Las consultas ciudadanas como construcción de la democracia participativa
Oscar Yescas Domínguez
20 de agosto del 2,021
En nuestra sociedad las redes sociales juegan un papel importante hoy en día, funcionan como fuentes de información principales, medios de distracción, plataformas de educación virtual y canales de comunicación. Buena parte de lo que circula en redes sociales son los famosos memes que representan una crítica realizada con fines humorísticos. Confieso que hasta hace pocos años, pensaba que los memes eran una pérdida de tiempo y de seriedad, pero después de encontrar algunos memes de grandes pensadores, cambié de opinión al analizar el gran impacto que tienen al enviar un mensaje profundo con tan sólo una imagen y unas cuantas palabras, mi percepción cambió tanto que debo reconocer que tengo una gran colección de memes de varios temas, sobre todo de memes de ciencias como la Filosofía, Sociología, Psicología, etc.
Recuerdo en este momento uno que me parece idóneo para iniciar este artículo y es uno en que aparece una foto el gran filósofo Friedrich Nietzsche con su habitual expresión de gran seriedad, luciendo su gran bigote y diciendo: “en la vida todo es cuestión de perspectivas...por ejemplo, para las langostas que estaban en las peceras del Titanic, fue un milagro lo que pasó”. Por supuesto que Nietzsche nunca dijo eso, es un invención ya que se trata sólo de un meme, pero creo que es una manera divertida e informal para llamar la atención acerca de la necesidad de mantener una mente abierta y reconocer que no hay verdades absolutas, que existe la posibilidad de que un mismo evento pueda ser percibido por dos personas de una manera diferente o incluso contraria y cuando esto suceda lo pertinente es establecer un diálogo basado en argumentos para llegar a consensos y enriquecer nuestra percepción de lo que nos rodea. El diálogo es fundamental en la sociedad moderna donde se observa una gran diversidad cultural, racial, étnica, sexual y política. Por eso es importante retomar lo que nos decía el filósofo polaco Zygmunt Bauman de que el verdadero diálogo se da cuando dos personas que piensan de manera diferente se escuchan mutuamente prestando atención a lo que el otro dice para tratar de comprender sus razonamientos y puntos de vista.
Con estas consideraciones en mente intento situar el análisis de los resultados de la consulta nacional para llevar a juicio a los últimos 5 ex-Presidentes mexicanos que se realizó en México el pasado 1ro. de agosto, ya que existen opiniones divergentes acerca de la misma y de sus resultados. Por cuestión de procedimiento, al analizar esta jornada de votación masiva debemos tomar en cuenta que es imprescindible que tomemos como punto de partida la premisa básica que se maneja en ciencias sociales que nos dice que vivimos en una sociedad en la que los procesos sociales están intervinculados y mantienen una interinfluencia entre sí, de tal forma que no hay fenómenos sociales aislados. Cabe mencionar que las consultas ciudadanas son una práctica común en varios países del mundo, situación que no vivimos en México por estar bajo el yugo de un régimen autoritario que inhibía cualquier tipo de crítica o intento de cuestionamiento a las decisiones tomadas desde la cúpula dirigente.
El origen de la consulta nacional surgió por la actividad de un Comité promovente surgido desde abajo, desde la ciudadanía, al margen de los partidos políticos quien organizó una consulta nacional en septiembre del 2,020 para recolectar firmas para que se hiciera una consulta popular con la pregunta de si se debía someter a juicio a los últimos 5 expresidentes por diferentes crímenes cometidos lo largo de 30 años de gobierno Prianista. Esta consulta popular logró superar el mínimo de firmas requeridas para autorizar la consulta nacional que era de 1,800,000 ya que se recaudaron 2,500,000 firmas. Con estos resultados el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador envió una solicitud a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que aprobara la realización de una consulta nacional y sus resultados fueran vinculantes a procesos legales. La SCJN aceptó avalar la constitucionalidad de la consulta pero atendiendo reclamos de sectores de la derecha política reformuló la pregunta que aparecería en la consulta, dejándola en condiciones de ambigüedad al punto de resultar ininteligible para muchas personas.
Hasta este punto puede decirse que que el proceso entero de la consulta ciudadana que buscaba llevar a juicio a los cinco expresidentes mexicanos, empezó como un movimiento ciudadano que buscaba el esclarecimiento de diversos crímenes y violaciones a los derechos humanos y el proceso penal a los expresidentes involucrados. Por estas razones, la consulta buscaba establecer comisiones de la verdad y promover juicios a los expresidentes, lo que implicaba enjuiciar a todo un sistema de gobierno criminal y a sus perpetradores. Recordemos que ha resultado ser una práctica común en las transiciones de un régimen autoritario, semidictatorial o dictatorial, a una régimen democrático en el que se abre la posibilidad de terminar con la impunidad y obtener justicia en diferentes casos de violación de derechos. Son aspiraciones naturales que generan expectativas sociales de que el nuevo régimen construya un verdadero Estado de Derecho y logre develar quienes son los responsables del sufrimiento humano provocado por crímenes cometidos y se logre procesar a quienes actuaron en complicidad en la realización de diversos delitos.
