, vemos con claridad la veracidad de esa afirmación al observar que la aldea global está inmersa en un mar de conflictos sociales, una guerra no reconocida (y por tanto inmoral) de varios países en contra de Rusia, el aumento de la desigualdad social, la explotación laboral y la destrucción de la naturaleza por el capital privado que derriba todos los límites que intentan ponerle en su camino de seguir maximizando sus beneficios económicos.

La irracionalidad impera en nuestros tiempos, las organizaciones contemporáneas padecen un neanderthallismo administrativos en su conducción. Quienes las dirigen ignoran con desprecio las aportaciones de las ciencias sociales que comparten resultados de investigaciones científicas que nos ayudarían a mejorar su funcionamiento, pero impera más la búsqueda del poder que la necesidad social de obtener un buen funcionamiento de las mismas.     En un mundo líquido que no mantiene la misma forma porque todo cambia en forma intermitente y discontinua, lo cual impide mantener un rumbo determinado y genera incertidumbre porque no sabemos lo que pasará el día de mañana, nos vemos forzados a desarrollar nuevos comportamientos para responder a los nuevos retos que enfrentamos cada día y vivimos con un temor constante a ser sorprendidos en forma desprevenida por algún tipo de cambio inesperado, porque la ola de cambios sociales se mueve a un ritmo vertiginoso y corremos constantemente el riesgo a ser relegados porque, los comportamientos que dieron resultado el día de ayer, hoy son insuficientes, por lo que tenemos que crear nuevos comportamientos para adaptarnos a los cambios que se nos presentan, pero enfrentamos el problema de que todavía no incorporamos como hábitos de nuestro comportamiento estas nuevas respuestas cuando de repente surgen nuevos cambios que exigen otro tipo de nuevos comportamientos.

En este contexto podría pensarse que una alternativa a largo plazo sería la de incrementar nuestro repertorio de comportamientos acudiendo a realizar estudios universitarios y formarnos como profesionales en alguna rama del saber científico. En el contexto de la creciente desigualdad social y económica, el porcentaje de personas que tiene oportunidad de realizar estudios universitarios es extremadamente bajo, por lo que las universidades son la opción más cercana para cumplir estas expectativas.

El problema es que en el contexto de la crisis social que experimenta nuestra sociedad, esta crisis se manifiesta en la crisis de todas las instituciones que forman parte de nuestro sistema social. Las instituciones gubernamentales, los partidos políticos, los sindicatos, los hospitales, las escuelas y universidades están atravesadas por una seria crisis de liderazgo que afectan gravemente su funcionamiento y provoca la lucha por el poder en su interior

Las universidades públicas, lejos de ser autónomas se han convertido en universidades empresas y la educación pública enfrenta fuertes embates por parte del neoliberalismo que pretende desaparecerla y privatizarla para convertirla en una mercancía más. La vocación por la docencia y la entrega del profesor a esta noble actividad está en riesgo de desaparición, porque una buena parte de docentes percibe su profesión como un trabajo que le genera una fuente de ingresos y le permite sobrevivir.

Como en todas las cosas dentro de nuestra sociedad en la que existe una gran desigualdad social, también existen niveles entre quienes se dedican a la docencia en instituciones de educación superior. Algunos tuvimos la fortuna de obtener una plaza de maestro de tiempo completo para desempeñar funciones como profesor-investigador a través de nuestra participación en un concurso de oposición y en base a ellos, logramos ingresar a un club de privilegiados que tuvimos estabilidad en el empleo (2).

Pero también existe la otra cara de la moneda que consiste en la existencia de cientos de profesores universitarios que trabajan con incertidumbre laboral porque son contratados con el sistema de horas-sueltas y por tiempo determinado, es decir, por semestre y no cuentan con la seguridad de ser contratados el siguiente semestre, ni garantía de impartir las mismas materias o contar con el mismo número de horas clase.

Ser parte del club de privilegiados no garantiza el desarrollo de un compromiso social, ni la entrega a la docencia con pasión y vocación, como se esperaría, ya que, como en todas las organizaciones, en la cultura universitaria prevalece el imperio de una ideología individualista y competitiva que se encuentra en constante estado de reconocimiento social y que en varios casos provoca una ruptura con la realidad social, al mantenerse al margen de los acontecimientos sociales y experimentar la sensación de pertenecer a un grupo de élite que merece un trato especial por el simple hecho de haber realizado “la proeza” de obtener el mayor nivel de estudios superiores.

Cuando esta sensación es compartida, suelen formarse agrupamientos informales que actúan como verdaderas pandillas académicas en el sentido que mencionó Pierre Bourdieu en su libro Homos académicos (2), a la lucha por el poder que se da en el ámbito de las instituciones de educación superior. En lo personal viví en carne propia la presencia y trato de exclusión por parte de agrupamientos de este tipo.

El día de ayer fui a la Universidad de Sonora a sacar mi credencial de jubilado, me tomó por sorpresa que la persona que me atendió de manera muy cortés, me preguntara ¿Cómo quería que apareciera mi identificación en la credencial?, ofreciéndome tres opciones: a) Maestro jubilado, b) Académico jubilado o c) Profesor jubilado. Sin dudarlo elegí la tercera opción y al ver la expresión de desconcierto que se reflejó en mi rostro ante tal pregunta, dicha persona me explicó que había atendido anteriormente a otros maestros jubilados, quienes mostraron rechazo a qué pusieran en su identificación la "simple expresión" de "Profesor o Maestro jubilado", porque tenían estudios de nivel Doctorado y deseaban que su nivel académico se reflejara en su identificación.

Al escuchar esta respuesta, no pude evitar recordar a varios colegas universitarios que conocí y que al presentarse aventaban por delante sus títulos académicos como si fueran parte de sus nombres y exigían un trato diferente por tener un elevado nivel de estudios superiores y muy dentro de mí, pensé en ese momento "hay algunas personas que no cambian sus hábitos y no satisfacen su necesidad de reconocimiento".

¿Qué importancia tiene el grado académico cuando ya estamos jubilados y porqué exigir que éste se incluya en la identificación si ya estamos retirados? Entiendo que cuando se está activo, el tener mayor nivel académico nos permite avanzar en nuestra carrera laboral y así podemos llegar más pronto a ocupar el máximo nivel de reconocimiento y categoría académica que es Titular "C", que sólo logran quienes tienen Doctorado, gran antigüedad y que hoy en día resulta cada vez más difícil obtener para quienes se encuentran activos.

Pero cuando pasamos a retiro laboral y nos encontramos en la condición de jubilados, pierde sentido (no valor) seguir exigiendo un trato diferencial por el hecho de tener un nivel alto de estudios. La cuestión es simple: estamos activos o estamos jubilados, los títulos académicos pierden importancia, porque los papeles ya no nos definen, lo que nos define siempre y con mayor claridad en el estado de jubilación, es nuestro comportamiento.

Mientras estuvimos activos laboralmente, tuvimos varias oportunidades de brillar como diamantes locos, al obtener logros y reconocimiento social, fuimos unos verdaderos privilegiados al realizar un trabajo que nos proporcionó la oportunidad de conocer a miles de estudiantes y obtener grandes satisfacciones, pero aún estando en la condición de jubilado, podemos seguir brillando sin necesidad de aventar por delante nuestros títulos académicos, al compartir nuestros conocimientos con quienes nos rodean o a través de redes sociales al publicar análisis de la realidad social como la opinión de simples ciudadanos. No necesitamos poner nuestros títulos para fundamentar nuestras opiniones, que algunos leerán y una gran mayoría quizá no las lea.

