martes, 26 de julio de 2022

 

Una visita al Isssteson

Oscar Yescas Domínguez

26 de julio 2022



El día de hoy fui a consulta con médico general al Cias centro del Isssteson, una vez que salí de la misma, decidí dirigirme al área de Odontología para pedir una revisión a mi dentadura porque el servicio que estuve recibiendo en esa área se suspendió cuando inició la pandemia a principios del 2020 y pensé que después de dos años ya podrían haber reanudado el servicio dental.

Al llegar al lugar y solicitar su atención, el personal médico me respondió que sólo atendían casos de urgencias, que no estaban dando servicio “normal” porque no estaban en condiciones de hacerlo. Les insistí para que sólo me hicieran una valoración porque no había ido al dentista desde antes de la pandemia. Como no tenían pacientes programados aceptaron recibirme de buen grado y entré al cubículo de Odontología donde se encontraban dos enfermeras y un médico, quienes después de registrar mis datos y checar mi expediente me pasaron a la mesa donde me pidieron me recostara y procedieron a la revisión de mi dentadura.

Luego de una exhaustiva revisión en la cual el médico dictaba el estado de cada uno de mis dientes a una de las enfermeras que tomaba notas mientras la otra observaba, me informaron que había mucho trabajo por hacer en mi caso porque necesitaba endodoncia en algunos dientes, pero que el Isssteson no brindaba ese tipo de servicio. Les pregunté si al menos podían hacerme una limpieza general de mi dentadura y me sorprendió la respuesta que me dieron: "no podemos hacer nada porque no tenemos servicio de agua, no funciona la llave de presión del agua que usamos para limpiar la dentadura y tampoco funciona el extractor de la misma”. Según me informaron los aparatos odontológicos no reciben mantenimiento desde mucho antes de la pandemia, se encuentran en mal estado y a pesar de que han solicitado que vengan a darles servicio y mantenimiento, hasta el día de hoy no han recibido respuesta.

Debido a lo anterior me sugirieron que buscara atención odontológica por la vía privada porque no tenían fecha programada para brindar el servicio en forma normal. Fue entonces que me di cuenta de que el servicio de Odontología en el Isssteson está suspendido, no por motivos sanitarios en prevención de la pandemia del covid-19, sino que en realidad se suspendió el servicio por falta de mantenimiento en los aparatos que utilizan, es decir, estamos frente a un problema administrativo que impide dar este servicio, no es un problema de prevención del covid lo que impide reanudar el servicio de Odontología a los derechohabientes del Isssteson.

Mientras me decían esto el dentista y las dos enfermeras, los observaba y sentí que me estaban dando un trato profesional, realizado con cortesía, pero al mismo tiempo exhibían cierta pena ajena porque por más disposición que mostraran, estaban imposibilitados para hacer su trabajo debido a que su equipo de trabajo no estaba en condiciones para utilizarlo y el equipo no estaba funcionando porque las autoridades administrativas no atendían su petición de darles servicio y ponerlo a funcionar para satisfacer las necesidades de Odontología de los derechohabientes.

Salí de esa clínica en cuya entrada está un individuo sentado, que no dice ni los buenos días, no da orientación alguna, pero que sólo está sentado a la entrada como para justificar su presencia y su sola presencia me recordó a los cientos de empleados del Isssteson que fueron considerados trabajadores “no esenciales”, al igual que aquellos que cobraban sin trabajar, los la los llamados, es decir, “aviadores”, que de manera inexplicable no fueron despedidos por la nueva administración y que aún siguen recibiendo su sueldo de los recursos financieros que se otorga al Isssteson, aún cuando no aporten nada productivo en el funcionamiento del instituto. Según la información de que dispongo el único despedido fue el Doctor Danilo Sotelo que ocupaba el cargo de SubDirector Médico.

El asunto concreto es que observo dos situaciones distintas que están afectando el funcionamiento del Isssteson y a los derechohabientes del mismo: por un lado, pude constatar de manera directa que el personal de Odontología no realiza su trabajo porque no están en condiciones de hacerlo a causa de que el equipo que utilizan no está funcionando, necesita mantenimiento y las personas responsables de hacerlo no están cumpliendo sus funciones y responsabilididades.