En esta ocasión los delitos fueron cometidos por la clase política dirigente en regímenes del pasado reciente, en los cuales estuvieron involucrados Presidentes, Gobernadores, Políticos, militares, jueces, grandes empresarios, comunicadores, etc. Son delitos cometidos durante cinco sexenios de gobierno del Prian. Estos delitos son de diversa índole y que afectaron al pueblo mexicano y que tienen en común el establecimiento de un régimen neoliberal en México que incluía la privatización de cientos de empresas públicas, el rescate financiero del sistema bancario para convertirlo en deuda pública, la corrupción en las esferas más altas del Gobierno en sus tres niveles (federal, estatal y municipal), realización de fraudes electorales en elecciones presidenciales en 1988, 2,006 y 2,012, represión brutal contra movimientos opositores, asesinato y desaparición de líderes sociales y comunitarios, detenciones arbitrarias, ejecuciones extraordinarias, impunidad durante años a los responsables de la tragedia ocurrida en el incendio de la Guardería ABC donde fallecieron 49 bebés, la desaparición de 49 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, masacres de pueblos indígenas y una supuesta guerra contra el narcotráfico que dejó cientos de miles de muertos en todos estos años y que se evidenciaba la complicidad del estado mexicano con algunos de los cárteles participantes.
Pero la derecha reaccionaria, vio el peligro que implicaba darle el poder al pueblo de participar en una toma de decisión de gran relevancia ya que el triunfo del Sí en las urnas traería como consecuencia el establecimiento de Comisiones de la Verdad para el esclarecimiento de múltiples crímenes y la consulta en sí misma serviría para poner en tela de juicio todo el sistema neoliberal. Siguiendo el ejemplo de Morena quien en el 2,018 utilizó un slogan que aglutinó a millones de personas en una sola meta: “Juntos haremos historia”, la derecha creó el slogan “La justicia no se consulta, se aplica”, que ayudó a persuadir a mucha gente de que no era necesaria la consulta por lo que no valía la pena salir de casa un domingo para votar en la consulta. Quienes así actuaron ignoraron el hecho de que quienes promovían este eslogan callaban sobre el hecho de que durante décadas los gobiernos de los 5 expresidentes que se pretendía enjuiciar, destruyeron el Estado de Derecho con la enorme corrupción que les caracterizó y prostituyeron a la justicia y a sus representantes que aceptaron participar en actos que garantizaban la impunidad de delincuentes.
Cuestionaron el uso de más de 500 millones de pesos en este primer ejercicio de democracia en el marco del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a quien acusan de manipulación social al haber promovido esta consulta. La maniobra de la derecha también incluyó la estrategia de concentrar la atención en la figura Presidencial de AMLO como principal promotor de la consulta, ocultando el hecho real de que diferentes sectores de la izquierda estuviesen participando como promotores de la consulta: el Comité promotor de la consulta que incluía la participación de centenares o quizá miles de ciudadanos, diversas agrupaciones de izquierda, algunas corrientes de Morena y el Ejército Zapatista entre otras agrupaciones.
Al finalizar el conteo se observó un alto grado de abstencionismo ya que sólo un 7.1% de integrantes del padrón electoral participaron en la consulta, o sea, votaron 6,612,459 millones y el resto, o sea, un 92.9% se abstuvieron de hacerlo. De quienes participaron en la consulta con su voto 6,463,437 (97.73) votaron por el SÍ a favor de que se enjuicie a los 5 expresidentes, mientras que 101,681 (1.53%), se manifestaron en contra de proceder contra los exmandatarios y 48,276 (0.72%) decidieron anular sus votos.