En realidad, pienso que es en nuestro estado de jubilación es cuando demostramos todo lo que aprendimos al compartir nuestros conocimientos con quienes nos rodean, sin las prisas que teníamos cuando estábamos activos, porque como dice el dicho “un maestro, siempre será un maestro”, y cuando se trata de ejercer la crítica social, cabe el otro dicho: “Un buen maestro es como la mafia, sabe demasiado”. Por esos motivos, creo que en el estado de jubilación lo que menos debe importarnos es que en nuestra credencial de jubilados se especifique nuestro grado de estudios. Exigir que aparezca esta información en nuestra credencial raya en la vanidad.

Al escuchar este testimonio, no se puede evitar recordar la expresión popular que dice "el doctorado no quita lo tarado", porque tiende a validarla y al mismo tiempo representa la existencia de una actitud clasista de aquellos que insisten en tener un trato diferente, muestran una necesidad de resaltar por encima de los demás, desean seguir viviendo de glorias que ya quedaron atrás, porque los títulos académicos funcionan sólo para ayudarnos a elevar nuestros ingresos cuando se encuentra uno activo, pero exigir su uso en las relaciones sociales estando jubilado, sólo refleja inseguridad ya que dan una falsa sensación de superioridad ante los demás.

Lo que sí podemos observar es que hay una enorme contradicción en el comportamiento de estos trabajadores intelectuales que actúan como “divas académicas”, porque el nivel académico que presumen y el grado de estudios obtenido, fue posible lograrlo porque laboraron en universidades públicas, y como suele suceder en este caso, fueron pagados por la Universidad de Sonora al proporcionar becas a sus profesores para que pudieran realizar estudios de Maestría o Doctorado, como parte de los beneficios de un Contrato Colectivo de Trabajo que contiene estas prestaciones sociales gracias a la lucha sindical, a la acción colectiva, organizada y unida de miles de docentes universitarios que lograron conquistar uno de los contratos colectivos más benéficos para los trabajadores.

No está de más mencionar, que la mayoría de profesores universitarios que tienen altos grados de estudios universitarios que actúan de esta forma clasista, son quienes menos han participado en las actividades de defensa del contrato colectivo de trabajo ante las constantes violaciones que realizan las autoridades universitarias, porque no sienten ninguna necesidad de protestar ya que pertenecen al club de privilegiados que son los profesores-investigadores que ocupan una codiciada plaza de tiempo completo.

No es exagerado afirmar que la búsqueda de mejorar sus estudios universitarios realizando estudios de Maestría o de Doctorado, no estuvo basado en la existencia de un compromiso social o para mejorar la enseñanza, porque en la mayoría de los casos, el ascenso de nivel académico estuvo motivado primordialmente por la búsqueda de mayores ingresos económicos y por el deseo de mejorar sus condiciones de vida personales.

Quizá esa sea la razón por la cual estos académicos terminan actuando como verdaderas "pandillas académicas", al unir esfuerzos para buscar juntos mejores y mayores posiciones de poder, ya sea dentro de la estructura organizacional de la Universidad de Sonora, ocupando puestos administrativos que les proporcionaban el derecho a recibir un aumento de sus ingresos económicos, vía compensación por ocupar dichos cargos, porque así lo contempla la Ley 4 de la Universidad de Sonora ya que paga mejores y mayores sueldos a empleados administrativos y en algunos casos llegan a triplicar los sueldos de los profesores-investigadores de mayor antigüedad y mayor nivel académico, como el sueldo de quien ocupa la silla de Rector que percibe un sueldo de $130,000 pesos mensuales. El "grupo de los químicos" mantiene el poder administrativo desde que inició la Ley 4 y el grupo de" Los Dorados" tiene el poder de la dirección del sindicato académico desde 2008.

La existencia de pandillas de docentes integradas por Divas académicas perjudica grandemente la calidad de la educación superior, porque centran sus esfuerzos en lograr posiciones de poder en lugar de enfocarlos al mejoramiento de su desempeño académico. Puedo decir con orgullo que ingresé a laborar a la Universidad de Sonora por la puerta grande al participar en forma simultánea en dos concursos de oposición en los cuales salí triunfador por lo que tuve el lujo de elegir entre dos importantes plazas, una como jefe del área de Psicología industrial y otra como jefe del área de psicología clínica. 

Decidí elegir la jefatura del área de Psicología clínica, pero los resultados fueron impugnados por uno de los participantes en ese concurso, por lo que desistí y me incliné por la jefatura del área de Psicología industrial. Posteriormente, me enteré que en la segunda ocasión que sometieron a concurso la jefatura del área de Psicología clínica, resultó ganadora una persona recién llegada de la ciudad de México. Esto me provocó que entre los participantes en el primer concurso experimentaran un resentimiento hacia mi persona porque "por mi causa" perdieron su oportunidad. 

Recuerdo perfectamente aquella ocasión en la que durante el primer año que empecé a laborar como profesor-investigador, después de haber ganado por concurso de oposición una plaza de tiempo completo y formar parte del grupo de privilegiados, un día terminé de conducir uno de mis seminarios y al caminar por los pasillos observé en un salón de clases a varios profesores de Psicología reunidos. Por mera curiosidad decidí ingresar al salón para saber de qué estaban hablando y si era posible participar en la discusión.

Escuché algunas intervenciones y me di cuenta de que la discusión giraba en torno a la sucesión del cargo de Jefe de la Carrera de Psicología como se le llamaba en aquel entonces a lo que hoy es Jefe de Departamento. Entonces decidí participar alzando la mano para hablar y fijar mi postura en torno a este tema y cuando se me concedió la palabra, propuse que en lugar de estar mencionando nombres de candidatos para ocupar ese puesto, lo más conveniente y práctico sería que discutiéramos en forma colectiva un plan de trabajo para que quien quedara en ese puesto se comprometiera a seguir los lineamientos de su contenido que definiríamos en forma grupal.

La respuesta que recibí de parte de una "diva académica" especialista en Psicología ambiental presente en esa reunión me tomó por sorpresa, esta persona me dijo lo siguiente: "Lo que pasa Oscar es que esta discusión es parte de un grupo al que tú no perteneces". Me quedé perplejo y respondí, ¿pero, por qué dices eso? Están aquí cerca de 20 profesores de Psicología, estamos en un edificio del Departamento de Psicología y Comunicación y el tema en la mesa de discusión es elegir al próximo Jefe de la carrera de Psicología. Yo soy maestro de tiempo completo del Programa de Psicología, ¿por qué dices que no puedo participar?

Su respuesta fue la misma, “sí es verdad, pero formamos un grupo al cual tú no perteneces en este momento”, miré a mi alrededor, el resto de profesores evitó hacer contacto visual conmigo, por lo que asumí que con esa pasividad y silencio avalaban lo dicho por aquella "diva académica", por lo que me puse de pie y me despedí diciendo, "hagan lo que ustedes quieran, pero les guste o no, yo estaré aquí hasta que decida jubilarme y mientras tanto expresaré mi opinión aún cuando ésta se enfrente a la de todos ustedes".

Dicho y hecho, mi estancia en el Departamento de Psicología y Comunicación fue algo similar al comportamiento de un Lobo estepario, tuve alumnos que después se convirtieron en mis jefes administrativos y exigían que les hablara de "usted" por su nivel jerárquico o académico, pero jamás les hice caso porque conocía sus debilidades y siempre les hable de tú pero con cortesía.