Esta falta de respuesta de las autoridades administrativas en la petición de dar mantenimiento al equipo odontológico es perjudicial en dos sentidos, primero porque no satisface las necesidades de Odontología de los derechohabientes a pesar de que se les sigue cobrando una mensualidad por concepto de servicios médicos y segundo porque perjudica a las finanzas del instituto el tener personas que no trabajan (en este caso porque no tienen el equipo adecuado) y esta situación representa un gasto innecesario en “horas-hombre” que perjudica las finanzas del Isssteson.

Esta visita al Cias Centro me generó la pregunta ¿Cuántas personas se encuentran en la situación del personal del área de Odontología?, es decir, ¿Cuántas personas no pueden realizar su trabajo aún cuando tengan suficiente motivación y estén calificados, pero no trabajan como es debido porque no tienen los materiales y el equipo suficiente para hacerlo?

Por otro lado, surgen los siguientes cuestionamientos: ¿Cuántas personas existen en el Isssteson que cobran su sueldo sin realizar un trabajo relevante, es decir, esencial? ¿Dónde fueron colocados aquellos “cientos de aviadores” que denunció en redes sociales haber encontrado el Director del Isssteson y que siguen dentro de la nómina del instituto a pesar de que incurrieron en delitos penales?

Después de que escribí el artículo Pateando el bote en el Issteson recibí este mensaje y pregunté si podía compartirlo pero me pidieron que lo hiciera en forma anónima:

“Hola lic. Buenas tardes estaba viendo su texto del mov 30 de julio y le quiero decir en lo referente a que ay mas personal administrativo que medicos y efectivamente isssteson es administrativo no medico y pues es un hospital ante todo y lo otro es que al personal sindicalizado tanto administrativo como medico en lo referente a los incentivos ellos cada 3 meses tienen una quincena mas de su sueldo en bono de puntualidad y asistencia y anual reciben de 20 a 30 dias extras en abril de su sueldo osea su quincena mas el trimestral mas el anual despues de 3 notas buenas reciben el anual imaginese lo que es para una institucion que carece de medicos enfermeras e infraestructura hospitalaria en general por eso es mas administrativa que hospital espero no ser mala en esto pero siento que tenia el deber de decirle a alguien mi muy humilde punto de vista de esto que se y disculpe mi mala ortografia y gracias por sus comunicados y siga pensando en que mas escribir de isssteson que hay mucha tela que cortar de esta gran institucion lastima que la tengan tan lastimada porque es nuestro futuro mas bien nuestro futuro esta en sys manos como jubilados que somos y dependemos la gran mayoria de ella”.

La situación actual del Isssteson me recuerda a la situación actual de la Universidad de Sonora, en donde desde hace varios años se redujo la contratación de maestros de tiempo completo porque las plazas que iban quedando vacantes simplemente desaparecían y el presupuesto asignado para las mismas se destinaba a la contratación de personal de administrativo con nombramiento de confianza y sueldos elevados (Esta situación me inspiró a escribir el artículo El club de los privilegiados del cual anexo el link al final de este artículo). Por esta razón en la Unison existe más personal administrativo que personal académico y en el caso de las autoridades administrativas de alto nivel el monto de sus sueldos triplica los sueldos que perciben los académicos de mayor nivel educativo y mayor antigüedad (el sueldo de Rector asciende a 130,000 pesos al mes), perjudicando con ello la educación que brinda el Alma Mater sonorense porque la mayor parte de los recursos se destinan “al pago de nómina”.

En el caso del Isssteson, la cantidad de personal administrativo se incrementó al grado de llegar a ser excesiva y la contratación de personal médico se redujo por lo que el número de médicos y enfermeras es escaso, sobre todo en el caso de los médicos especialistas, esto es lo que permite entender la tardanza y demora en recibir una cita con un médico especialista porque es un grupo muy reducido y una población muy amplia la que demanda sus servicios.

La sobrepoblación administrativa representa un gran problema en el caso del Isssteson porque lejos de ser una institución que dedique sus recursos a atender la salud de los derechohabientes, se ha convertido en una institución donde predomina la población administrativa y una gran parte de ésta no tiene relación alguna con los servicios de atención a la salud, por lo que esta situación perjudica la salud y vidas de los derechohabientes debido a que la mayor parte del presupuesto del Isssteson se va en el pago de nómina.