En este punto es cuando es pertinente retomar el meme de Friedrich Nietszche cuando habla de que en este mundo todo es cuestión de perspectivas, porque algunos sectores que parten de un enfoque cuantitativo opinan que la consulta nacional para enjuiciar a los expresidentes fue un fracaso debido a que fue un porcentaje muy reducido de mexicanos el que participó emitiendo sus votos en la consulta y que el número de votos fue insuficiente como para ser tomados en cuenta, por lo que la consulta no tiene validez legal para proceder en contra de los ex-Presidentes ya que sólo participó el 7.1%, es decir, de los más de 93 millones de ciudadanos mexicanos que fueron convocados a participar en la consulta nacional. Claramente esta cifra está muy lejos del 40% que se requeriría para que los resultados de la consulta, es decir, se necesitaban 37 millones para que la consulta fuera vinculante, es decir que tuvieran validez legal. Pero cabe preguntar en este punto ¿Quién puso el requisito de 37 millones de votos para que los resultados fueran vinculantes a proceso legal? Nada menos que el INE, cuyos funcionarios estaban en la mira de las acusaciones de corrupción porque participaron activamente en los fraudes electorales del 2,006 cuando le arrebataron el triunfo a AMLO y se lo dieron fraudulentamente a Felipe Calderón, quien tuvo que entrar por la puerta trasera del Congreso de la Unión para recibir la banda presidencial por la enorme cantidad de gente que rodeaba el edificio y estaba protestando por el fraude en aquel entonces. También funcionarios del INE, en aquel entonces IFE, participaron en el fraude del 2,012, cuando desconocieron el triunfo de AMLO nuevamente y subieron a la silla presidencial a Enrique Peña Nieto.
En cambio otros sectores sociales opinaron que la consulta fue un éxito en la medida de que se lograron obtener cerca de 7 millones de votos, una cifra que supera en mucho la cantidad de votos obtenidos por partidos políticos en las pasadas elecciones y que todavía disfrutan de registro político y en consecuencia de presupuesto público. De esta cifra Cuestionan irregularidades y una resistencia pasiva de parte del Instituto Nacional de Electores (organismo responsable de la logística de la consulta), argumentando que este instituto no realizó promoción masiva de esta consulta, varias casillas fueron reubicadas a última hora, no se instalaron casillas especiales para que los mexicanos que estaban fuera de sus localidades de origen pudieran votar, etc. Resaltan el hecho de que votaron por el SÍ 6,463,437 ciudadanos mexicanos que apoyan la propuesta presidencial de enviar a juicio a los ex-Presidentes. Entonces el análisis de los resultados de la consulta ciudadana para enjuiciar a los expresidentes mexicanos se torna algo así como el ejemplo de vaso que está medio vacío o medio lleno.
El hecho real es que predominó un gran abstencionismo ciudadano en esta consulta porque la gran mayoría de votantes prefirió abstenerse de participar en esta consulta, en este contexto es pertinente centrar la atención en la pregunta: ¿Por qué una gran mayoría de mexicanos decidieron no participar en este ejercicio de democracia participativa? Para responder a esta pregunta debemos contextualizar social y políticamente la jornada de consulta ciudadana. Se puede hacer mención a la labor mediática realizada por grupos de derecha para invalidar los resultados de la votación en la consulta e inhibir la participación en la misma bajo el argumento de que “La ley no se consulta, se aplica”. Podría mencionarse también que la población de México no ha asimilado en su cultura la experiencia de participar en consultas populares porque décadas del prianismo crearon un ambiente de desconfianza a las instituciones del gobierno por la gran corrupción que caracterizó su funcionamiento y que logró enquistarse y ser un problema estructural en nuestro país.
Por otro lado, debemos reconocer que a pesar de ser parte de sus promesas de campaña eliminar la corrupción en nuestro país, y después haber realizado varias acciones que representaron severos golpes a la corrupción imperante en nuestro país, a punto de cumplir tres años de gobierno con AMLO, la corrupción no ha desaparecido y ésta se encuentra presente en varias instituciones clave del Gobierno Federal, dentro de ellas se encuentran la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Instituto Nacional de Electores (INE), organismos que jugaron un papel relevante en la cimentación y profundización de la corrupción en la estructura gubernamental al haber participado en avalar fraudes anteriores y que en esta ocasión tuvieron una notable participación en la aprobación y conducción de esta consulta nacional y en los resultados obtenidos.
La primera institución, SCJN al aceptar los reclamos de la oposición y modificar la pregunta original que mencionaba de manera explícita los nombres de los cinco últimos exPresidentes y modificarla por una pregunta más general que se prestaba a la ambigüedad y a diversas interpretaciones, logró sembrar desconfianza en la población mexicana porque la pregunta quedó en estos términos: “¿Estás de acuerdo o no en que se lleven a cabo las acciones pertinentes, con apego al marco constitucional y legal, para emprender un proceso de esclarecimiento de las decisiones políticas tomadas en los años pasados por los actores políticos encaminado a garantizar la justicia y los derechos de las posibles víctimas?”.