Con el paso del tiempo, las diferencias con mis colegas aumentaron porque debido a mi formación como psicólogo social egresado de la Universidad Veracruzana, mi visión de la docencia universitaria chocaba frontalmente con el reduccionismo psicológico que promovían la mayoría de los profesores de Psicología ya que fueron formados en la corriente conductista, una corriente a la que yo cuestionaba por considerar como algo más grave que un reduccionismo psicológico, porque incurrían en un error epistemológico mayor que es incurrir en un corrientismo psicológico, ya que se casaban con una corriente de la Psicología, denostaban y rechazaban todas aquellos enfoques de la Psicología que no fueran conductistas, ignorando que la Psicología es como dice Ian Parker en su libro La psicología como ideología “ la Psicología es como un gran árbol, del cual se deprenden varias ramas, algunas llevan el nombre de psicoanalistas, otras se autodenominan conductistas, algunos como gestaltistas, etc., pero todas llevan el apellido de Psicología” (3).

En diferentes seminarios, simposios y coloquios exponía con fundamentos epistemológicos la necesidad de construir una Psicología socialmente sensible (4) y con ello se evidenciaba que mi percepción de la Psicología era diferente a la de la mayoría. Sin falsa modestia, me considero un caso especial en mi labor como docente universitario, porque a diferencia de la mayoría, con el paso del tiempo empecé a escribir artículos, publicarlos en mi blog personal y después decidí utilizar dichos artículos como parte del material didáctico que revisábamos en mis seminarios. (5) Puedo afirmar que en mis últimos años como docente universitario, fui el único profesor de Psicología que utilizaba sus propios escritos como material didáctico (junto con otros materiales bibliográficos por supuesto), para conducir las reuniones de discusión grupal en la que analizábamos diferentes materiales teóricos (6).

Pero esto no fue tolerado por algunos miembros de las pandillas académicas de Psicología, porque en su afán de excluirme y ante la imposibilidad de refutar con argumentos teóricos, algunos compañeros profesores llegaron al extremo de prohibirles a sus alumnos citar mis artículos en sus ensayos, bajo el argumento de que mis artículos no estaban escritos con el formato APA y por eso carecían de validez científica. También por esa situación fui objeto de calumnias y difamación al difundir información falsa para desacreditarme entre los estudiantes, de esto me enteré por mis propios alumnos, quienes me compartieron esta información después de haber conocido mi profesionalismo como profesor y entrega a la docencia, que les permitió comprobar la falsedad de dichas acusaciones.

Mi comportamiento siempre fue diferente al de mis colegas, porque en la mayoría de ellos prevalecía el culto a la figura de autoridad en turno y esto se reflejaba cuando llegaba algún Director de División (algunos de ellos fueron mis alumnos) o recibíamos la visita de alguno de los que ocuparon la silla de Rector, la mayoría usaba la expresión "señor Rector" antes de hablar del asunto que deseaban expresar.

Por mi parte, siempre les hablé de tú a quienes ocupaban cargos de autoridades universitarias, porque desde mi punto de vista, esas personas no fueron electas democráticamente y no merecían tales deferencias. Estas irreverencias de mi parte nunca me las perdonaron y esos fueron los motivos por los que mi cubículo nunca fue equipado con persianas como el resto de mis compañeros profesores. Cuando me jubilé, retiré la cortina de tela que usaba para tener privacidad y la sola vista del cubículo sin persianas denunciaba la exclusión de la que fui objeto por "no ser parte del grupo o pandilla académica" de Psicología y Comunicación.

Ingresé a la Universidad de Sonora ocupando la plaza de Jefe del área de Psicología Industrial y con la imposición de la Ley 4 ésta se convirtió en Presidencia de la Academia de Psicología organizacional, en la cual me mantuve al frente durante 20 años porque aparte de mí nadie tenía el perfil académico para ocupar ese puesto.

Dentro de mis funciones estaba autorizar el registro de actividades académicas de los profesores que estaban adscritos a esta a academia y en varias ocasiones me vi en la penosa necesidad de rechazar algunas solicitudes porque identifiqué intentos de plagio o cambio de título en algunas que ya estuvieron registradas anteriormente. Obviamente, esto provocó malestar en mi contra en algunos compañeros docentes, pero me mantuve inflexible porque siempre he estado en contra de la simulación y corrupción. Las presiones para que firmara documentos apócrifos continuaron durante bastante tiempo, por lo que finalmente decidí presentar mi renuncia al cargo de Presidente de la academia de Psicología Organizacional después de haber estado al frente de la misma durante 20 años y me dediqué por completo a mis labores de docencia, investigación y extensión que me proporcionaban gran placer.

Como Profesor universitario que ocupaba una plaza de tiempo completo, formé parte del Directorio de jurados para evaluar a participantes en concursos de oposición y de evaluación curricular en varias ocasiones. 

Pero después de 20 años de participar en estos eventos, decidí declinar las posteriores invitaciones para este tipo de eventos, porque me di cuenta de que la mayoría de las veces eran tiempo perdido, ya que después de invertir varias horas en reuniones, revisión de expedientes de los concursantes y discusión entre los miembros de diferentes jurados para llegar a una conclusión bajo consenso de los resultados, muchas de las veces, nuestras recomendaciones fueron ignoradas por los distintos Jefes de Departamento que formaban parte de las pandillas académicas, quienes terminaban favoreciendo a personas distintas a las que recomendábamos para contratar a nuevos profesores y mantenerlos como incondicionales que seguirían sus instrucciones para asistir a las asambleas sindicales para votar en contra de la huelga, o en asambleas delegacionales para apoyar los proyectos o personas afines a la autoridad en turno.

Cuando se impuso la Ley 4 en 1991, la democracia murió en la comunidad universitaria y sólo se mantuvo en los espacios sindicales, ya sea dentro del Staus el sindicato del personal académico o del Steus, el sindicato de trabajadores y empleados de la Universidad de Sonora, pero en la estructura organizacional piramidal que surgió con esta ley, se crearon las condiciones para que surgiera un autoritarismo centralizado en quien ocupara la silla de Rector y para lograr un consenso de aceptación, los sueldos de los empleados administrativos superaron con creces los sueldos de los trabajadores académicos mejor pagados.

En estas condiciones surgió un nuevo grupo dentro de la comunidad universitaria que se denominó "los acadestrativos", conformado por académicos de alto nivel y gran antigüedad que abandonaban la docencia e investigación para ocupar puestos administrativos, atraídos por los altos sueldos que perciben los altos mandos de administración universitaria y las altas compensaciones económicas que recibían aparte de su sueldo como académicos.

Mientras las finanzas universitarias se desviaban para satisfacer la ambición de grupos que se disputaban el poder, la educación universitaria fue afectada grandemente porque se privilegió la contratación de personal de confianza pagando altos sueldos, por encima de la contratación de nuevas plazas de tiempo completo. Por parte del Staus se presentó la reiterada denuncia de que el presupuesto otorgado por la Secretaría de Educación Pública para crear nuevas plazas de tiempo completo, fue utilizado para la contratación de 300 plazas de personal administrativo de confianza.

Inclusive las autoridades administrativas de la Universidad de Sonora (dentro de las cuales se encuentran varios académicos) llegaron al extremo de tomar medidas que afectaban la calidad de la educación superior, porque cuando se desocupaba alguna plaza de profesor de tiempo completo, en lugar de someterla a concurso de oposición, las autoridades administrativas optaban por contratar maestros de horas sueltas que ingresaban a laborar en condiciones de incertidumbre porque no tenían la estabilidad en el empleo ya que no contaban con la seguridad de ser contratados en el siguiente semestre.

La apatía y falta de participación sindical de los trabajadores académicos permitió el florecimiento de las pandillas académicas que se disputaban entre sí el control de la dirección del sindicato de trabajadores académicos y la conquista de posiciones de poder dentro de la estructura administrativa de la Universidad de Sonora, mientras se presentaban varias violaciones contractuales y una de ellas fue la modificación unilateral al Estatuto de Personal Académico, realizada por el entonces Rector Heriberto Grijalva, quien impulsó la creación de grandes trabas para el ingreso y promoción del personal académico, al incluir el requisito de nivel de Doctorado como mínimo para ocupar una plaza de tiempo completo y exigir varios requisitos como una gran cantidad de publicaciones en línea para autorizar futuras contrataciones o promociones.