La situación de atención a la salud se complica cuando se observa que los altos funcionarios de la administración del Isssteson siguen el ejemplo de las autoridades de la Universidad de Sonora y reciben sueldos superiores a los $100,000 pesos mensuales, lo cual resulta en verdad inaceptable en una institución que se recibió “declarada en crisis financiera”, pero lo que sí es claro es que la crisis no es pareja, porque los funcionarios de alto nivel “están del otro lado de la línea” y no sufren las consecuencias de la crisis financiera del Isssteson, mientras que los derechohabientes debemos acudir a la medicina privada para comprar nuestras medicinas al no encontrarlas en las farmacias del Isssteson y atender nuestra salud en forma privada, como lo muestra el caso del área de Odontología.

Esto no evita que en el discurso oficial se nos diga que la crisis financiera provoca las fallas en los servicios que ofrece esta institución, algunas de estas fallas se han señalado hasta el cansancio, como el retraso en la consulta con médicos especialistas, el retraso en el servicio de estudios de imagenología, falta de equipo médico suficiente, persistencia en la falta de medicamentos para atender enfermedades crónico-degenerativas y ahora le podemos sumar la ausencia de servicios de Odontología por fallas en el mantenimiento de equipos, es decir, por fallas de administración.

Lo anterior no evita el que tanto a trabajadores activos, como a pensionados y jubilados se siga aplicando el descuento por concepto de servicios médicos, unos servicios que están lejos de cubrir las expectativas y necesidades de los derechohabientes. Esto nos lleva a reforzar la lucha por recuperar nuestros derechos a la salud, exigiendo se le de mantenimiento al equipo del área de odontología, continuar la demanda de que se reanude el servicio médico y de farmacias los fines de semana y la exigencia de un programa de austeridad financiera que contemple la reducción de los sueldos que perciben las autoridades administrativas del Isssteson.

Mientras caminaba rumbo a mi automóvil, experimenté una mezcla de sentimientos controvertidos, por un lado, una satisfacción por la atención recibida del médico general que me atendió inicialmente, porque me dieron en farmacia el medicamento recetado, por el trato recibido por el dentista y las enfermeras, lo que me indicaba que algunas cosas están mejorando.

Pero por otro lado, sentía cierta indignación por las múltiples fallas que sigue presentando el servicio del Isssteson, como las que aquí se describen en este caso que son realmente indignantes porque darle servicio a los equipos usados por los odontólogos y enfermeras no requiere de una cuantiosa inversión y al no hacerlo, afectan a los derechohabientes que están pagando una cuota por servicios médicos ineficientes y mantienen a empleados profesionales sin poder hacer nada mas que hacer acto de presencia y cobrar sus sueldos.

La responsabilidad no es de estos empleados que muestran disposición a realizar su labor, radica más bien en aquellos que cobran sueldos amorales al interior de una institución en estado de crisis financiera y permiten que sucedan este tipo de ineficiencias administrativas. Por lo pronto, debemos seguir cumpliendo con nuestra responsabilidad ciudadana y denunciar aquello que nos parece incorrecto o injusto, organizarnos para realizar una protesta colectiva y exigir una distribución más transparente de los recursos financieros.

Yescas, Oscar: Pateando el bote en el Isssteson

https://oscaryescasd.blogspot.com/2022/07/pateandoel-bote-en-el-isssteson_13.html

Yescas, Oscar: El Club de los privilegiados

https://oscaryescasd.blogspot.com/2018/07/el-club-de-los-privilegiados.html

4 comentarios:

  1. Una radiografía completa de la deficiencia administrativa en salud Sonora

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  2. FALTA ISSSTE,SSA,FSTSE, URGEN CAMBIOS DE DIRIGENTES,,SI NO,NO ESTAMOS HACIENDO NADA,URGEN CONTRA Y AUDITORIAS,,A TODO EL SECTOR SALUD

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  3. SON LOS MISMOS DIRIGENTES PARISS DE HACE 33 AÑOS,,OJO

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  4. EN ISSSTE EMPALME,NO TENEMOS URGENCIAS,NI RX,NI AMBULANCIA,,ES UN SIMPLE SSA,SIN SERVICIOS URGEN AUDITORIAS

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