La segunda institución (INE), con una larga trayectoria de avalar diversos fraudes electorales, evidenciando un parcialidad en cada ocasión que se requería exhibir una imparcialidad, carece de legitimidad moral para fungir como árbitro y organizador de eventos de esta naturaleza, mostró una una vez más su rostro permeado de corrupción al presentar una resistencia pasiva y actuar de diversas formas que sólo tenían como finalidad inhibir o impedir la participación ciudadana en la consulta nacional. Esto se reflejó desde un inicio al no realizar acciones de propaganda o difusión para invitar a la población a participar en la consulta nacional (a nombre de que no tuvieron suficiente presupuesto), así como en acciones de cambiar la ubicación de varias casillas electorales a última hora, la no instalación de casillas especiales para permitir la votación a los ciudadanos mexicanos que se encontraban fuera de su ciudad de origen, etc. Indudablemente que la acción de la derecha para cuestionar la consulta nacional y el papel desempeñado por los funcionarios del INE jugaron un papel importante en creación de actitudes de pasividad, indiferencia o inconformidad con la idea de participar en la consulta para enjuiciar a los 5 últimos ex-Presidentes mexicanos, pero la crítica estaría incompleta si no se hace referencia a otro factor que ha estado presente en los últimos años en la atmósfera política nacional y que afloró en las pasadas elecciones del 6 de julio pasado.
No se puede negar que AMLO ha hecho grandes cambios en la forma de gobernar el país y ha contribuido a la mejora de las condiciones de vida de millones de mexicanos, pero a tres años de su gobierno continúan violaciones a los derechos humanos sin recibir justicia, tan sólo mencionaré unos cuantos ejemplos:
El caso de los mineros de Cananea que cumplieron 14 años de huelga sin recibir justicia para su causa y el dueño de Grupo México adquiere más poder económico cada día, sin dar muestras de intentar atender las demandas de los mineros y al contrario, viola derechos humanos y laborales de los pobladores de Cananea al excluir de las contrataciones a los habitantes de ese pueblo minero que padece los efectos de la contaminación por las labores realizadas por la compañía minera en sus terrenos.
El segundo caso también está relacionado con el grupo México y la impunidad con la que actúa y se refiere a la contaminación del río Sonora por el derrame de más de 40,000 metros cúbicos de lixibiados de sulfato de cobre acidulado en el arroyo tinajas, mismos que llegaron al lugar donde nace el río y la mancha tóxica avanzó por los 254 kilómetros a través del mismo arrastrando todo ese líquido contaminante afectando la salud de los habitantes de los pueblos aledaños al río. Grupo México simuló realizar una limpieza del río y declaró que sus aguas ya no estaban contaminadas, información que fue desmentida por la Dra. Reina Castro Longoria, investigadora de la Universidad de Sonora. El Gobierno federal ofreció apoyos a la población y anunció la construcción de una clínica para atender a los afectados, misma que no se concluyó y está sin funcionar hasta el momento.
El tercer caso es el asunto de la Guardería ABC que sigue sin recibir justicia porque los verdaderos responsables de la tragedia continúan sin ser llevados a la justicia (dueños de la Guardería) y si bien es verdad que se ha avanzado en la solución a este problema logrando acuerdos con parte del grupo de padres de los 49 bebés fallecidos y decenas de niños afectados por quemaduras, todavía existe un número de padres de familia reclamando reparación de los daños, por lo que se puede afirmar que la justicia no ha concluido satisfactoriamente con este caso y la tragedia ocurrida hace doce años todavía constituye una herida abierta para el pueblo mexicano.
Un cuarto caso de injusticia es la desaparición de los 49 estudiantes normalistas de Ayotzinapa que sigue sin aclararse, de antemano sé que todos estos asuntos que menciono ocurrieron durante el prianismo, pero también estoy considerando que ya transcurrieron tres años del nuevo gobierno y son asuntos que no se han tratado en forma debida por los funcionarios del nuevo régimen encabezado por AMLO.
Finalmente, un asunto relacionado con AMLO que está generando inconformidad social, es su firme posición de que se regrese a clases presenciales dentro el próximo 30 de agosto, en un momento de incremento del número de casos de contagios durante la tercera ola y que ha habido días en los que se han batido récords en el número de contagios diarios, por lo que el sentido común y una perspectiva científica permiten predecir que si se regresa al sistema de clases presenciales aumentará la movilidad social y con ella, la posibilidad de un aumento drástico de los casos de contagio a nivel nacional.
No quisiera ser malinterpretado y percibido como antilópezobradorista, confieso que mi voto en la próxima consulta ciudadana para decidir si continúa López Obrador como Presidente, será indudablemente a favor de que siga en el cargo hasta que termine el período, el uso de la crítica social obliga a decir lo que muchos callan y en mi caso, la he ejercido durante toda mi vida y en este momento no es la excepción.
Pero la verdadera decepción que ha sufrido el pueblo mexicano proviene del partido gobernante, es decir, de Morena, porque a partir del triunfo electoral del 2,018 y la toma del poder político, Morena abandonó a los movimientos sociales y se desató en su interior una lucha interna entre las diferentes corrientes que formaron ese partido para ocupar posiciones de poder dentro del gobierno federal y del propio partido político. El alejamiento de los movimientos populares que mantuvo Morena durante sus tres primeros años como partido en el poder, se agudizó con la forma de gobernar de algunos de sus candidatos que gobernaron varios municipios del país y que no mostraron diferencia alguna con la forma de gobernar del prianismo, por lo que el cambio anunciado de la “Cuarta Transformación” fue sólo un discurso que estaba alejado de la realidad de millones de mexicanos.