Los estudiantes fueron los más afectados porque en lugar de recibir su educación por maestros de tiempo completo que estuviesen dedicados a la docencia e investigación del área de su especialidad, recibían clases de maestros contratados por horas sueltas, que aceptaban dar cualquier clase con tal de aumentar sus ingresos quincenales, aún cuando no dominaran el tema o no tuvieran experiencia en el mismo. La universidad de Sonora abandonó su vínculo con las comunidades sociales, se convirtió en universidad-empresa y los estudiantes fueron transformados en consumidores que son adiestrados para trabajar como técnicos en alguna organización al servicio del capital nacional o extranjero

En la medida que avanzaba el tiempo, se agudizó la crisis al interior de la Universidad de Sonora, como parte de la crisis social que afecta a la sociedad en su conjunto, pero para una gran mayoría de trabajadores intelectuales que tuvieron la gran oportunidad de tener un trabajo que les permitía desarrollar su pensamiento, el análisis de la realidad social y el impacto de la crisis en la mayoría de la población, no formaba parte de sus inquietudes personales o de su agenda académica y la discusión del entorno social no estaba incluido en los programas de las materias.

El desarrollo tecnológico nos tomó por sorpresa afectando la docencia, por lo que nos vimos en la necesidad de usar internet, redes sociales y telefonía celular, como parte de las herramientas educativas para contrarrestar la creciente adicción a los teléfonos celulares y la pandemia del covid obligó al uso de la enseñanza virtual vía zoom.

Pero a pesar de que hoy en día la socialización se da en redes sociales, tal como bien argumenta Manuel Castells en su libro La sociedad Red (7), la ausencia de opiniones de trabajadores intelectuales en las redes sociales es parte del escenario cotidiano, por lo que es más fácil encontrar opiniones y críticas sin fundamento de cualquier persona, que encontrar opiniones y análisis bien fundamentadas de trabajadores intelectuales.

En el contexto de una sociedad compleja, inmersa en profundos y constantes cambios que generan un ambiente de incertidumbre, la ausencia en redes sociales de aportaciones de los trabajadores intelectuales que permitan a la población comprender qué es lo que está pasando y no usar el desarrollo tecnológico para compartir los conocimientos para que pudieran contribuir a la solución de los grandes problemas sociales, se presenta como una falta de compromiso social de parte de aquellos que tuvieron el privilegio de acceder al conocimiento científico y tener una mejor comprensión de lo que está sucediendo en nuestro entorno social.

Con este silencio, los trabajadores intelectuales enfrentan una "muerte social" en el sentido que definió Zygmunt Bauman al describir que quien no participa en redes sociales hoy en día, pasan a ser desapercibidos y no existen para la mayoría de la población que no tuvo oportunidad de realizar estudios universitarios.

Nuestra función como trabajadores intelectuales es describir la realidad en forma crítica, tomando en cuenta que el mundo no es un libro de texto, nosotros los intelectuales hacemos libros de texto sobre la realidad, pero la realidad es cambiante y no basta con escribir libros, se necesita promover la identidad de agentes de cambio social en cada ciudadano. Debemos tomar como punto de partida que estamos en una sociedad en crisis, una crisis que afecta a millones de personas, cuyas vidas están siendo destruidas y con nuestra participación podremos evitar que el hombre siga siendo el lobo del hombre.

Si los trabajadores intelectuales no describimos en forma crítica esta realidad y los efectos de la desigualdad social, estaremos actuando de forma tal que contribuiremos a reproducir la dominación y subordinación que permite el control social en favor de los grupos de poder. Nuestra tarea como intelectuales y docentes es enseñar cómo actuar en el contexto de una sociedad en crisis, visibilizando las acciones de lucha social para impulsar el empoderamiento de los ciudadanos y que puedan tener confianza en sí mismos y la seguridad de que el mundo puede ser transformado si se actúa en forma colectiva, organizada y unida.

La participación del trabajador intelectual en los movimientos sociales debe incluir el compartir el conocimiento científico, con las comunidades, con los docentes y activistas sociales, asumiendo una actitud de humildad y partiendo de que el intelectual es sólo otro ciudadano más participando socialmente y sobre todo que sus conocimientos no lo colocan encima del resto de la sociedad. De esta forma, el intelectual puede ser objeto de crítica y retroalimentación al recibir las opiniones de los demás en un proceso de enriquecimiento práctico y teórico.

“La función social del intelectual debe ayudar a construir comunidades o espacios democráticos en nuestra vida cotidiana, estimular la participación individual en asuntos públicos. Clarificar el vínculo entre lo personal y lo político, enseñar cómo las políticas públicas afectan las vidas privadas y de ahí motivar a incrementar la participación en política en los miembros de nuestras comunidades. En el salón de clase, en asambleas sindicales, en la creación de organizaciones civiles y representantes de colonias. Los intelectuales debemos tener presente lo que dijo Carlos Marx: nuestra tarea no se limita a comprender nuestra realidad, nuestro compromiso social implica contribuir a la transformación del mundo” (8) 

La mayoría de las personas no sabe qué es lo que está pasando en el mundo actualmente, no tiene idea de cómo les afectan los cambios sociales (9)  Aquellos afortunados que tuvimos oportunidad de tener estudios universitarios y sobre todo los académicos, profesores-investigadores sí sabemos qué es lo que está pasando en nuestra sociedad. En una sociedad donde crece cada día la desigualdad social, la exclusión de amplias mayorías al derecho a la educación, quienes tuvimos oportunidad de recibir educación universitaria y sobre todo, quienes trabajamos como profesores- investigadores de tiempo completo, tenemos el imperativo moral de participar en espacios públicos, expresando nuestras opiniones personales, cómo ciudadanos comprometidos, argumentando y fundamentando el análisis y aportando propuestas de solución a los problemas que nos aquejan cómo colectividad. 

La formación de pandillas académicas que surgen por la necesidad de individuos cuyo comportamiento es motivado por la ambición del poder, provoca un grave daño a las instituciones de educación superior porque permite la desviación de recursos financieros de su destino original que es el fortalecimiento de actividades que permitan elevar la educación.

Los intelectuales que navegan en las nubes del teoricismo necesitan “un baño de realidad” que les permita poner los pies en la tierra y dejar de actuar como divas académicas intocables, para proceder a desarrollar comportamientos de mayor compromiso social y sobre todo de mayor humildad. Quienes fuimos afortunados de tener un trabajo que nos permitió crecer personal y profesionalmente, debemos utilizar los adelantos del desarrollo tecnológico, todos los recursos tecnológicos disponibles: internet, redes sociales, telefonía celular, whatsapp, etc., para compartir nuestras opiniones como simples ciudadanos sobre los problemas que afectan a las comunidades a las que pertenecemos, opiniones que deberán estar fundamentadas en la experiencia que hemos adquirido con nuestra vida como docentes.

El no hacerlo, refleja una gran ceguera moral, una grave falta de empatía, un alto grado de individualismo y en el caso de la Universidad de Sonora, representa una grave contradicción con el lema que nos define como académicos universitarios: “El saber de mis hijos, hará mi grandeza"!

1.- Thomas Hobbes: El Leviatán

http://bibliotecadigital.tamaulipas.gob.mx/archivos/descargas/31000000555.PDF

2.- Yescas, Oscar: El club de privilegiados

https://oscaryescasd.blogspot.com/2018/07/el-club-de-los-privilegiados.html

3.- Ian Parker: La Psicología como ideología

https://rebelion.org/resena-de-la-psicologia-como-ideologia-contra-la-disciplina/

4.- Yescas, Oscar: Por una Psicología socialmente sensible

https://oscaryescasd.blogspot.com/2017/11/por-una-psicologiasocialmente-sensible.html

5.- Yescas, Oscar: Introducción a la Psicología de las organizaciones

https://oscaryescasd.blogspot.com/2017/10/introduccion-la-psicologia-de-las.html

6.- Yescas, Oscar: Introducción a la Psicología comunitaria latinoamericana

https://oscaryescasd.blogspot.com/2017/10/introduccion-la-psicologia-comunitaria.html

7.- Manuel Castells: La sociedad red

https://latam.casadellibro.com/libro-la-sociedad-red/9788420647845/1101018

8.- Yescas, Oscar: El compromiso social del trabajador intelectual

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/05/el-compromiso-social-deltrabajador.html

9.- Yescas, Oscar: Algo está pasando y usted no sabe que es¡ (Alborotando consciencias tranquilas). https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/07/algoesta-pasando-y-usted-no-sabe-que-es.html


martes, 7 de febrero de 2023

                               El vaciamiento de la democracia en México

Oscar Yescas Domínguez

07 de febrero de 2023

Hace tan solo seis años el mundo entero estaba sometido a liderazgos políticos que se basaban en un extremo autoritarismo social para lograr la imposición de medidas neoliberales y este estilo de dirigir en forma autoritaria se extendía a nuestras vidas cotidianas, sobre todo en los ambientes laborales y educativos. En el caso de México, a pesar de varios años de resistencia social expresada en la irrupción de movimientos colectivos que rechazaban las reformas neoliberales, rechazo a la corrupción, reclamando democracia y justicia, la representación social de la política estaba reducida a la política electoral.

Pero a pesar de que un amplio sector de la población mostraba un alejamiento a la política y rechazo a los gobernantes del prianismo, aún así en el discurso oficial se hablaba de que vivíamos en un mundo democrático porque teníamos la libertad de elegir a nuestros gobernantes, pero en cada período electoral se seguían cometiendo fraudes que burlaban la voluntad popular y terminaban por imponer en el poder a candidatos del prianismo que se caracterizaron por una descarada corrupción y por favorecer los intereses de las grandes transnacionales y oligarquías nacionales. La democracia social estaba muerta en la vida cotidiana porque el constante adoctrinamiento de los medios masivos de difusión construyó una percepción social de la misma que se limitaba a la democracia electoral, aún cuando en las jornadas electorales no se respetaba el voto de la mayoría de la población.

La inconformidad por los continuos fraudes electorales fue creciendo con el paso del tiempo y este sentimiento aumentó con el crecimiento de la desigualdad social, con el aumento de la explotación laboral, de la destrucción de la naturaleza y de la corrupción existente en las más altas esferas de los gobiernos, de tal forma que creció hasta llegar a niveles de hartazgo social que se expresó en grandes movilizaciones de sectores sociales que salieron a las calles para luchar por la democracia, por la justicia y por recuperación de derechos perdidos, recibiendo como respuesta la acción violenta de cuerpos represivos del Estado.

Los medios masivos colaboraron con la cúpula del poder para crear una percepción social de condena a los manifestantes e intentaron criminalizar las protestas sociales, pero la inconformidad social era tan grande que la población vio con claridad los intentos de manipulación de estos medios masivos por lo que terminaron sumidos en una crisis de credibilidad y el rating de audiencias de los mismos disminuyó drásticamente.

El nivel de inconformidad social creció con las injusticias de la Guardería ABC, el caso de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, la prolongada huelga de los mineros de Cananea y llegó a niveles de hartazgo social que amenazaba con producir un estallido social violento ante el surgimiento de grupos armados en varios lugares de México, en varias comunidades rurales sus pobladores decidieron tomar las armas para defenderse a sí mismos y a sus familias en contra de la violenta actuación de la delincuencia organizada. De esta manera, surgieron grupos armados que se autodenominaron guardias comunitarias en Estados de Guerrero, Chiapas, Veracruz, Oaxaca, pero también surgieron grupos armados que se autodenominaban abiertamente grupos guerrilleros que luchaban por un cambio de sistema político en México.

En este contexto se presentaron las elecciones presidenciales del 2018 en México y por las razones anteriores se pudo afirmar en aquel entonces, que las mismas representaban la última oportunidad de conseguir un cambio social por la vía pacífica, utilizando la vía electoral como forma de transición de un estilo de gobierno basado en un extremo autoritarismo, a un nuevo régimen social emanado de elecciones libres y orientado a consolidar un Estado donde prevaleciera una auténtica democracia. Las experiencias de fraudes electorales previos, el autoritarismo gubernamental, la agudización de la crisis económica y de la crisis política, crearon un ambiente de inconformidad y hartazgo social, que de haberse presentado un nuevo fraude electoral, la inconformidad social no lo hubiera permitido y sin duda alguna se hubiera presentado un violento estallido social.

Afortunadamente, la enorme participación social de la población mexicana en las elecciones de 2018, permitió evitar los innumerables intentos de fraude electoral y el partido de Morena que se presentaba por primera vez en una contienda electoral representado por Andrés Manuel López Obrador, quien contendía por tercera ocasión en elecciones presidenciales, después de haber sufrido dos grandes fraudes electorales, lograron triunfar de forma clara en aquella histórica jornada electoral.

La derrota del Prian en México, significó la caída de la dictadura más longeva de América latina, la dictadura perfecta del prianismo, que sumaba más de 70 años en el poder, pero sobre todo, representó el triunfo de la voluntad popular, el respeto al voto en una jornada electoral y el triunfo de la democracia en elecciones presidenciales, un triunfo realizado en condiciones difíciles por los innumerables intentos de fraude, que se lograron evitar por la masiva participación del pueblo mexicano.

Un triunfo electoral que sorprendió a los propios mexicanos que vivieron toda una vida de fraudes electorales y el haber logrado hacer respetar la voluntad popular fue motivo de festejo nacional, la noche misma del día de las elecciones y los días posteriores a los comicios electorales. El triunfo de la democracia electoral en México llamó la atención de todo el mundo, no sólo porque significaba el fin de una “dictadura perfecta” que logró que la imagen de México fuera inevitablemente asociada con la imagen de gobiernos corruptos, sino también porque representó el anuncio de que la democracia renació de las cenizas de la corrupción, demostrando que estaba viva y que su resurgimiento dependía de la participación social colectiva y de la unidad en la acción de millones de personas que con una pequeña acción individual, lograron un gran cambio social. En ese sentido, se puede hablar de que el triunfo electoral de Morena y Andrés Manuel López Obrador en México, representó una bocanada de aire fresco en Latinoamérica y el mundo entero, sobre todo en aquellos países que se encontraban todavía sumidos en el autoritarismo de sus gobernantes.

El triunfo en México alimentó la esperanza de construir un mundo nuevo y demostró que el cambio social era posible utilizando medios pacíficos, como lo fue en este caso, la democracia electoral, por lo que sirvió de ejemplo para que en otras naciones que lograron posteriormente triunfos similares utilizando el voto electoral y lograron cambiar el horizonte geopolítico en Latinoamérica: Evo Morales en 2019, Luis Arce en Bolivia al recuperar el poder después del golpe de Estado en este mismo país, Pedro Castillo en 2021, Gabriel Boric en Chile en 2021, Gustavo Petro en Colombia en 2022, Luis Ignacio Lula Da Sila en Brasil en 2022, etc.