Lo que provocó mayor distanciamiento de la población, simpatizantes de Morena y de militantes del propio partido con esta institución política, fue el rostro de autoritarismo que mostró al imponer una lista de candidatos “elegidos por el método de la encuesta”, en lugar de realizar elecciones internas, lo cual fue interpretado como un fraude simulado de encuesta por los propios militantes del partido en varios Estados de la República mexicana. En diversas ciudades del país se presentaron rebeliones en contra de la imposición de candidatos y protestas por la ausencia de democracia participativa, pero las dirigencias nacional, estatales y locales se mantuvieron firmes en conservar la lista de candidatos que supuestamente surgió de una encuesta. En el caso de Sonora, en la capital del Estado, los militantes de Morena tomaron el edificio de Morena estatal, llamando “traidor” a Alfonso Durazo y lo mantuvieron en su poder varias semanas, hasta que terminaron por entregarlo después de las elecciones.
Con este alejamiento de los movimientos colectivos, con el autoritarismo exhibido antes las elecciones del pasado 6 de julio y una creciente división interna , Morena dejó de ser el “partido de la esperanza” y se convirtió en el partido de la decepción para miles de mexicanos que esperaban un verdadero cambio social con la llegada de AMLO a la Presidencia de la República y de Morena como la principal fuerza política en el país. Este distanciamiento popular con el partido en el poder se reflejó en las cifras de votación obtenidas en las elecciones del pasado 6 de julio cuando Morena ganó la mayoría de los puestos de elección popular, pero no fue con el voto aplastante que obtuvo en el 2,018. Al contrario, perdió las elecciones en la gubernatura de Nuevo León y la Presidencia municipal de Hermosillo, Sonora, lugar donde impuso el intento de reelección de Célida López, mujer que se ganó el repudio popular por su autoritarismo, ausencia de liderazgo y conocimientos de cómo gobernar y gracias a ella Morena tuvo su debut y despedida en la Presidencia de la capital sonorense.
Por lo regular, en cada elección intermedia el principal enemigo que enfrentan los partidos políticos en la contienda electoral es el abstencionismo ya que históricamente en este tipo de elecciones es donde se presenta una reducción importante de la participación ciudadana. En las pasadas elecciones del 6 de julio el mayor error que cometió Morena consistió colocar a sus simpatizantes y electores en una situación de obligarlos a votar por alguien que no los convencía, personas que tuvieron la oportunidad de gobernar a nombre de Morena y los hicieron en forma desastrosa (como Célida López en Hermosillo), que tenían una trayectoria cuestionable con un pasado político vinculado a las fuerzas del Prian, o que no tenían experiencia política alguna pero eran personas cercanas o familiares de funcionarios de primer nivel en Morena, fueron colocadas como candidatas representando a Morena y sucedió lo inevitable, los votos a favor de Morena se redujeron considerablemente y en algunos casos fueron en contra, como sucedió en la capital sonorense en donde Célida López sufrió un rechazo rotundo del electorado hermosillense para evitar su reelección. De manera inexplicable, el futuro Gobernador de Sonora la incorporó a su equipo de trabajo asignándole un cargo de alto nivel como responsable de Turismo en el Estado, decisión que fue vista con malestar por miles de sonorenses.
Es en este contexto donde debemos ubicar una explicación complementaria al abstencionismo que se observó en las elecciones del 6 de julio pasado en la consulta ciudadana para enjuiciar a los ex-Presidentes, no fue solamente la campaña de la derecha opositora al gobierno mexicano, o la actuación cuestionable de los funcionarios del INE, resulta evidente que la actuación de Morena comparte gran parte de la responsabilidad en el alto porcentaje de abstencionismo en la consulta ciudadana. Es evidente que Morena ganó la mayor parte de los puestos de elección popular en las elecciones intermedias, pero también hay que reconocer que por el autoritarismo y antidemocracia exhibida perdió capacidad de convocatoria y atraviesa por una crisis de credibilidad y representatividad que resultaron de los errores políticos que ha cometido en su corta vida.
Por estas razones, el alto grado de abstencionismo que se reflejó con mayor evidencia en la consulta ciudadana, no se puede interpretar como un resultado de apatía o indiferencia a la política de la ciudadanía mexicana, se encuentra una pérdida de confianza en las instituciones políticas, una respuesta de decepción porque la esperanza que trajo Morena, se transformó en desconfianza a la dirigencia de ese partido, que en su inicio alimentó la promesa del cambio social en la forma de hacer política, pero que en los hechos se actuó con autoritarismo y engaño colocando a los electores en un escenario electoral de imposición de candidatos y la falta de opciones que convencieran y simpatizaran realmente con sus preferencias y necesidades.