La recuperación de la democracia por la vía electoral no ha estado exenta de reacciones de grupos conservadores de derecha y de representantes de los intereses económicos de las grandes transnacionales, porque en fechas recientes se han dado dos golpes de Estado en Latinoamérica, uno para deponer de su cargo a Evo Morales como Presidente en Bolivia y otro con Pedro Castillo en Perú. En el primer caso, la aventura golpista duró poco tiempo, porque el pueblo boliviano se organizó, logró recuperar el poder en nuevas elecciones y poner tras la cárcel a Jeaninne Áñez, quien con la biblia en la mano se autoproclamó Presidenta de Bolivia y desató una feroz represión en contra de quienes se manifestaron en contra del golpe de Estado. En el caso de Perú, Pedro Castillo continúa preso y sigue imperando el autoritarismo policiaco de Dina Boluarte quien se autonombró Presidenta del Perú, en contra de la voluntad popular que sigue tomando las calles a pesar de sufrir una sangrienta represión policiaca que ha dejado como saldo más de 64 muertos, centenares de detenidos y varios heridos. En el caso de Brasil, hubo un intento de golpe de Estado para impedir la toma del poder a Luis Ignacio Lula Da Silva, pero no tuvo éxito porque fue abortado por la lealtad institucional de Jefes militares y representantes políticos.

Estas fuerzas oscuras que manejan la ideología neoliberal, intentan continuar con la imposición de políticas de privatización que violan derechos humanos, saquean las riquezas naturales de los países latinoamericanos, destruyen la naturaleza y provocan la exclusión y marginación económica y social de amplias capas de la población, condenándolas a vivir en condiciones de pobreza extrema.

Mientras que en los países de origen de las grandes corporaciones los políticos se autodenominan “democráticos” y se presentan como “democracias modelo”, en su afán de imponer las políticas neoliberales en el mundo entero, llegan al extremo de acusar de “antidemocráticos” a aquellos gobernantes y países que se niegan a aceptar las políticas privatizadoras y de explotación de recursos naturales por parte de las compañías transnacionales. El neoliberalismo que comenzó como una teoría económica y ha evolucionado hasta convertirse en una ideología que nos conduce a pensar que aquellos gobiernos que no aceptan la soberanía del capital, son gobiernos antidemocráticos y autoritarios.

La premisa de que “todo el poder emana del pueblo y la soberanía popular”, pierde importancia para algunos gobernantes que ceden ante las presiones de las grandes potencias mundiales que con el apoyo de organismos financieros internacionales y terminan por aceptar la imposición de la premisa neoliberal que dice “la democracia tiene que ser conforme al mercado”, decidiendo dejar atrás la soberanía popular que los llevó al poder y optan por gobernar a favor de las grandes corporaciones, mientras que manejan simultáneamente un discurso a favor de la democracia, provocando que éste concepto (democracia) pierda nuevamente sentido y significado para convertirse nuevamente en letra muerta.

¿Cómo es que sucede esto? Podríamos entenderlo si reconocemos que en el contexto de la economía de libre mercado en la que vivimos, los medios masivos de comunicación (que son propiedad privada), cumplen una función importante al difundir la idea de que la opinión pública son las opiniones publicadas a favor de alguna decisión gubernamental o privada, o a favor de algún candidato en época de elecciones. Con estas acciones, los medios masivos de comunicación silencian las voces de protesta, oprimen la disidencia y logran convertirse en instancias de control de la opinión pública mientras manejan la bandera de la libertad de opinión.

También debemos identificar a uno de los participantes más importantes en todas las elecciones que es el poder económico, porque contribuye con financiamiento y apoyo a partidos y candidatos para impulsar una campaña electoral, previo acuerdo de beneficiarse con concesiones de estos candidatos cuando se conviertan en gobernantes. La presencia de este poder es invisible porque los medios masivos de difusión no sólo no la mencionan, sino que participan en su encubrimiento para crear la ilusión de que las elecciones “son limpias y la contienda electoral se realiza en condiciones de igualdad”.

Cuando las masas muestran indiferencia hacia “la política” decepcionados por aquellos políticos que manejan un doble discurso porque dicen gobernar para el pueblo cuando en realidad están actuando a favor de las grandes empresas y se alejan de ella, están renunciando a su derecho a participar en la toma de decisiones de gran relevancia política, están renunciando también a su soberanía como país y aceptando que los recursos naturales que pertenecen a la nación sean entregados al poder económico en la forma de “acuerdos comerciales internacionales”, pero sobre todo, están aceptando un vaciamiento de la democracia porque el pueblo pierde su soberanía y queda indefenso ante el poder económico que adopta la forma del capital.

Cuando triunfó Andrés Manuel López Obrador en las elecciones presidenciales del 2018, el pueblo mexicano sintió que finalmente estaba en el camino de la liberación social por haber derribado la dictadura del Prianprd, pero, como en la mayoría de los procesos revolucionarios y movimientos sociales, al interior de Morena ha surgido un nuevo termidor que ha desviado el propósito de la consigna que captó la atención de millones de personas para actuar juntos de manera organizada, unida y colectiva: Juntos haremos historia.

Carlos Marx usó este término (termidor) para describir el apropiamiento de la revolución francesa por parte de la burguesía desplazando al proletariado, León Trotsky lo usó para describir la desviación stalinista de la revolución rusa, en México tuvimos un termidor con el surgimiento del Partido Revolucionario Institucional que desvió el camino de la revolución mexicana a extremos que ya conocemos.

El asunto es que la mayoría de los procesos revolucionarios que logran grandes avances en la transformación del entorno social, terminan por ser contenidos por procesos conservadores encabezados por figuras destacadas dentro del nuevo poder o por intelectuales que redefinen el sentido del movimiento popular, traicionando los principios que dieron origen al mismo al crear una ortodoxia del movimiento revolucionario que transforma las ideas de la revolución, las redefine y procede a legitimar el nuevo poder político con una orientación diferente a los motivos que dieron origen

Este pensamiento legitimador del nuevo poder se convierte en un pensamiento ortodoxo representa a la nueva élite gobernante y se convierte en el nuevo pensamiento dominante que no acepta críticas o cuestionamientos, porque aquellos que se atrevan a cuestionar al nuevo régimen son catalogados de “voceros del viejo régimen”, “reaccionarios” o “agentes desestabilizadores del nuevo orden social”.

En México tenemos un nuevo termidor que está desviando el movimiento de revolución de las consciencias iniciado en 2018 y toma cuerpo en las legiones de elementos procedentes del Pri, Pan, Prd que han tomado el poder al interior de Morena ocupando posiciones clave en la dirección del partido en el poder. Estos elementos oportunistas conocidos popularmente como “Chapulines políticos”, en su lucha interna por conquistar el poder del partido y en su ambición de ocupar puestos de alto mando en las estructuras del Gobierno mexicano en sus tres niveles, han desplazado a auténticos militantes de Morena, han provocado un alejamiento del partido en el poder de los movimientos colectivos que continúan en pie de lucha, han ignorado las demandas de la población que los llevó al poder y se han negado a realizar elecciones internas para elegir candidatos a puestos de elección popular.

Mientras que a nivel internacional se siguen presentando resistencias a la implementación de políticas neoliberales y luchando por conquistar una verdadera democracia que consiste en la participación colectiva en la toma de decisiones relevantes para la mayoría de la población, en México estamos retrocediendo por la acción del termidor que se ha apoderado de Morena porque ante la cercanía de las elecciones presidenciales que tendrán lugar en México en el 2024, la dirigencia de Morena intenta manipular la opinión pública al presentar a ciertos personajes como pre-candidatos presidenciales, manejando la idea de que dichos nombres surgieron como resultado de encuestas realizadas y se perfilan como los que tienen más popularidad o mayor aceptación de la población. Quienes dirigen al partido que llegó al poder mediante la democracia electoral, actúan negando su esencia original al negar la realización de ejercicios de democracia interna para seleccionar candidatos a puestos de elección popular en las elecciones presidenciales del 2024 y pretenden engañarnos nuevamente con el truco sucio que utilizaron en el 2021, al usar las encuestas para seleccionar a candidatos de elección popular, con el argumento de que son métodos científicos de selección de candidatos. Ahora resulta que quienes se encuentran disfrutando del poder, pretenden eternizarse en el mismo y llegan al extremo de pretender decirnos por quien debemos votar en las elecciones del próximo año.

Es evidente que los partidos del Pri, Pan, Prd y demás corifeos del régimen del prianismo se encuentran desgastados, rodeados de desconfianza, incredulidad y enfrentan un rechazo social por representar a quienes en el pasado realizaron prácticas de corrupción, injusticias y antidemocracia. Por estas razones, la mayoría de la población mexicana no desea un regreso de estos partidos, porque representan a una delincuencia organizada que hizo mucho daño al país y este rechazo popular le da una gran ventaja a Morena para obtener el triunfo electoral el año que entra.

Pero, si la direcciones nacionales y estatales de Morena insisten en negar la participación de sus militantes en la elección de los candidatos que contenderán para puestos de elección popular, corren el riesgo de que suceda lo acontecido en la capital sonorense en las elecciones del 2021, cuando el autoritarismo de Alfonso Durazo, en aquel entonces candidato de Morena, quien hoy ocupa el cargo de Gobernador, intentó imponer la reelección de Célida López como Presidenta municipal de Hermosillo ignorando el repudio de la ciudadanía hermosillense hacia esta persona por su mal manejo del gobierno en los años 2018-2021 y por ese empecinamiento, Morena recibió un voto de castigo, por lo que pasó a ser debut y despedida en la capital sonorense porque recibió un voto de castigo en su contra y el candidato del Pan ganó las elecciones.

Es indudable e incuestionable que Andrés Manuel López Obrador ha impulsado grandes programas de combate a la corrupción y de bienestar social que han favorecido a una gran cantidad de la población. También está fuera de duda que AMLO tiene la capacidad de convocatoria para movilizar a millones de personas. Pero, por otro lado, no se puede negar que la pobreza continúa creciendo, que sigue aumentando la distancia abismal entre pobres y ricos, así como que también es cierto que funcionarios del Gobierno federal y de gobiernos estatales se están enriqueciendo con el presupuesto público al recibir sueldos mayores a los que percibe el propio Presidente, mientras que los trabajadores de los diferentes niveles del gobierno en nuestro país, perciben sueldos bajos y en consecuencia, cuando se jubilan reciben pensiones bajas.

Representa una verdadera contradicción que en varios países latinoamericanos estén regresando al régimen del sistema universal de pensiones, abandonando las afores, mientras que en México, el propio gobierno apoya la privatización de las pensiones. La llamada Cuarta Transformación no ha realizado reformas estructurales que permitan el regreso de los derechos eliminados por reformas neoliberales impulsadas por el prianismo, los programas de bienestar social corren el riesgo de desaparecer si toma el poder un partido que no sea Morena y es precisamente ese peligro es el que se utiliza como amenaza para invitar a la población a que vote por Morena en las próximas elecciones, para mantener el gobierno de la “cuarta transformación”.

Lo que también es claro para la población también es que AMLO no es Morena y viceversa, Andrés Manuel es el Presidente mexicano que tiene más aceptación popular en la historia del país, su popularidad, lejos de disminuir ha ido en ascenso, pero Morena presenta una situación distinta, porque ha cambiado mucho en estos cuatro años que tiene en el poder y este cambio, lejos de mejorar, presenta una gran descomposición interna, tan grave que la forma de gobernar en varios Estados del país, ha provocado grandes decepciones en varios Estados de la república y esto se reflejó en las elecciones del 2021 al disminuir el número de votos a su favor.

Morena ha dejado de ser el partido de la esperanza, la consigna Juntos haremos historia ha quedado en el olvido, los dirigentes de Morena se han distanciado de los movimientos colectivos y de la población mexicana. La promesa de combatir la corrupción está siendo olvidada y en algunos casos se actúa protegiendo a quienes incurrieron en actos de corrupción durante el prianismo, como sucedió con Claudia Pavlovich a quien Andrés Manuel López Obrador la protegió otorgándole el nombramiento de Cónsul de México en Barcelona, España.

Morena dejó de ser movimiento social se distanció del pueblo mexicano y los funcionarios de alto nivel del nuevo gobierno ignoran los reclamos de la población cuando exigen justicia o democracia y sólo se acercan a los ciudadanos en período de elecciones para solicitar el voto a favor de un candidato que será elegido por el Presidente o la cúpula en el poder.

En vísperas de las elecciones presidenciales del 2024, la Dirección Nacional de Morena pretende usar la misma fórmula de las encuestas para seleccionar candidatos y promueven la candidatura de Claudia Scheinbaum, a quien según afirman, las encuestas la colocan en el primer lugar de “las preferencias del electorado” y en algunos actos se le recibe ya con el grito de “Presidenta, Presidenta”. La opinión de los militantes de Morena y de la población mexicana se intenta ignorar argumentando que se debe presentar un frente unido para no permitir el regreso de la oposición conservadora y reaccionaria conformada por el prianismo y representantes del capital privado. Todas estas acciones representan un vaciamiento de la democracia en momentos en los que, a nivel internacional, se están dando grandes luchas para recuperar derechos perdidos, en contra de medidas neoliberales, reclamos de justicia y democracia.

El pueblo mexicano necesita terminar con el vaciamiento de la democracia que están provocando las prácticas autoritarias del partido que hoy se encuentra en el poder y proceder a democratizar la democracia para reasignarle el significado original que obtuvo cuando surgió en la historia de la humanidad por la necesidad de encontrar un equilibrio entre la diversidad de opiniones existentes dentro de un conglomerado social.

Durante décadas hemos sido engañados al decirnos que vivíamos en gobiernos democráticos y el argumento principal para convencernos era que se nos permitía elegir a nuestros gobernantes, pero que ¿pasa después de las elecciones? La democracia en su sentido original significa un gobierno del pueblo, para el pueblo y por el pueblo.

Después de más 4 años de gobierno de Morena, no ha realizado ninguna acción de educación política con el pueblo mexicano que sigue percibiendo que la democracia se limita a una democracia electoral en la que la población sólo tiene participación política a través de un voto electoral y después regresa al ámbito de lo privado y deja a los políticos “hacer su trabajo”, al reducir el significado de la democracia a la participación electoral estamos asesinando a la democracia porque la democracia debe ser un estilo de vida y no sólo ejercicios electorales periódicos. Son más de cuatro años de disposición al cambio de parte de la población mexicana que han sido desperdiciados y en muchos casos, tiende a desaparecer por las constantes decepciones de los gobiernos de Morena a lo largo y ancho del país que provocan alejamiento de la política de amplios sectores de la población.

Hasta el momento hemos sido gobernados por el sistema de la democracia representativa que históricamente ha favorecido a la clase en el poder, en la medida de que la toma de decisiones relevantes se da al interior de pequeños grupos que que forman parte de instancias de representación popular, en donde se toman decisiones que afectan los intereses de la población al beneficiar a intereses particulares, por lo que puede decirse que este tipo de democracia ha demostrado su fracaso como forma de gobierno porque en realidad no representa a la población y la creciente participación social en movimientos colectivos que están surgiendo en el ámbito internacional nos muestra que se encuentra en la etapa final de su vida.