Aún con todas estas condiciones en contra, cerca de 7 millones de mexicanos acudimos al llamado para votar en la consulta ciudadana y una abrumadora mayoría de quienes votamos nos manifestamos por el SÍ al juicio a los cinco ex-Presidentes que implementaron durante 30 años políticas neoliberales en nuestro país, que afectaron a una inmensa mayoría de la población cometiendo una serie de delitos en un ambiente de corrupción en todos los niveles de las estructuras de gobierno y solapados por una impunidad que provenía desde las instituciones de procuración de justicia que avalaron fraudes y cubrieron delitos actuando con complicidad.
Todos sin excepción tienen derecho de manifestar su opinión sobre los resultados de la consulta ciudadana, pero nadie puede negar la validez de los más de seis millones que votamos por el SÍ al juicio a los expresidentes. Si bien el abstencionismo predominó, eso no es motivo para invalidar la voluntad de quienes participamos en este ejercicio de democracia participativa. En cualquier elección, si se presentara un abstencionismo parecido, se reconocerían los resultados de un 7% de quienes participaran en las elecciones, no importaría el alto grado de abstencionismo. El problema que estamos enfrentando es que se da más valor al abstencionismo que a la cifra de votos registrados en la consulta ciudadana. La estrategia de colocar un tope alto para que los resultados fueran vinculantes llevaba desde un inicio la intención oculta de proteger los intereses de los expresidentes y de quienes actuaron como cómplices en la ejecución de un delito, dentro de estos cómplices con alto grado de involucramiento que podrían haber sido juzgados son precisamente los actuales funcionarios del INE quienes han sido los primeros en desconocer la validez de la votación.
¿Qué es lo que sigue después de los resultados obtenidos en la consulta ciudadana? Primero, debemos reconocer que cerca de 7 millones de votos no pueden ser tirados a la basura, se debe aceptar la validez de los mismos porque son parte de una expresión popular, una demanda ciudadana que es producto de un ejercicio de democracia participativa. Ignorar los resultados de la consulta popular, equivaldría a enviar un mensaje negativo para el pueblo mexicano que está en proceso de asimilación en su cultura la figura de la consulta ciudadana, porque décadas de dictadura prianista impidieron la realización de ejercicios democráticos y si hoy se desconocen los resultados de esta consulta nacional, generará una mayor frustración y aumentará las posibilidades de mayor abstencionismo en próximas elecciones y nuevas consultas.
Segundo, es importante tomar la palabra a quienes manejaron el eslogan “La ley no se consulta, se aplica”, ya que existen suficientes evidencias de varios actos de corrupción de personajes del anterior sexenio y de los que lo precedieron, debemos alzar la voz exigiendo que nuestras autoridades apliquen la ley sin excepción alguna, que se hagan públicos los resultados de las investigaciones que se hayan realizado de funcionarios que incurrieron en actos de corrupción en sexenios anteriores y se proceda a iniciar procesos penales que incluyan decomiso de bienes, congelamiento de cuentas bancarias y reclusión de los imputados. La ciudadanía quiere ver acciones concretas de responsabilizar penalmente a individuos que se enriquecieron en forma ilícita cuando ocuparon cargos de servidores públicos, de manera particular se espera que finquen cargos penales a los 5 expresidentes. Más de 6 millones de ciudadanos mexicanos votaron por el SÍ al juicio a los expresidentes y este reclamo no puede ser ignorado, sobre todo cuando hay evidencias de delitos cometidos que no pueden ser ignorados. Lo que procede entonces es la formación de comisiones de la verdad para la investigación de los 5 expresidentes y si el gobierno de AMLO no toma la iniciativa de La ley no se consulta, se aplica, corresponde a la ciudadanía exigir el cumplimiento de la ley, creando organizaciones civiles que actúen como tribunales ciudadanos para encontrar la verdad y forzar al gobierno a cumplir con la ley.
Los nuevos Gobernadores y Presidentes municipales de Morena que tomarán posesión el próximo mes tienen frente a sí mismos la oportunidad de recuperar la credibilidad perdida por Morena, empezando por manejar una política de austeridad en los sueldos de los altos funcionarios, enfrentando directamente los casos de corrupción y procediendo a aplicar la ley llevando a juicio a quienes hayan cometido delitos durante el tiempo que formaron parte de los gobiernos que están en su fase final. En el caso de Sonora, el futuro Gobernador Alfonso Durazo deberá ir más allá de declarar que recibe a un Estado en quiebra financiera y tendrá que asumir su responsabilidad como servidor público, iniciando su gobierno con investigaciones sobre corrupción, violación de derechos humanos, despojo de terrenos, desvío de recursos públicos y otras acusaciones que rodean a Claudia Pavlovich la Gobernadora saliente, para proceder a fincar responsabilidades a ella, a sus colaboradores, familiares y amistades que se hayan favorecido de su cargo como Gobernadora.