En su lugar se está construyendo desde abajo una democracia participativa, en la que los integrantes de las comunidades sociales ven como algo necesario la participación en política para encontrar la solución a sus problemas. Ante el vacío de liderazgo que presenta la crisis de Morena como institución política, surgen movimientos ciudadanos colectivos, integrados por ciudadanos que no pertenecen a ningún partido y buscan construir organizaciones autónomas de ciudadanos que contribuyan a lograr un equilibrio social, participando como un cuarto poder en la vida social que contribuya a construir una verdadera democracia social. En la medida que aumenta la participación social, se fortalece la democracia participativa y los partidos políticos que se alejaron de la ciudadanía, pierden sentido y futuro porque disminuye su base de apoyo social.

Para construir una verdadera democracia necesitamos incentivar la participación ciudadana en asuntos de interés público y de relevancia social en la toma de decisiones, a esto se conoce como democracia participativa en la que los ciudadanos actúen como sujetos políticos desde el interior de sus comunidades, realizando reuniones vecinales, comunitarias, expresando sus opiniones personales en una discusión colectiva en el cual analicen su situación social, identifiquen los problemas más relevantes que les están afectando, tomen decisiones bajo consenso y construyan conjuntamente estrategias para enfrentar los problemas previamente detectados.

La búsqueda de la democracia como forma de gobierno sigue siendo el motor que impulsa el surgimiento de diversos movimientos sociales a lo largo y ancho del mundo entero, que presentan una gran resistencia en contra del autoritarismo de sus gobiernos y de la implementación de políticas neoliberales. Francia, Inglaterra, Perú, Bolivia, Colombia, Brasil, entro otros países muestran el camino a seguir en la lucha por la defensa de los derechos de los trabajadores y la construcción de la democracia participativa.

En México existen movimientos colectivos que siguen presentando resistencia a la implementación de políticas neoliberales, luchan por la democracia y por la recuperación y defensa de derechos laborales, lo que contradice el discurso oficial de la existencia de una Cuarta Transformación y de un “humanismo mexicano”. A pesar de tener una gran capacidad de convocatoria, Andrés Manuel López Obrador, no ha convocado a la aprobación de contrarreformas que recuperen los derechos perdidos por los trabajadores en los regímenes prianistas, no ha combatido a fondo la corrupción de gobiernos anteriores y al contrario, ha protegido a figuras como Claudia Pavlovich ex-Gobernadora de Sonora de investigaciones en su contra dándole inmunidad diplomática como Cónsul de México en Barcelona. Los intereses de las corporaciones transnacionales y de la oligarquía local siguen siendo siguen siendo protegidos por las instituciones creadas por el prianismo (Poder Judicial de la Federación, Secretaría del trabajo, Instituto Nacional Electoral, etc.) y la democracia en México sigue siendo un anhelo del pueblo mexicano.

Para terminar con el vaciamiento de la democracia en México, la ciudadanía debe empezar a creer en sí misma y participar en el concierto mundial de voces emanadas por participantes de movimientos colectivos que están enfrentando una lucha en contra del neoliberalismo, por la recuperación reconociendo que el trasfondo de la crisis que padecemos en México es la crisis del capitalismo como sistema social y esta consideración nos empuja a romper la pasividad social y terminar con el alejamiento de la política.

La renovación y saneamiento de las instituciones políticas y gubernamentales en México, no provendrán de la acción de un sólo hombre, porque sólo podrá lograrse a través de la participación de los trabajadores en forma organizada y colectiva. La consolidación de la democracia social requiere de la creación de nuevas instituciones que, como toda creación humana, deben ser producto de la participación colectiva impulsada por la movilización del pueblo trabajador.

El pueblo mexicano debe tomar consciencia de su historicidad, es decir, de su capacidad para hacer historia, cambiando el rumbo de los acontecimientos a través de su participación social y proceder a la democratización de las organizaciones a las que pertenecen, sean Asociaciones civiles, movimientos ciudadanos, sindicatos de trabajadores organizados o militantes de Morena. Es evidente que la población mexicana experimenta un fuerte rechazo a volver hacia atrás, presenta una gran resistencia al regreso del prianismo, pero al mismo tiempo, experimenta una gran inconformidad con el funcionamiento actual de Morena como partido en el poder, ya que desea una verdadera transformación social de la estructura, cultura y funcionamiento del Gobierno mexicano.

En esa línea de pensamiento diversos movimientos colectivos enarbolan banderas de lucha con las siguientes demandas:

  • Rechazo a las concesiones mineras

  • Defensa del derecho de huelga

  • Derecho a la estabilidad en el empleo después de 6 meses

  • Retorno al sistema de solidaridad en las pensiones

  • Rechazo al uso de las UMAS en el pago de las pensiones

  • No a la entrega del agua y recursos naturales a empresas transnacionales y privilegiar su uso para consumo humano

  • Rechazo al aumento de la edad de jubilación

  • Aumento salarial de emergencia

  • Solución a la huelga de los mineros de Cananea

  • Disminución del sueldos a funcionarios de alto nivel en la estructura de gobierno de los tres niveles

La democracia en su sentido original significa un gobierno del pueblo, para el pueblo y por el pueblo. No debe limitarse su práctica a las jornadas electorales y debe formar parte de nuestro estilo de vida, tanto en el ámbito público como en el privado, en la vida familiar  en los ambientes laborales. 

Para terminar con el vaciamiento de la democracia en México y construir una verdadera democracia, necesitamos incentivar la participación ciudadana en asuntos de interés público y de relevancia social, participar en la toma de decisiones que contribuyan a su solución. A esto se conoce como democracia participativa en la que los ciudadanos actúen como sujetos políticos desde el interior de sus comunidades, realizando reuniones vecinales, donde los participantes sientan la libertad de expresar sus opiniones en el marco de una discusión colectiva, analizando la situación social, identificando los problemas más relevantes, tomando decisiones bajo consenso y construyendo en forma conjunta estrategias para enfrentar los problemas detectados y luchando unidos construyendo una nueva identidad social como agentes de cambio social. AMLO ha dicho una y otra vez: "sólo el pueblo, salvará al pueblo". La solución a los problemas sociales que afectan a la población, sólo podrá realizarse cuando la población actúe en forma unida, organizada y colectiva, retomando la vieja consigna con la que Morena llegó al poder y que hoy quienes se encuentran disfrutando del poder han olvidado: Juntos haremos Historia. 

Alguien podría preguntar en este punto: ¿Cuál es el papel de quienes hoy son diputados y senadores en la construcción de la democracia participativa? Si alguien puede responderla, su aportación será bienvenida.

Yescas, Oscar: Acerca del método de las encuestas utilizado en política

https://oscaryescasd.blogspot.com/2021/02/acercadel-metodo-de-las-encuestas.html

Yescas, Oscar: ¿Democracia por encuestas?

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/10/democraciapor-encuestas-oscaryescas.html

Yescas, Oscar El agente de cambio social

https://oscaryescasd.blogspot.com/2019/01/el-agente-de-cambio-social-oscar-yescas.html

Yescas, Oscar: Horizontes de un paradigma emancipatorio

https://oscaryescasd.blogspot.com/2021/12/horizontesde-un-paradigma-emancipatorio.html

Yescas, Oscar: En busca de la política

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/04/enbusca-de-la-politica-oscaryescas.html

Yescas, Oscar: La política detrás de la política

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/04/lapolitica-detras-de-la-politica.html

Yescas, Oscar: La democracia y los partidos políticos

https://oscaryescasd.blogspot.com/2021/04/lademocracia-y-los-partidos-politicos.html

Yescas, Oscar; Un parto placentero: la creación del Frente Estatal de Jubilados de Sonora

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/10/unparto-placentero-la-creacion-del.html

Yescas, Oscar: Contra el autoritarismo y por la democracia participativa

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/10/contrael-autoritarismo-y-por-la.html

Yescas, Oscar: La Cuarta Transformación en Sonora

https://oscaryescasd.blogspot.com/2020/01/lacuarta-transformacion-y-la-corrupcion.html