En el momento histórico que nos tocó vivir es necesario reconceptualizar todo el horizonte político, los ciudadanos debemos tomar en cuenta de que a nivel mundial se enfrentan dos fuerzas políticas de enorme poder. Por un lado, se encuentra el proyecto capitalista neoliberal que nos está conduciendo a nuestra autodestrucción en su intento de mantener un equilibrio entre una producción masiva y un consumo masivo para seguir obteniendo una maximización de su beneficio económico para sólo unas cuantas personas. En este proyecto se contempla la explotación laboral, la explotación irracional de recursos naturales, la destrucción de ecosistemas y la contaminación de ríos, lagos y mares con la producción de deshechos químicos y miles de toneladas de basura contaminante producida por el consumismo como estilo de vida predominante.
El neoliberalismo exige la aplicación de políticas neoliberales que le permitan continuar manteniendo una maximización de sus beneficios económicos, aún cuando esto implique eliminar derechos de los trabajadores, modificar contratos colectivos, eliminar derechos de salud y de jubilación, afectando a millones de personas al reducir el presupuesto público para salud, educación y prestaciones sociales. El neoliberalismo contempla la privatización de todo tipo de servicios públicos como salud, educación, limpia pública, alumbrado público, etc., intenta obligar a que los Estados Nación abandonen su función de procurar el bienestar social de la población y acepten políticas neoliberales que implican reformas a las constituciones y mutilación de contratos colectivos de trabajo. Estamos viviendo tiempos en los cuales el poder económico se ha divorciado del poder político y el desarrollo de la tecnología permite la transferencia de grandes cantidades de capital financiero con el sólo clic de un dedo en algún teléfono celular. Los Estados Nación se ven sometidos por un Poder corporativo que en estos tiempos de globalización aumentan su poder de influencia.
Pero, por otro lado, existe un proyecto de autonomía individual y colectiva de grandes sectores de la población que enfrentan resistencia a la implementación de políticas neoliberales y se rebelan a continuar por un camino que los conduce a una inevitable precarización de sus vidas y a una segura incorporación a los millones de personas que viven en condiciones de pobreza, miseria y exclusión social. Participan en este proceso de lucha por emancipación del ser humano y por la transformación de la realidad social, miles o millones de personas que en diferentes países se oponen a los aumentos a la gasolina, a las reformas de sus constituciones, a la desaparición de sus derechos laborales y en defensa de sus derechos a la salud.
Enfrentamos una crisis social que se manifiesta en una crisis económica, política, ecológica y sanitaria. Dentro de la crisis política, se observa una crisis de las instituciones que forman parte del gobierno que no cumplen con la misión para la que fueron creadas porque que todavía están permeadas de corrupción en su interior y esta crisis afecta a los partidos políticos que enfrentan una grave crisis de representatividad (incluido Morena en México), a los sindicatos que enfrentan una crisis de liderazgo porque han abandonado la función para la cual fueron creados que era defender los intereses y derechos de sus agremiados.
En este contexto social los trabajadores activos deben proceder a democratizar a sus sindicatos, relevando de sus cargos a quienes no cumplen con su función de defender los derechos de los trabajadores, porque el neoliberalismo tiene como objetivo el debilitamiento y desaparición de los sindicatos para proceder a eliminar contratos colectivos y regresar a la contratación individual perjudicando los derechos de los trabajadores.
La mayoría de los ciudadanos no se siente representada por los partidos políticos, ni por los sindicatos y se encuentran solos enfrentando una ofensiva neoliberal que afecta a los trabajadores y ciudadanía en general, por esta razón es necesario que la ciudadanía comprenda que lo que permite la destrucción de la calidad de vida y nuestros derechos es la existencia de un conformismo que está presente en el consumo, en la política, en la cultura y en la ideología. Debemos cuestionar el estado actual de las cosas y no ver como algo natural que no surtan los medicamentos que necesitamos en los hospitales públicos, cuando nos han descontado durante décadas de nuestros ingresos una cantidad por servicios médicos. Tampoco debemos aceptar como algo natural que se intente acabar con el derecho a la jubilación, o que se nos niegue el pago de nuestras jubilaciones a nombre de que no hay dinero” como sucedió en el ISSSTESON a principios de este mes de agosto cuando se pagaron las jubilaciones con diez días de retraso y existe la amenaza de que se repita la experiencia en este próximo mes de septiembre porque Alfonso Durazo declaró que recibe un Estado en quiebra financiera. Debemos dejar atrás las actitudes conformistas y tomar la iniciativa aumentando nuestra participación social para defender nuestros derechos laborales, de salud y de jubilación, porque el derecho a la salud, a la estabilidad en el empleo y a la jubilación fueron el resultado de luchas obreras durante el siglo pasado y hoy el neoliberalismo intenta borrarlos de un plumazo.
Debemos retomar nuestra condición de homo sapiens y empezar a cuestionar la desigualdad social que afecta a la mayoría de integrantes de nuestra sociedad y empezando por un cuestionamiento individual de la afectación de nuestros derechos humanos, laborales y de salud, empezaremos a construir la idea de autonomía, de crítica y de autocrítica. Esta interrogación nos lleva a la idea de la democracia, de la justicia y de la igualdad social. El desarrollo de un pensamiento autónomo y el ejercicio de la critica social es lo que ha permitido el surgimiento de movimientos sociales que han realizado grandes cambios sociales al actuar la población en forma masiva y organizada se conquistaron libertades parciales, derechos humanos, no retroactividad de leyes, separación de poderes y nuevos derechos. Las libertades que disfrutamos no fueron un regalo del capitalismo, fueron arrancados a través de grandes luchas de movimientos colectivos.
Ante la crisis de representatividad que enfrentan partidos políticos y sindicatos, la ciudadanía se ve hoy en la necesidad de construir nuevos movimientos colectivos que realmente los representen y aglutinen a todos aquellos sectores que se encuentran dando una lucha en forma particular en defensa de sus derechos. Debemos partir de la idea de que la historia es una creación humana, que somos sujetos históricos y que podemos cambiar la historia si actuamos en forma unida, organizada y colectiva. Necesitamos desarrollar una autonomía individual para construir una sociedad autónoma y en estos tiempos de globalización requerimos construir un poder popular para enfrentar al poder corporativo y al sistema capitalista neoliberal y la manera de hacerlo es impulsando un proceso de empoderamiento individual y comunitario, al reconocer que en tiempos de globalización, los problemas locales tienen causas globales y que lo personal es político, porque la política atraviesa todo lo social, incluido la esfera de lo individual.
En la medida de que nos reconozcamos como seres sociales que pertenecemos a una comunidad en la cual compartimos el impacto de problemas sociales que nos afectan en nuestra vida privada, veremos la necesidad de construir organizaciones realmente representativas y entrar en la lucha por nuestros derechos asumiendo el rol de actores políticos que queremos una transformación de la realidad que estamos viviendo. En Sonora ha surgido un movimiento colectivo llamado Movimiento 30 de julio de Derechohabientes del ISSSTESON, que aglutina a trabajadores activos y jubilados de varias dependencias y que pertenecen a varios sindicatos y están luchando por defender su derecho a la salud y por una jubilación digna.
Dentro de las consignas de lucha de este movimientos se encuentra la recuperación del ISSSTESON, el rechazo a la propuesta de reforma a la ley 38 del ISSSTESON como solución a la crisis financiera del instituto, investigación a ex-Gobernadores y sus colaboradores y el decomiso de sus propiedades.
¿Qué pasará si Alfonso Durazo no actúa como se espera y protege con el manto de la impunidad a Claudia Pavlovich que le hereda un Estado en quiebra financiera? Si Andrés Manuel López Obrador está llamando a una consulta ciudadana en marzo próximo para decidir si continúa en su cargo, podemos seguir el ejemplo con nuestros Gobernadores y en el caso de Sonora si continúa la impunidad y corrupción, sin duda alguna realizaremos una consulta ciudadana para pedir dos cosas: que se investigue a los exgobernadores y que el nuevo Gobernador renuncie a su puesto. Ese es el poder de las consultas ciudadanas como mecanismos de construcción de la democracia participativa que permiten involucrar a los ciudadanos en un papel de actores políticos en la solución de grandes problemas sociales. No importará que seamos un porcentaje reducido los que votemos, porque esos votos tienen más valor que el abstencionismo.
La participación en las elecciones de este domingo fue en promedio de entre 30 y 40% en las seis entidades
La jornada electoral del domingo estuvo marcada por un bajo nivel de participación de los electores. En promedio, hubo una participación de solo 33% de los electores en las seis entidades que fueron a las urnas.
https://abcnoticias.mx/acusan-al-ine-de-no-promover-consulta-popular-sobre-ex-presidentes/215439
Más del 80% de la ciudadanía votó por el Sí
https://mexico.as.com/mexico/2021/08/02/actualidad/1627879702_216250.html
https://www.milenio.com/politica/activistas-proponen-creacion-de-tribunal-de-los-pueblos
Enjuiciar al sistema liberal
Mayor número de abstencionismo en las elecciones de México 2,021
